Almas destrozadas (traducción)

Capitulo 10

Severus abrazó a su viejo amigo. No había visto a Carlisle desde que se fue para su último año en Hogwarts. Nunca volvió a su antiguo hogar después de graduarse. Odiaba a su padre abusivo y nunca quiso volver a pisar la misma casa que ese hombre. En cambio, fue estúpido y se unió al Señor Oscuro, convirtiéndose en un Mortífago. Debería haber regresado a casa y aceptar a Carlisle y Esme en su oferta y mudarse con ellos.

Carlisle y Esme, no sabían que él sabía que eran vampiros. Lo descubrió en su segundo año de Hogwarts cuando se enteraron de los vampiros muggle en la clase de Defensa contra las artes oscuras. Conoció a Carlisle y Esme cuando se mudaron a una casa vieja a una cuadra de donde vivía en Spinners End. El hijo separado de Carlisle había salido recientemente de casa y sus otros hijos se fueron a la universidad. Carlisle lo había encontrado en el parque cuando tenía diez años después de que su padre le había puesto un cinturón a la espalda en un ataque de ira. Carlisle lo convenció de volver a casa con él donde lo había remendado, y Esme lo alimentó. Después de eso, visitó a los Cullen regularmente. Amaba a Carlisle y Esme más que a sus propios padres. Después de la muerte de Lily y el final de la primera guerra, regresó a Spinners End, pero Carlisle y Esme habían seguido adelante.

"Bueno, se necesita uno para conocer uno". dijo Severus. Se rió de la mirada sorprendida que Carlisle le dirigió. "Me mordieron y me volvieron cuando tenía veinte años".

"Esta es una historia de la que definitivamente quiero escuchar más, pero obviamente este no es el lugar". Carlisle se volvió hacia el niño y su hija, preocupado de que los escuchara.

"No te preocupes por Potter, él sabe lo que soy y puede guardar un secreto. Puede ser un dolor de cabeza, pero es un buen niño". dijo Severus, sonriendo en dirección a Harry.

"Vaya, gracias por el cumplido, señor. Se necesita conocer uno". dijo Harry repitiendo las palabras anteriores de Severus. Harry rio cuando su maestro de pociones dio un golpe juguetón a su cabeza.

"¡Mejilla Potter!" Severus estaba feliz de ver que Harry estaba mucho mejor hoy. El episodio de las últimas noches fue muy malo y rezó para que no empeorara.

"¿Entonces supongo que eres su guardián?" sonrió Carlisle. "Debería haberlo sabido, él es tan terco como tú. He estado tratando de que me deje mirarlo a los ojos durante los últimos treinta minutos".

Harry bajó la cabeza avergonzado y murmuró. "No quería ir sin usted, profesor".

"No te preocupes Potter, Carlisle es un muy buen doctor. Iré contigo mientras él te mira a los ojos". Severus empacó el cochecito de bebé y siguió a Carlisle a su oficina.

Harry tenía un fuerte control sobre Leora. No solo tenía miedo de que le miraran los ojos, sino que necesitaba que ella lo castigara. Un hospital era el peor lugar para una empatía. Las emociones de la gente siempre estaban en su punto más alto en un hospital con personas heridas, moribundas, preocupadas y afligidas. Sabía que si soltaba a Leora, se desmayaría. Desde que entró al edificio había estado tocando una parte del bebé, incluso cuando ella estaba en su cochecito.

Carlisle los llevó a su oficina y le indicó a Harry que se sentara en la mesa de examen. No atendió a muchos pacientes aquí, pero el médico anterior había dejado la mesa y nunca se deshizo de ella. Él sonrió cuando el niño se subió a la mesa sin soltar al pequeño bebé.

"Severus, ¿puedes por favor llevarte al pequeño?" Carlisle preguntó amablemente. No esperaba la reacción que tuvo el niño.

La cabeza de Harry se alzó bruscamente hacia los médicos y luego se volvió hacia sus profesores. "No, por favor, no puedo Sev. La necesito".

Carlisle le dio a Severus una mirada preocupada. Necesitaba que el niño soltara al bebé para poder revisarlo adecuadamente. Tenía muchas preguntas para la pareja, y rezó para que Severus no fuera el que le dio al niño sus cicatrices. Sinceramente, no creía que lo hiciera, pero sabía que los niños maltratados a veces se convirtieron en abusadores.