Capítulo 2.- Daria

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Daria

—Sigo sin entender porque tu y el se llevan tan mal, parece que no pueden verse sin pelearse.

—Ani, si vivieras con él lo entenderías —respondí sentándome en mi lugar.

—Bueno, no sería mala idea —dijo justo antes de dar un salto con un suave gritillo, mientras movía sus manos a su trasero.

—Ni siquiera lo pienses —le respondí con inocencia, ella me miró de mala manera.

—No vuelvas a hacerme eso aquí — me dijo avergonzada, viendo a todas las demás chicas del pasillo, pero ninguna nos había prestado atención.

¿Qué?, solo le di una nalgada suave, ella es la que exagera todo, es sumamente sensible.

—¡Daria! —oí el grito de alguién a mi espalda, ya sabía quién era, Lara, la única ghama de nuestra manada.

Antes de que pudiera reacionar ya ambas estábamos en el suelo, pues ella saltó sobre mi espalda.

—¿Están bien? —preguntó Ani fingiendo no estar preocupada, ¿o tal vez ya estaba acostumbrada?

—Tranquila Ani, Daria es más fuerte de lo que parece —le respondió Lara levantándose ágilmente, mientras Ani me daba su mano para ayudarme—. Y no es que diga que pareces débil, tu cabello rojo anaranjado deja claro que eres bastante fuerte.

—Si no te amara tal vez te golpearía...

—No lo harías, porque golpear a una ghama sería incorrecto —añadió Jenny, la vita de la manada, pasando corriendo a nuestro lado—. ¡Ahora apurénse trío de tardonas!, ¡la última en llegar tendrá que alzarle la falda a un chico! —las tres corrimos para alcanzarla.

Yo era la más rápida, pero justo cuándo iba a alcanzarla se detuvo y choque contra ella, cayendo en mi trasero.

—¿Pero qué...?

—Lo lamento Daria, pero ambas sabemos que Ani no debe perder.

Ella continuó corriendo mientras yo me levantaba, Ani y Lara me pasaron antes de que pueda levantarme, corrí atrás de ellas pero no las pude alcanzar, y al llegar algo peor, Ali y Nanci también habían llegado, no había nada que hacer, yo había perdido.

—Perdiste, ahora tendrás que alzarle la falda a un chico —se burló Lara, pero como la típica ghama a ella le hubiera dado igual incluso hacerlo ella, pues disfrutaba de las cosas poco comunes.

—Bien ustedes ganan, ¿a quién tendré que hacérselo? —pregunté sentándome en mi lugar.

—A Nil —dijo Jenny.

—¿Estas loca?, es mi hermano...

—Por favor Daria, todas sabemos que ustedes dos no se llevan bien... —me interrumpió Jenny.

—Eso no cambia que las demás puedan malpensarlo...

—En realidad lo malpensarían sin importar a que chico lo hicieras... —añadió Lara.

Y así inició una complicada discusión entre las tres, a la cuál rápidamente Ani, Ali y Nanci entraron de mediadoras.

El problema de las manadas era este, al ser tantas, las peleas eran comunes. Si se preguntan porque fue este el reto, es que levantarle la falda a alguién es una forma de humillarse ante dicha chica, o en este caso chico y bueno. Tampoco es que los Neós lo tomen bien, varios lo ven como una ofensa, como una señal de que los creemos inferiores, por lo cuál cuándo alguna chica se los hace suelen molestarse bastante.

Los Secretos de Miriastir.- Celos entre HermanosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora