Antes de leer es mi deber informar que este capítulo tiene contenido +18 así que leer bajo tu responsabilidad. Una vez dicho eso disfruta la lectura.
La fiesta había sido un éxito, los socios de mi padre se habían ido muy contentos y el producto era delicioso. Los medios de comunicación no nos perdieron de vista ni un momento a Dimitri y a mi lo cual hizo que él no se separará de mi ni siquiera para ir al baño.
De no ser la involucrada le había creído que realmente estaba enamorado. Al salir de la gala mis padres compartieron auto con los de Dimitri Ava se fue con Adam y mi "prometido" me había llevado a mi casa. Una vez fuera del departamento Dimitri salió del auto para abrirme la puerta y yo baje rápidamente.
Me iba a despedir cuando este me tomo de la cintura y me pego al auto, mi respiración comenzó acelerarse y mis piernas a temblar.
—¿Qué estas haciendo? —dije, pero no me podía mover por la sorpresa y el hecho de que Dimitri tenía una de sus piernas en medio de las mías mientras me sostenía de la cadera. Dimitri se acercó un poco más para susurrarme al odio.
—Unos periodistas nos han venido siguiendo y si no les damos lo que quieren no se van a ir. —mire a un lado y era verdad, en la acera de enfrente estaba estacionado un auto negro, de esos que usan los paparazzi para joder la vida de una persona.
Sabia que estaban cumpliendo con su trabajo, pero era un poco molesto tener que esconderte todo el tiempo de ellos. Suspire pesado y asentí, Dimitri me tomo de la mano para guiarme a mi departamento.
Una vez frente a el me dio un beso en la mejilla y giro para bajar. Cuando se iba a ir recordé mi plan.
—¿Quieres pasar? —Dimitri se quedo parado en la puerta como dudando si era lo correcto o no. Así que me acerque a él.
—Así ellos se van a ir mucho mas contentos. —lo tomé de la mano y lo conduje al departamento.
—Creo que bebiste mucho Gates. —al escucharlo negué con la cabeza. Si había bebido, pero aún estaba sobria.
—Me dijiste que no te daba el beneficio de la duda y quiero hacerlo. —tomé su mano y lo guie dentro de mi fortaleza. Una vez dentro camine al minibar y saque una botella de wiski, si ya sé que era muy cliché, pero en casa solo tomábamos eso y vino.
Saque la botella y dos vasos Dimitri camino al refrigerador y saco los hielos.
—¿Cuál es el truco? —pregunto y yo negué con la cabeza cuando llegué a la barra.
Me conocía bastante bien y sabía que había gato encerrado, así que tenía que ser más inteligente de lo que él pensaba.
—Ninguno, Dimitri vamos a estar casados durante dos años y ninguno quiere tener una vida de miseria. Si intentamos hacer las paces, talvez no como matrimonio al menos como amigos, quizás eso no sea tan malo. —dicho eso me acerque a él y tome uno de los vasos y la botella para servir los tragos.
—Además podemos divertirnos de ves en cuando.
Narra Dimitri.
Algo no andaba bien, Tarah no era así, no era de esas personas que se rendirán tan fácil. Ella quería sacar algo y no sabia que era. Aun así, quería saber que tan lejos estaba dispuesta a llegar para obtener lo que quería y estaba seguro de que esto se iba a poner bastante interesante.
—¿Define tu concepto de divertirnos? —pregunte mientras me pasaba un vaso y se servía el suyo.
—¿Has jugado yo nunca, nunca? —aquella pregunta se me hizo estúpida porque las veces que la había jugado ella estaba frente a mí, así que aun sabiendo eso asentí.
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No es amor
Roman d'amourDimitri está acostumbrado a obtener siempre lo que quiere, pero cuando se ve obligado a casarse con Tarah, su mundo perfecto se ve cambiado, gracias a que ese matrimonio tiene guardado un sin fin de secretos que deberá ir descubriendo. Al final tod...