Capítulo 5

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Las escenas grotescas que había presenciado hasta ahora se repetían en su mente una y otras vez, quizá había trabajado demasiado y leído mucho sobre casos pasados pero lo que le atormentaba está vez era distinto, era algo personal.

Podía sentir el frío bajo sus pies mientras avanzaba por esa había oscura, un foco se encendió a unos metros dando lugar a una camilla en medio de la habitación, había alguien sobre esta tendido de forma inmóvil, sus pasos se detuvieron frente a esta y contempló aquella manta blanca cubrir la mitad de ese cuerpo, quitó esa tela del camino para encontrarse con esa mujer con la carne abierta desde el pecho hasta la garganta, lo contempló un momento sintiendo un pito en sus oídos y luego la sensación tibia de la sangre brotando de su propia cabeza, cayó al suelo confundido, aún después de tanto tiempo tenía recuerdos de su niñez, apenas recordaba cosas de esa época y lo poco que conservaba de ese tiempo eran esas imágenes grotescas que no le permitían descansar, era como ver la misma escena de una película de terror una y otra vez sin lograr superar el miedo.

Despertó asustado sentándose en la cama, su respiración estaba pesada ese sueño fue muy realista, su cuerpo se sintió sudoroso y temblaba odiándose a sí mismo por ser tan débil. Ni siquiera se detuvo a ver en qué lugar se encontraba y el cálido abrazo sobre su cuerpo le tomó por sorpresa. Empujó a aquel extraño para subirse a él con habilidad dispuesto a reducirle, busco su arma entre su ropa solo para notar que esa no eran las prendas que solía usar, tenía una camiseta de la que no distinguió color por la poca luz.

— Jiminssi? — Le llamó esa voz familiar que Park no tardó en identificar.

Jungkook le abrazaba con firmeza preocupado y Park se sintió avergonzado de que este le viera actuar así, siempre conservaba la calma pero en sus sueños la realidad era muy distinta.

— Estás bien? — Preguntó el menor apoyando su rostro en su hombro mientras le acariciaba, Jimin no rechazo el contacto pero le molestaba sentirse así.

— Sí, solo fue una pesadilla... — Soltó restándole importancia pero Jeon sabía que no era una pesadilla como cualquier ya que el detective perdió por completo la calma y su cuerpo temblaba en ese abrazo.

— Deberías volver a dormir, aún son las cuatro. — Le aconsejo el oficial viendo la hora en su celular para estirarse en la cama con el mayor aún entre sus brazos.

— ... — Jimin no dijo nada simplemente se quedó quieto observado la habitación en penumbras pero con la suficiente luz natural del cielo nocturno entrando por la ventana, parecía un lugar sencillo, además de acogedor y olía como ese muchacho, no recordaba como llego allí pero se sentía bien durmiendo en una cama, su trabajo era demandante y no tenía problema con dormir en la silla de su escritorio o en el viejo sofá en la sala común. — Tan mal me veía que me trajiste a tu departamento? — Preguntó viendo el brillo tenue en los ojos ajenos.

— Estuvo mal? —

— No pero porqué me metiste a tu cama? — Dijo sintiéndose un poco avergonzado, si hubiera tenido su arma cerca le habría lastimado.

— Perdón! Es solo que no tengo un futón...— Se disculpó el menor con la intención de salir de la cama pero Jimin le sujeto del brazo.

— Lo siento no quise ser hostil... — Jimin le hizo acostarse nuevamente y termino en la cama con Park acomodado junto a él, no pasó mucho para que el detective sé durmiera pero él en cambio no podía con el fuerte latido de su corazón.

Durmieron un par de horas más, apenas amaneció y Jimin ya había salido de la cama para vestirse más que dispuesto a ir al trabajo pero Jeon le detuvo.

— Namjoon dijo que debías tomarte el día libre... — Comenzó a decir sentado en la cama con bastante pereza.

— Debo trabajar! — Soltó al abrochar su camisa sin tomarle importancia a las palabras del joven oficial de policía.

HOMICIDE | kookmin × Taejin |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora