La magia de no saber cuál será la siguiente cara del dado que caerá. La que caerá boca arriba y te indicará tu destino y lo próximo por lo que tendrás que luchar en esta vida.
Sea el número que sea, te marcará al igual que un mago con su varita. Como si te quemára el corazón a fuego lento mientras gira las cartas sin dudar; solo para hacerte sufrir.
La magia de lanzar el dado y no saber, no saber que es lo que te deparará el más próximo futuro.
Todo dependerá de la suerte natural o de tu destreza manejando el dado que decidirá tu destino ya predicho por el mago del conejo blanco de nuestra infancia.
ESTÁS LEYENDO
Ansiedad
PoesíaEs de raíz que las palabras existen para poner nombre a las cosas y organizar el mundo. Está bien cuándo adquieres algunas y te identificas con ellas. Nadie no sonríe cuándo le llaman "valiente" o "inteligente"... La cosa se complica cuándo te sient...