Let Me Love You ➳ Na Jaemin

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Ese mismo día Renjun decidió sacarme del instituto. Al enterarse de quien había sido la responsable de "casi todo" no pudo evitar salir de allí lo antes posible, no podía ni verla.

Nos fuimos con la excusa de tener a un familiar en el hospital al cual teníamos que ver con urgencia. Renjun decidió llevarme a su casa ya que no podíamos ir a otro sitio. Sus padres no estaban en casa por lo cual no nos dirían nada.

Caminamos durante unos minutos, su vivienda estaba a pocos metros del instituto, más o menos a unos quince o catorce minutos andando. Por el camino Renjun no me dijo nada, mientras, yo miraba como mis pies avanzaban sobre él pavimento.

Entonces volví a recordar la reacción de Renjun al enterarse de quien había sido la responsable de aquellas fotografías sacadas de contexto. Al principio se había quedado en shock mirándome con incredulidad pero poco después su expresión fue cambiando, sus cejas comenzaron a arquearse frunciendo su ceño y miró con rabia hacia un lado; estaba cabreado.

Me sorprendió un poco su reacción, no sabía que se enfadaría tanto al enterarse. Pero bueno, es Renjun, mi mejor amigo y sé que siempre se ha preocupado mucho por mí.

Llegamos a la casa y nos dirigimos a la puerta principal de la misma. Renjun sacó sus llaves del bolsillo de su chaqueta y las introdujo en la cerradura para después poder abrir la puerta permitiéndome a mí pasar primero.

Entré y me paré a echarle un ojo a toda la casa, era bonita y algo parecida a la mía.

—Ve al salón, prepararé algunos aperitivos para comer —me informó mientras que se dirigía a la cocina

—Está bien —asentí y me dirigí al salón acatando su orden

Me senté en el sofá y esperé a que Renjun volviera con la comida. Me acomodé y me quité los zapatos junto con la sudadera que llevaba puesta. La verdad es que no sé qué haríamos durante todo el tiempo que estuviéramos aquí, podríamos ver una película o algo pero en general no había mucho que hacer, o al menos algo que a mí se me ocurriese.

Después de unos minutos Renjun llegó con una bandeja llena de pequeñas hamburguesas, se parecían a los pequeños pinchos que dan para picar en los restaurantes mientras que no tienes que esperar por la comida.

Dejó la bandeja en la mesa, me sonrió y se sentó a mi lado.

—¿Quieres hacer algo en específico? —preguntó mientras que se inclinaba hacia delante y agarraba un trozo de comida

—No lo sé —contesté ladeando mi cabeza para mirarlo —. ¿Qué podríamos hacer? —pregunté

—Pues lo primero que se me ocurre es ver una peli, pero podríamos hacer otra cosa si quieres —me contestó volviéndose a inclinar hacia atrás apoyando su espalda en el respaldo del sofá y con su vista puesta en mí

—Antes quisiera ver tu cuarto

Renjun me miró con una sonrisa de incredulidad y sorpresa.

—¿Mi cuarto? —preguntó —. ¿Y por qué? —rió mientras que me miraba

—No sé, es tan solo por mera curiosidad —conteste encogiéndome de hombros

—Está bien —sonrió mientras negaba con su cabeza y luego procedió a levantarse —. Vamos —me tendió su mano para ayudarme y me sonrió

Aquel acto hizo que mi corazón comenzara a bombear sangre mucho más rápido de lo normal y que comenzara a notar un calor en mis mejillas. Rápidamente agarré su mano para levantarme y agaché la cabeza, no quería que me viera en ese estado.