Park Dark Ho, el Ceo mas reconocido de Corea del Sur tiene un odio extremo hacía los gays y cada Sábado organiza una reunión para hablar de lo muy hombre que es su hijo Park Jimin.
Pero lo que este no sabe es que uno de sus socios, el hombre al que...
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—Mgh.. Yoongi —gimió el menor mientras aumentaba su agarre en la mesa.
—Shh cariño —susurró el mayor con su voz completamente ronca por la excitación —No hagas tanto ruido o podrán descubrirnos.
El menor asintió apretando sus labios para acallar sus gemidos, se sentía tan bien la forma en la que la polla de Yoongi cepillaba deliciosamente su próstata, amaba la forma en que lo follaba con intensidad, pero sin hacerle daño. Hasta en el sexo Yoongi era jodido caballero.
Joder el peli rosa jamás se imaginó follar con Yoongi en el escritorio de su profesor, pero no se arrepentía.
—Jimin...
—Mgh.. —soltó un gemido en respuesta.
—Jimin....
—Mgh.. —otro gemido un poco más fuerte.
—¡Jimin! —aquel grito hizo que el menor se sobresaltarse, observando que su Yoongi se convertía en un Taehyung con el ceño fruncido. Joder todo había sido un sueño.
—¿Qué pasa? —dijo un poco desorientado.
—A parte me preguntas que pasa —dijo su amigo con cara de indignación —Te estaba hablando del estúpido de Jeon y tú lo único que hacías era gemir el nombre de Yoongi.
El menor se sonrojo estrepitosamente al escuchar aquello, y más al recordar el pequeño sueño que había tenido con su mayor, no podía negar que en el fondo deseaba poder hacer ese sueño real, seria jodidamente existente follar con Yoongi en su salón.
—Y otra vez te perdiste pensando en la polla de Yoongi —habló el castaño llamando la atención de Jimin —De verdad que ese hombre te jodió hasta los sesos amigo.
No podía negar aquello, hasta el mismo se había dado cuenta de que se la había pasado pensando en Yoongi más de la cuenta y teniendo pensamientos no tan puros, pero eso no era lo que lo asustaba, sino eran aquellos pensamientos sobre ellos siendo una linda pareja y caminando tomados de la mano por las calles, o la cálida sensación en su estómago al ser abrazado por Yoongi, eso de verdad lo asustaba porque no quería involucrarse sentimentalmente con él, menos si era amigo de su padre, pero cada vez fracasaba en el intento, simplemente el pelinegro se estaba colando en su corazón sin permiso. Definitivamente debía hablar con Yoongi sobre eso y aclarar las cosas.
Aunque ¿Estaría mal confesarle sus pequeños sentimientos al mayor?, esperaba que el mayor sintiera lo mismo que el. ¿Nada malo podía salir mal verdad?
El menor escuchó un suspiro de su amigo y decidió prestarle atención ya que no quería que se molestara con el de nuevo.
—Lo siento Tae, mejor cuéntame lo que pasó con Jungkook —sonrió un poco.
