Protegiendo a Claudia (CCA #2)

Tuya parte II

"Justo lo que quería escuchar"

Esa oración resuena unas cuentas veces más en mi cabeza, mi corazón late a mil por horas y mi cabeza palpita descontroladamente. Ya no tengo miedo, es como si un choque de adrenalina estuviese corriendo por mi sangre; La sensación de haberle vendiendo mi alma al diablo me hace sentir de esa manera.

-No lastimes a mi hermano de nuevo y me tendrás.

Otra risa sardónica se eleva por las bocinas del celular del muchacho.

-¡Eh! ... no se de que te estás riendo, pero juro por Dios que si otro dedo de mi hermano llega a mi apartamento te arrancaré las ...

-Tranquila Claudia. Yo no he dañado a Colton. La mercancía no se toca.

-¿Entonces que fue lo que mandaste a mi madre? Tú ...

-Claudia, Claudia, Claudia... no me provoques.

El aire amenazador del hombre al otro lado de la línea hace que de un pequeño respingón.

"No abuses del limitado poder que tienes"

Me digo a mi misma.

-No es mi intención.

Contesto sumisa, despacio y bajo para hacerle entender que me arrepiento de lo que casi iba a decir.

"Psicopata de mierda"

-Lo que envié a tus padres fue un regalo donado por un cadaver del hospital. A Colton solo le hemos golpeado un poquito, fuera de eso y una dieta a base de agua y pan está bien.

Cierro los ojos al escuchar aquello y una lágrima recorre mi mejilla sin que pueda evitarlo. Me siento tan aliviada que una pequeña sonrisa emerge de mis labios. Estoy feliz de que Colton pueda llegar en una sola pieza a casa.

"Gracias Dios".

-Escucha, esto es lo que pasará de ahora en adelante – abro mis ojos y me pongo atenta, por poco olvido el lugar en el que estoy – serás un niña buena hasta que te de instrucciones, esperaras pacientemente y cuando sea el momento correcto vendrás conmigo.

-Y dejaras ir a Colton.

Completo a modo de presión, este tipo no me va a tomar el pelo.

-Y dejaré ir a Colton.

-Sin un rasguño.

Vuelvo a decir con voz fría y demandante, a lo que el hombre se ríe nuevamente.

-No puedo asegurarte que llegue sin un rasguño. Pero su cuerpo estará completo.

Retengo la respiración por unos segundos.
No quiero ni pensar en las condiciones en las que se encuentra mi hermano.

"Aguanta Colton".

-¿Como se que vas a cumplir y no que nos tendrás a ambos?

Pregunto con fiereza. Saber que están lastimando a mi hermano ha hecho que me enoje y que la sumisión se fuera a pasear por el parque.

-Soy un hombre de palabra muñeca.

"Si claro... tu palabra no vale nada para mí".

-Quiero hablar con mi hermano.

Una larga pausa se hace entre nosotros, siento vibrar mi móvil nuevamente en mi bolsillo y lo ignoro como hace un rato, se me está acabando el tiempo y creo que el señor tenebroso también lo sabe.

-Todo a su debido tiempo.

Dice antes de colgar la llamada precipitadamente.

Quito el celular de mi oído y me quedo observándolo durante unos segundos hasta que un carraspeo me saca de mi en sueño. El muchacho que había estado a mi lado todo el rato pone una mochila, que no había notado hasta ahora, en su hombro y quita el teléfono de mi mano suavemente. No hago nada para deterlo, no hablo, no grito y me mantengo estática tratando de analizar lo que acaba de pasar y en el grado de culpa que tengo de que mi hermano y toda mi familia se encuentra en esta situación.