Capítulo 14

260 36 125
                                    

Había transcurrido una semana. Aikyan no hablaba con nadie y si lo hacía con sus amigas, era durante unos breves minutos. Mantenía toda su concentración en los estudios. Duraba horas en la biblioteca, intentado escapar de la realidad, de su asquerosa realidad. Estaba enamorada de la perra que detestaban sus amigas, la misma que la humillaba a ella, la misma que se comía a su novio en los pasillos y la misma a quien Aika había tratado de evitar todos estos días.

Ahora que era consciente de sus sentimientos, sentía un gran nerviosismo al verla, cómo si fuera más torpe de lo estrictamente debido. Sus amigas le preguntaban que sucedía y Aikyan prefería mentir o cambiar de tema. Las evitaba, evitaba a todo el mundo, al llegar a su casa iba directo a su habitación para estudiar. (Tarde o temprano la verdad sale a la luz) Ya no podía diferenciar que día era del otro, el tiempo pasaba sin realmente estar pasando para ella. No podía parar de pensar en el rostro de Rikako y era una mierda.

Estaba caminando por el pasillo, con su mochila colgándole del hombro y jugaba distraídamente con el cierre de su chamarra mientras avanzaba. Así llevaba todos esos días la chica de los ojos oscuros. Perdida en su mundo de enamorada. Era estúpido y lo sabía, pero no podía evitar sonreír cómo boba cada vez que recordaba la risa de Rikako o cómo mordía su lengua al sonreír.

- ¡Kyan-chan~!.- Canturreó Anchan, colgándose de su brazo derecho, y Furi sujetó el izquierdo.

- ¿De qué va esto?.- Preguntó, un poco intimidada por las sonrisas picaras que mostraban sus amigas.

King intentaba parecer neutra, pero se reía.

- Tendremos una reunión de chicas.- Dijo y las tres comenzaron a llevarla a rastras fuera del colegio, por la calle.

- ¿A dónde vamos? Tengo que estudiar, mañana hay clases y....- Aikyan intentaba poner vagas excusas, pero sus amigas la ignoraron.

- Aikyan, hoy es viernes.- Dijo Anchan y ella abrió los ojos ¿No era martes o algo así?.

- Hoy, hoy será el día en que nos sueltes que sucede.- Dijo furi con una voz cargada de veneno.

Aikyan comenzó a temblar e intentó soltarse del agarre de sus amigas, ellas prácticamente la cargaron para entrar a la pizzería. Akane las recibió con alegría y comenzó a reír al ver cómo Aika intentaba escapar, pero AiAi la llevaba hasta la mesa. Los jóvenes de hoy en día eran muy animados. (Y sobre todo fuertes)

- Ya, habla.- Exigió Anchan fulminándola con los ojos, Aikyan se encogió en el asiento.

Parecía un interrogatorio, estaban en la mesa: Anchan y Furi estaban sentadas frente a ella con las manos cruzadas, observándola con una intensidad abrasadora. Aika tragó en seco, King sentada junto a ella también la observaba, expectante. Le hizo señas con la mano, para que verbalizara alguna respuesta. (Bienvenidos damas y caballeros, al interrogatorio con ¡Kobayashi Aika! quien es nuestra invitada de hoy)

- ¿Qué quieren que diga?.- Preguntó, haciéndose la desentendida.

Furi golpeó ligeramente su vaso contra la mesa y a atravesó a Aikyan con los ojos.

- ¡Habla, ya! Algo te sucede, llevas toda la semana prácticamente fuera de satélite.- Dijo, acusándola, y Aikyan bajó el rostro. (Yo creo que siempre fue así pero su satélite es Rikako o ¿ella misma? Ya me perdí)

- ¿Te hicieron algo?.- Preguntó Anchan un poco preocupada, su amiga no había estado muy bien en estos días.

- No ha... sucedido nada, en verdad.

- Vete con esas mentiras a la vecina, porque yo sé que no nos quieres decir.- Dijo Furi, apartando un mechón de su rostro, la pelirroja podía ser muy dura cuando quería.

RivalesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora