CAPITULO 53: RELACION CONDENADA

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Viktoriya estaba profundamente dormida en el sofa mientras Aquella joven lider terminaba unos papeleos para un proyecto que llevaria a cabo en los proximos dias, al haber terminado de revisarlo cerro la carpeta que estaba en su mesa y se estiro mientras observaba a la joven que llacia ahi dormida,  se acurrucó junto a ella y con gran calma y sonrio. "La niña se veía tan tranquila y contenta mientras dormia", ella misma interrumpio sus pensamientos al fijarse en su voluptuosa figura, "¿Niña?" Ella de repente pensó. "Tiene treinta y cuatro años, no ha sido una niña en mucho tiempo". Tanya tocó la cara de Viktoriya con gran delicadesa mientras pensaba con cierta melancolia que a pesar de su edad y todo lo que le había pasado, Viktoriya nunca había perdido esa sensación de optimismo y fe que había tenido desde el día en que se encontraron en el frente del Rin. A los ojos de Tanya, ella siempre sería una hermosa niña dulce.
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espues de levantarse agarro un vaso y lo lleno de whisky, tras hacer esto se fue hacia el balcon y lo habrio, cansada se recargo en la barandilla de la habitacion y ahi en silencio observo la bella ciudad de Bernun, luego observo al cielo y penso mientras meneaba su trago

"¿Y qué soy exactamente? ¿Un asalariado japonés atrapado en el cuerpo de una mujer de veintinueve años?" Ella levantó su brazo derecho sobre su rostro y sintio su propio rostro, Si alguien viese su perfil  la describiria como una rubia muy atractiva, baja y delgada. Aunque si alguien llegara a ver su interior dicha ilusion se romperia. A Tanya, sinceramente, no le importaba que, cuando era una adolescente, había atrapado a más de unos pocos hombres mirándola con intenciones muy obvias. (Aunque nadie a su mando lo hizo nunca. Los soldados que la conocían estaban demasiado aterrorizados para verla así.) Al pensar en estos momentos le recordó a esa perra loca, Mary Sioux y su encuentro final. Los estadounidenses la habían llamado la Diosa de la Guerra. El Imperio había tenido un nombre diferente para ella. Los soldados la habían llamado la Valkiria sangrienta. Cuando se habían enfrentado en los cielos sobre Flandes, los ojos de la otra chica habían brillado como oro pulido. Nada había salido de su boca, sino un sinfín de oraciones a Dios y promesas de vengar a su padre y su país.

"La idiota no había sido más que otro peón del Ser X". de pronto golpeo la barda con furia mientras pasaron por su mente la imagen de todos los fallecidos que fueron causados con la guerra, de aquellos cadaberes que ella misma causo y sobre todo esos ojos inyectados de sangre y con un brillo dorado, esos ojos de esos par de fanaticos, tanto el padre como la hija habian sido envenenados por las ideas de ese cruel tirano que simplemente los usaba para cambiar su fe.  "¿Cuántos millones de personas habian sufrido por el supuesto dios de este mundo? ¿Y todo solo para hacerla creer en él? Bueno, si ese bastardo quiere fe y adoración con todo gusto hare todo lo posible para negárselo".

Tanya termino su trago y cerro el balcon, al entrar se volvio hacia  la cara dormida de Viktoriya. Sintió una punzada de culpa. Tanya sabía que Viktoriya amaba a los niños y no tenía dudas de que sería una madre maravillosa. Y aunque nunca habían hablado de eso, Tanya estaba segura de que Viktoriya quería ser una novia y tener una familia. Asi con una sonrisa amarga se dijo a si misma.

"Una lastima, pues a mi lado eso nunca iba a suceder".

En el mundo en que ella venía del mismo sexo, el matrimonio apenas comenzaba a ser aceptado. Todavía era controvertido y la mayoría de los grupos religiosos se opusieron, pero era legal en muchas naciones. La situación en su mundo actual era completamente diferente. En el antiguo imperio, la homosexualidad todavía era vista no solo como inmoral, sino como una perversión al mismo nivel que la pedofilia. Lo que sentía que era una total hipocresia de parte de la iglesia al acordarse de aquellos sacerdotes que habían abusado de los niños pobres, ella sabia que asi era cómo la mayoría de la gente se sentiría acerca de ella y Viktoriya si alguna vez salía la verdad. La moral se había aflojado un poco desde el final de la guerra. La idea de las casas de drogas y los burdeles legalizados era impactante ahora, pero habría sido completamente impensable antes de la guerra. Y la actitud no fue diferente en otros países avanzados como la República o los Estados Unificados. Si algo, Los valores morales eran mucho más estrictos en los Estados Unificados que en Prusia y los estados sucesores. De hecho, en todo el mundo solo había un país donde el matrimonio entre personas del mismo sexo era legal, aunque esto no era del todo bueno, sino que hasta afectaba la imagen del movimiento: La Federación de Russy. El hecho de que los Rus lo aprobaran fue tomado como confirmación por todos los demás de que tenía que ser tan inmoral y malvado como habían pensado. Las actitudes podrían cambiar, pero no sería pronto.

Youjo senki volumen XDonde viven las historias. Descúbrelo ahora