Tres por el precio de uno (y no hablamos de tríos)

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Kuroo/Tsukishima; Lev/Yaku; Iwaizumi/Oikawa


1 de octubre
Kuroo estaba sentado en el suelo del gimnasio estirando su cuerpo intentando tocar sus tobillos cuando de repente una fugaz idea pasó por su cabeza. Emocionado, se levantó del sitio de un salto, llamando la atención del resto. El entrenamiento acababa de terminar y nadie entendía de dónde sacaba la energía su capitán.

—¿Lev tu cumpleaños es en octubre, verdad?

El chico asintió confundido. Kuroo colocó sus manos a su cintura sonriendo de manera temible. Era como si hubiera descubierto la fórmula perfecta para acabar con la humanidad. Kenma, que estaba detrás de ellos y ni siquiera veía la cara de su amigo, sintió un escalofrío recorrer su espalda. El moreno estaba planeado algo que no le iba a gustar en absoluto.

—¿Y el tuyo, Inuoka, es en noviembre?

—El uno... —El bloqueador juntó las cejas, frunciendo el ceño y entrecerrando los ojos, con suma desconfianza.

—¡Perfecto! —Kuroo casi gritó de júbilo —¡Vamos a celebrar una fiesta de cumpleaños para ustedes tres!

Por tres se refería a Lev, Inuoka y Kenma. Todo ese plan había comenzado esa misma mañana cuando caminando hacia su instituto, Kuroo le recordó a Kenma que su cumpleaños sería dentro de poco y que por lo tanto debería hacer algún tipo de celebración. Sin embargo, Kenma se había negado incluso antes de que lo sugiriera. Kuroo no podía hacer nada si su mejor amigo prefería no celebrar su cumpleaños, tampoco lo iba a obligar de todos modos. Pero le seguía pareciendo una mala idea. Entonces Kuroo pensó que si la celebración se juntaba con otros cumpleaños, a Kenma no le importaría tanto.

—No —Kenma era el único que se negaba. Lev había abierto los ojos, muy sorprendido, sonriendo como si acabara de escuchar la noticia más importante de su vida. Inuoka se había encogido de hombros, no había planeado nada realmente importante para su cumpleaños por lo que, a pesar de ser una idea de Kuroo, no le desagradó del todo.

—Sí, —dijo Kuroo mirando a Kenma que ya había terminado de estirar, luego se giró a los otros dos —¡y será una fiesta de disfraces!

Yaku puso los ojos en blanco diciendo que no había necesidad alguna de disfrazarse solo para que Lev le recordase que su cupleaños era un día antes de Halloween y que como tal, debían hacer una fiesta que tuviese que ver con monstruos. Iba a volver a quejarse diciendo que no hacía falta porque no eran americanos, pero tanto Kuroo como Yamamoto estaban de su lado, así que le fue tarea imposible.
Después de cambiarse, el equipo decidió ir a una cafetería para hablar sobre la fiesta de cumpleaños de los tres jugadores. En realidad, fueron Kuroo, Yamamoto y Lev quienes querían hablar del tema, Kenma fue obligado a ir tras ellos y Yaku se sintió con la responsabilidad de vigilar a aquel extraño grupo.

—Este es el plan: —dijo Kuroo dibujando en una servilleta con un bolígrafo que nadie sabía de dónde había sacado, después de recibir su café — Será el sábado antes del cumpleaños de Lev e Inuoka y después del de Kenma, que el domingo no tenemos entrenamiento. Lo primero: ¿Dónde la hacemos? Porque yo dejaría mi casa pero no habría el hueco suficiente.

—¿A cuántas personas piensan invitar? —Preguntó horrorizado Yaku, la casa de Kuroo era lo suficientemente grande.

Kuroo se encogió de hombros. —A Kenma le cae bien el pequeñín de Karasuno, así que quería invitar a todo su equipo —pausó llevándose el bolígrafo a la boca y mordiendo su tapa. Kenma a su lado sintió alivio cuando Kuroo hubo mencionado a Hinata, al menos tendría a alguien a quien no quisiera matar. —y obviamente a Bokuto. Y Akaashi.

Los del vóley [Haikyuu!!]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora