- Ya estamos aquí. –Anuncié, entrando en la casa. Aunque nadie me escuchase.
- ¿Y ahora qué hacemos? –Me disponía a preguntarle cuando un trueno rompió por completo el “silencio” que había en el campo. Los dos dirigimos la mirada hasta la ventana, por la cual divisamos una caudalosa lluvia.
- ¿Aquí hay velas? –Inquirí bastante preocupada.
- Déjame pensar… ¡Sí! –Matt corrió chocándose con alguno de los pocos muebles que decoraban la sala, y volvió a mi lado con dos de ellas blancas. Saqué mi fiel mechero de mi bolsillo y encendí aquello.
- Ahora solo podemos esperar a que escampe.
Solo asentí con la cabeza y coloqué las velas en la mesa.
Matt y yo no habíamos articulado palabra, solo estábamos sentados en el sofá. Mirando a la nada.
******************
Nos encontrábamos tirados en el suelo. Besándonos.
Llevábamos un rato así, fogosos y pasionales. Matt se dispuso a subir mi camiseta, pero ahí fue cuando me separé bruscamente.
- No, no, no. –Apoyé mi espalda en la pared y me froté la frente.
- ¿Qué pasa Candy?
- Matt, no voy a seguir. No voy a hacer eso contigo.
- ¿Por qué? Tú y yo somos…
- No, en realidad no somos nada. Lo único que hacemos es pasar tiempo juntos, engañando a nuestras parejas. No somos nada. –Me puse en pie. Dispuesta a ir a otro lado de la habitación cuando de repente, todo se sumergió en oscuridad, al mismo tiempo que otro rayo iluminó por completo el cielo.
- ¡Socorro! –Grité asustada. Caí al suelo y sentí unos brazos a mi alrededor, envolviéndome en un cálido abrazo, que olía a Axe. Matt.
- Parece que se ha ido la luz. –Susurró en mi oído.
- Tengo miedo. –Murmuré.
- ¿Por qué? ¿Dónde está la chica dura que quiero?
- Matt, no se trata de eso. Siempre le he tenido miedo a la oscuridad, desde un Halloween en el que mi padre me lo hizo pasar horrible...
“Flashback”
“Me había disfrazado de princesita, y había ido por las pocas puertas de mi pueblo, con los otros niños a pedir truco o trato.
- ¡Mira cuántas chuches he conseguido! –Le grité feliz a mi mamá.
- Oh, qué bien, pequeña. –Sonrió mi madre.
- Déjamelas ver. –Mi padre tomó mi cestita de calabaza y derramó los caramelos por el suelo, los pisoteó y rió. –Solo te iban a engordar.
- ¡Ricky!
- ¿qué pasa? ¿Algún problema? –Rugió mi padre, imponente.
- No…
- Bien. –Después de esto, corrí a mi cuarto y me puse mi pequeño pijama rosa, me metí en la cama y dormí.
- Truco o trato. –Alguien susurró esta frase en mitad de la noche, y me desperté por completo aterrada. Ojeé en la oscuridad toda mi habitación. De repente, alguien con la cara similar al asesino de la peli “Scream” apareció en mi cuarto asustándome, a la vez que yo soltaba un grito desgarrador.
- Idiota. –Mi padre encendió la luz y se quitó la máscara, riendo como el mismo diablo.
Y este fue, el peor de los monstruos que podría haber existido en Halloween. Mi padre.”
“Fin del flashback”
ESTÁS LEYENDO
'Wolves'
Ficção AdolescenteCandy Queen es una chica de 17 años, no cree en el amor. Ella y su pandilla, que se hacen llamar 'Los lobos' viven en un pequeño pueblo apartado en el bosque, alejado de la ciudad. Su novio Damien y ella solo son pareja por pura atracción, nada más...