Última Fase

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El cielo algo púrpura era común en este lugar, el lugar donde los muertos de la Facción Griega vienen luego de años y años de vida, para finalmente ser juzgados por los que rigen el Hades. A la entrada de este, dos seres esperaban la llegada del Rey del Inframundo...

-En verdad se toma su tiempo.

-Ya lo conoces Himmel, Hades es de... simplemente hacer las cosas con calma. – Himmel, quien tenía su armadura puesta sólo que ahora llevaba una larga capa roja Carmesí miro a su amigo. – Pero eso no quita que está deseoso de vernos. – el humano rodó los ojos a esas palabras. – Además, según tengo entendido... Atenea te mandó a llamar. Me intriga la gran amistad que tienes con la Diosa de la Sabiduría.

-Borra esa sonrisa de tu rostro... lo que hay entre Atenea y yo es una amistad de años. Fue amiga cercana de mi esposa y de paso... sabes que... estoy harto de tratar de convencerte Elohim.

-Sabes bien que puedes usar mi nombre real cuando no hay nadie más. – Himmel rio un poco, en verdad no estaba de más recordarle que...

-Sabes que los idiotas de las parcas de Hades nos vigilan. – Se podía ver a los sirvientes de Hades recorrer el lugar, llevando el alma de los muertos a donde deben estar en el Hades.

Elohim, como Himmel decidió llamarlo ya que su nombre real prefiere que esté oculto, simplemente rio. Ya habían pasado casi 45 años desde que se conocen... Desde la muerte de Ares y de que... muchas cosan han cambiado. La religión a la cual Elohim pertenece, difiere mucho de las otras religiones. Es monoteísta, raro en estos tiempos, pero simplemente le da un toque distinto a estos tiempos. Además del mensaje de paz que ofrece y demás. Una religión única en muchos sentidos.

Los años que han pasado fueron de grandes cambios para Himmel, gracias a Elohim... fue capaz de afrontar todo lo que se le vino... los ataques de Dioses distintos que querían hacerse de la tecnología que Elohim tenía. Sobra decir que le tomó algo de esfuerzo lograr hacerse del control del poder que Skeith y los otros le daban... pero bastaba con sólo segundos de su poder total para poder ganar. Sin querer se estaba haciendo de una fama monstruosa... además que defendía cuando podía pueblos humanos que simplemente eran atacados por seres sobrenaturales.

Hasta tenía un ejército de humanos con esos Sacred Gears que simplemente lo apoyaban cuando debía enfrentarse a ese estúpido Lucifer y sus demonios. En verdad no puede creer que Elohim deje que ese idiota siga vivo... no sólo ello, el bastardo tiene un hijo que es más que patético. No lo ha matado porque simplemente el tipo sabe correr cuando debe. Lo que si en verdad no desea asimilar ahora es que... una gran guerra se acerca... una que Himmel sabe no puede meterse, no era su asunto.

-Tengo unas preguntas para ti. – El Dios pasó a ver a su amigo, este aún usaba su capucha como la primera vez que se conocieron, según él para no llamar la atención por su cabello. – Sé que la pregunta del Sacred Gear no va, siempre me dices que un día la respuesta de revelará sola. – Elohim rio un poco mientras Himmel lo veía con rabia. – Iré a esos objetos... los Cosmic Packs. ¿Por qué haces creer que fueron un error? No soy tonto, me pediste que esconda esas cosas sabiendo que tarde o temprano caerían en manos de usuarios de Sacred Gears o de simples mortales... ¿Por qué crearlos?

-Hay algo que deseo demostrar para quien tenga los 3. – Himmel lo miro confuso... ¿Dijo los 3? – Un ser omnipotente puede ser superado por uno que esté en armonía con su entorno y los que lo rodean... eso es el Cosmos. Deseo que los que estén cerca a esos objetos y quien los tenga, entiendan ello... que todos pertenecemos a un todo, ser excluido no es posible.

-Tú y tus planes... sabes bien que quien tenga esos tres será propenso a caer en la Ruina, es una apuesta arriesgada.

-¡Oh vamos, ten fe! ¡Estoy seguro que existirá alguien capaz de tal hazaña! – Himmel sabía que era crédulo, pero no tan crédulo. – Bueno... ¿cuál es la otra pregunta señor gruñón?

Sekiryuutei Supremo AscensionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora