❇️09

2K 205 0
                                    

Maratón 2/4

Casa de la familia Kim.

08:40 p.m.

Habíamos terminado de hablar ya hace unas cuantas horas, Jung Seok se quedó muy pensativo después de leer aquellos cortos textos de mi teléfono y después de lo que dije, yo solo puedo pensar en que de verdad iba a cometer una estupidez otra vez, era muy obvio que él no era quien envió esos mensajes y que la persona que lo hizo se equivoco de numero ya que no volvió a escribir.

¿Por qué lo haría él? 

Claramente me dijo que ya no me consideraba nada, ni siquiera una conocida y estoy segura de que él no volvería a hablarme, se que debo olvidarme de todo pero fue mi primer amor y mi primer mejor amigo.

¿Que puedo hacer? Es difícil olvidarte de alguien que fue muy especial.

Esto es desesperante para mi, por mas que trato de olvidar saliendo con los chicos, siempre de alguna forma hay algo que se empeña en recordarme que él existe. Lo lugares a donde íbamos esos son los peores, me hacen recordar cada momento feliz que tuvimos.

Suspire pesadamente observando la ventana de mi habitación con mirada algo triste, me prometí no llorar por eso pero, soy humana. Y tengo que llorar para desahogarme, no puedo seguir reteniendo el dolor y solo ocultarlo con una sonrisa, solo me hace más daño, tal vez lo mejor era quedarme en mi habitación hasta olvidarme de todo como planeé cuando él me dejo claro que ya no éramos amigos, ni siquiera conocidos.

— ¿Shinnie? —escuche la voz de mi hermano y luego leves toques en mi puerta.

— esta abierto —fue lo único que dije sin voltear a ver a la puerta, recostada en la cama abrazando una almohada.

Escuche como la puerta se abrió y yo simplemente me quede en la misma posición, dándole la espalda a la puerta, luego esta se cerró, sentí sus pasos acercarse a mí y la cama hundiéndose, sentí como era abrazada por él. Me sentí protegida pero indefensa a la vez en ese momento.

— No me gusta verte triste. —esto lo dijo casi en un susurro y su voz también sonaba algo apagada, así somos, si uno está triste el otro también.

— No lo estoy —mentía, aunque él ya lo sabia, igual dije que no lo estaba. Solo por que no me gusta preocuparlo.

— Lo estas. —dijo mientras se acomodaba para mirar al techo— Te conozco perfectamente ¿Recuerdas? —sabía que se daría cuenta era obvio somos hermanos, hermanos muy unidos los cuales siempre se apoyan el uno al otro— Haré que lo olvides, y si eso implica... —lo demás no lo escuche ya que él se apartó y se levantó susurrando el resto de lo que dijo, me miró antes de abrir la puerta— duerme un poco, te despertaré cuando llegue mamá para cenar.

Solo asenti con la cabeza pero es obvio que no noto esto, porque lo hice justo cuando salía de la habitación, como dijo cerré los ojos para intentar dormir un poco, no estaba mal dormir unos, ¿30 minutos? Mama siempre llega a las 09:30 p.m. así que tendría suficiente tiempo para descansar un poco, ya que estoy muy segura de que Dian se quedara a dormir hoy y con "dormir" me refiero a no dejarme dormir en toda la noche, por hacer pijamada.


——————————

No olviden votar y comentar.

Gracias por darle amor a esta historia.

No Somos Amigos - ChittaphonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora