Me adentre por el barrio hasta llegar a la plaza en donde habíamos quedado.
Estaba llendo y de la nada siento que me apoyan algo en la espalda.
DAME TODO, MOROCHA - Me gritan de atrás.
LA PUTA MADRE.
N-no tengo nada.. - dije con los ojos aguados.
SALI DE ACA WACHO - Esa voz, la reconocí al toque, Manu.
El flaco salió corriendo dejándome caer al piso y Manu me abrazó.
¿¿¿Estás bien??? ¿¿te hizo algo?? - Me digo preocupado.
Nono, estoy bien, gracias - dije llorando.
Vamos a mí casa - me dice ayudando a pararme ya que estábamos en el piso.
¿Esta la tía? - dije ya de pie.
No, está trabajando - dice empezando a caminar.
Ok, vamos.