Capítulo 8

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Ya estaba acabando la primera semana de clases, era viernes, y Aika debía de admitir que había sido agotadora. Muchos proyectos y trabajos en grupo, por suerte estaba con sus amigos en la mayoría de ellos.

Nanaka, por ser un chica muy atenta, había atraído la atención de varias chicas y casi siempre la buscaban. Aika sonreía al ver lo bien que se había adaptado. La única que no parecía feliz era su hermana, Anchan. Era una celosa de primera, decía que si su hermana se echaba de novia la iba a olvidar completamente a ella y más nunca tendrían noche de video juegos, pero Suwawa le aseguraba que no iba a ser así.

Lo importante es que esa misma tarde era la tan famosa audición para el equipo de animadoras y casualmente, después de haber escuchado a Arisha hablar sobre el tema, Anju había decidido entrar también. Y ellas cómo buenas amigas debían de estar allí para apoyarla, la pobre de Suwawa también había sido arrastrada a la tortura.

Las gradas estaban casi vacías, había algunos chicos riendo, pero estaban en una esquina apartada, ya que todos los chicos populares estaban vistiendo el uniforme deportivo de fútbol americano o el traje de porrista. También eran las pruebas para entrar al equipo. Estaban todos los chicos entrenando en el campo de fútbol. Habían franjas blancas pintadas en el césped y los arcos característicos a los dos extremos de la cancha.

Ellas estaban sentadas en las primeras filas. Furi hablaba con los chicos mientras Aika intentaba conversar tranquila. Estaba nerviosa, no sabía por qué, ya que por suerte Anchan lograba caerle bien a todo el mundo, así que cualquiera que no fuera parte del grupo de Rikako, no le dejaría en ridículo. Intentó calmarse, debía de hacerlo, pero justo cuando empezaba a relajarse las chicas salieron de los vestuarios, emocionadas, mientras agitaban los pompones azules.

El problema no era el uniforme, el cual era una camiseta blanca y azul manga larga que llevaba las insignias del colegio grabadas en dorado o la falda cortísima azul, que ondeaba de un lado al otro. El problema era quien lo usaba y Aika casi se quedó sin corazón al ver a Rikako. (Pero si Rikako siempre te produce cualquier ataque al corazón cuando te avergüenza o viceversa) Su cabello castaño brillaba con el sol de un color más claro y estaba sujeto en una cola alta mientras el uniforme se moldeaba en su cuerpo, resaltando las curvas de la cadera de la castaña y la falda dejaba ver sus piernas bronceadas y perfectas.

Aika ni se molestó en disimular, observaba fijamente a la castaña mientras ella hablaba con sus amigas en el campo. Anju las saludó y también lucía muy bien en el traje, pero ni King o Aika la notaron del todo, ya que estaban concentradas en las dos chicas. (¡Disimulen!) Arisha vestía igual que Rikako y hablaba animadamente, colocando las manos en su cadera. Furi seguía sorprendida de que King aún no se hubiese desmayado. (Tranquila, tal vez esta desmayada internamente)

- ¡Chicas!.- Les llamó la atención y a duras penas sus dos mejores amigas lograron mirarla.- Estamos aquí por Anchan, ¿lo recuerdan?.

Aika cabeceó cómo idiota, el aire no le llegaba a los pulmones. En cambio, King escondió el rostro en sus manos y comenzó a bufar, fastidiada. Justo la castaña eligió aquel momento para alzar la mirada. Examinaba las gradas con desesperación, como si estuviera buscando a alguien, hasta que su mirada se posó en los profundos ojos oscuros de Aika. Rikako intentó (Ya saben “intentó”) actuar indiferente y le sonrió hipócritamente mientras Aika echaba humo, esa niñita se estaba burlando de ella y estaba dejando que lo lograra. Idiota, idiota.

- ¡A sus posiciones!.- Gritó la entrenadora y las animadoras comenzaron a formar un grupo.

Los chicos, en la cancha, se organizaron en filas y comenzaron a jugar al escuchar el silbato. Era un juego amistoso, pero daban la vida por anotar un punto. Era muy interesante, aunque Aika quisiera seguirle el ritmo al juego, cada tanto se distraía por el baile que hacía Rikako junto a las otras chicas. Alzaban los brazos y las piernas, algunas daban vueltas y otras hacían la estrella mientras cantaban: "Vamos equipo, Todos unidos por que no podemos rendirnos. ÁGUILAS"

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