Sin Paracaídas Parte 6

1.7K 71 18
                                    

Antes de llegar a la cama, ya se habían despojado de sus ropas, estaban desnudos, pues la urgencia de hacer el amor los hacia ser más rápido de lo normal. Sergio despejó la cama tirando las maletas ya hechas al suelo sin importar que la ropa saliera de ellas, lo único que quería era recostar a Raquel y tener una mejor vista de ella, de su cuerpo que tanto admiraba.

Se habían devorado los labios con urgencia, con un deseo reprimido, a pesar de que hace unas horas atrás habían hecho el amor de una forma muy loca, algo que ninguno de los dos se había atrevido a hacer antes. Pero ya no podían estar separados el uno del otro, se necesitaban como el aire para respirar.

Raquel estaba enamorada de esos besos, del modo en que sus labios se encontraban, se mordían, de cómo se saboreaban, del modo en que sus lenguas conectaban, de las chispas que salían a partir de los besos y del contacto de sus cuerpos. No había algo tan romántico y excitante como Sergio perdiéndose en sus labios, su sabor, su textura; Raquel enloquecía y olvidaba todo lo que estaba alrededor de ella. En ese momento solo eran ellos dos

Nunca había entendido como pero amaba la manera en que Sergio besaba sus senos, con sensualidad, con deseo, y ternura a la misma vez; el siempre sabia como sorprenderla. Fue besando cada centímetro de su cuerpo, mordiendo, marcando, deleitándose con el cuerpo de ella y Raquel sentía que su mente se nublaba con el deseo. Gimió mientras el recorría su cuerpo y parte de su entrepierna.

-Amo...cuando...haces eso -decía Raquel entre gemidos.

-Y tú no sabes lo que me haces a mi Raquel, a pesar de conocer tu cuerpo cada vez que te veo es como la primera vez, nunca me canso de ti, amor, quiero hacerte el amor todos los días, a toda hora. Dios! me vuelves loco y tu olor me transporta a otro mundo -Sergio se detuvo para decirle estas palabras a sus ojos y que ella supiera que decía la verdad.

La respiración de Raquel aumento cuando Sergio puso especial cuidado en su entrepierna. El sabia como complacerla y los puntos débiles para que ella llegara al orgasmo. Sergio continuo besando su entrepierna, Raquel suprimía sus gemidos ya que su madre e hija estaban cerca y solo podía agarrar con sus manos las sabanas de su cama y así no clavar sus uñas en la espalda de Sergio.

-Sergio -su nombre era una plegaria en sus labios a que no se detuviera y siguiera. Sergio obedeció y de una caricia más en esa parte intima de ella, hizo que explotara en mil orgasmos.

-Nunca me dejas de sorprender -dijo Raquel mientras Sergio subía hasta sus labios para darle un beso.

A ese punto Raquel solo quería sentirlo dentro de ella, hacerse uno solo y no parar nunca. Sergio seguía besándola y ella quería algo más, algo que él ya sabía pero quería escucharlo de sus propios labios.

-dime que quieres, Raquel -dijo Sergio en un tono sugerente.

-Te quiero a ti...dentro de mi...AHORA!

-Lo que pidas, cariño.

Sergio se posicionó encima de ella y entró en ella de forma salvaje pero tierna al mismo tiempo. Empezó a moverse y crear fricción en sus miembros. Raquel empujó sus caderas hacia adelante y aumentar el ritmo, mientras tanto sus labios seguían el mismo ritmo con los besos que se daban, sus lenguas seguían danzando a un vaivén igualado y Raquel mordía el labio inferior de Sergio

-Esto es por ti amor -dijo Sergio mientras aumentaba el ritmo haciendo temblar a Raquel.

-No pares...Sergio, por favor -suplicaba Raquel entre gemidos.

Sergio se separó ligeramente de ella y de una estocada volvió a penetrarla, los ojos de Raquel brillaban de lujuria, deseo y sobre todo amor, una tercera vez, Sergio inundó su totalmente su miembro en Raquel. Los dos jadeaban, Sergio sentía como las paredes de Raquel se ceñían a su miembro y continuaba, cada vez más deseoso, como si nunca pudiera saciarse de ella. Quería tomarla, quería que le perteneciera quería que Raquel siguiera gritando su nombre. Él quería gritar el suyo...

Raquel se aferró a la espalda de Sergio, acercándolo más y presionándolo a acabar. Una última embestida y los dos llegaron a clímax donde temblaban de placer. Quedaron suspirando uno cerca del otro, Sergio no quería separarse de Raquel, pero tenían que terminar de hacer las maletas. Salió de ella y se puso su ropa interior, ella por otro lado tomo su camisa y se la puso; le sentaba tan bien que Sergio no podía parar de mirarla.

-¿Qué? -preguntó Raquel al ver que ese hombre no apartaba la vista de ella.

-Es que te ves fantástica y sexy con mi camisa puesta -dijo Sergio a la vez que se acercaba a ella y la atraía hacia él.

¿Qué haces Sergio? Lo acabamos de hacer -déjame terminar de empacar dijo Raquel con una sonrisa pícara.

-Me estas creando dependencia de tus labios y de tu cuerpo, Raquel -dijo el mientras besaba su cuello - ¿Cómo voy a aguantar todo este tiempo sin ti?

-Vas a sobrevivir, cariño -dijo ella mientras se soltaba de él y empezaba a recoger el desastre de ropa que habían hecho.

_____________________
Gracias a tod@s por leer mi fanfic y por los comentarios. Déjenme saber que piensan de esta historia y así poder mejorar, se los agradecería mucho ❤️

Sin paracaidasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora