El Narco

Parte 35

Desborde el avión y sentía como mis piernas temblaban pero me amarre bien los pantalones y seguí mi camino. Sería cuestión de tiempo de que todos se enteraran. Cuando tome un taxi vi como entraban llamadas y mensajes de mi familia. No sé a dónde exactamente tengo que ir, pero alguien me tiene que reconocer. No me había informado bien de como estaba Nuevo Laredo en esos momentos, pero el taxista venía platicando.
Taxista:"No pues no hay jale casi, ya la gente no sale para nada".
Yo:"Y eso"?
Taxista:"No pos pusieron toque de queda en todo Nuevo Laredo, y nadie puede salir a las calles porque no tendrán piedad".
Yo:"Y no le da miedo"?
Taxista:"Pues ya que le pelo Mija, tengo que llevar comida a la casa".
Ya no dije nada pues no sabía que responder. Seguimos manejando pues le pedí que me llevará a cualquier plaza comercial nos paró un comboy de trocas armadas.
El señor se puso tenso y empezó a rezar. Bajo la ventana pero está era la oportunidad. Le di un buen fajo de billete al señor y baje del taxi. Un muchacho con el arma empezó a dirigir la palabra contra mi.
Malandro 1:"Quien vergas te pidió a ti que te bajarás".
Malandro 2:"Mami, vengase para acá".
Levanté la mirada y con los huevos bien puestos les hable.
Yo:"Llevenme con su patrón, soy la menor de los torres, yo soy a la que buscan".
El malandro sorprendido saco su radio y mando una clave después menciono el apellido Torres. A lo que la línea se quedó en silencio después solo la palabra "traemela".
Me revisaron pero no tenía nada conmigo más que mi celular. Rápido me lo quitaron, lo apagaron y se lo guardo el primer malandro.
Al chófer del taxi lo dejaron ir y a mí me subieron a una Raptor negra. Iba en medio de dos malandros que no me tocaban los ojos de encima.
Malandro 1:"Son muchos huevos los que usted tiene. Venir aquí, sin protección".
Yo:"Los tengo bien puestos".
Se rió y la camioneta quedó en silencio. No fue muy largo el camino y paramos en una casa muy bonita de 3 pisos pintada color blanco. Me bajaron custodiada y iba entre todos los malandros.
Pasamos a la casa y como de esperarse un hombre alto y moreno estaba esperando en medio de dos escaleras grandes.
?:"La princesa de los Torres, Mia. Dime qué vienes a hacer aquí. Mis muchachos me informan que no traes protección".
Yo:"Vine a enfrentar mi destino, ya no quiero correr, ni esconderme. Me estaban buscando, ya me encontraron".
?:"Vaya huevos que te cargas, veo que tienes el mismo carácter de tu papá. Pero la belleza de tu mamá. Efectivamente si te estamos buscando, me parece que conoces a este señor".
Me mostró unas fotos de mi padrino Julio golpeado.
?:"Lo conoces"?
Yo:"Si, es mi padrino Julio".
?:"Padrino de que"?
Yo:"De nada en si, el y su esposa se encargaron de mi después de que mis tíos fallecieron. Y hace aproximadamente más de 1 año fue la última vez que lo vi".
?:"Bueno, tu Padrino Julio se metió en graves problemas. Mato a unos de mis muchachos, y aparte se robo de mi mercancía para después vender alguna y consumir la otra cantidad. Después de golpearlo nos confesó que podía hacer una gran oferta, nos dijo que tenía a alguien adentro del Cartel de Sinaloa, alguien que teniéndola entre nuestras manos nos darían una fuerte cantidad de dinero para recuperarla. Tu.
Sentí el coraje adentro de mi y cerré mi puño.
?:"Pero relájate, nosotros no funcionamos asi. No es tu culpa que un pendejo los vendió. A mí no me gustan los dedos... somos una gran corporación, igual que la de Sinaloa, y estamos traficando bien. Prefiero no involucrarme de esa forma, no necesitamos una gran guerra de nuevo. No busco matarte ni nada de eso, pero necesito tu ayuda tengo a mi hijo perdido, se llama Miguel. Estaba de vacaciones y se perdió en la avioneta, solo quiero entrar a sus tierras a buscarlo. Es mi único hijo varon, y si falleció quiero recuperar su cuerpo, fue hace 3 meses casi y no se nada de el".
Me quedé en shock por un minuto, yo ya me pensaba muerta.
Yo:"Y porque yo"?
?:"No confío en muchos, pero tú emites confianza. Te vigile cuando vivías con tus padrinos, eres buena persona. Y cuando mandé a buscarte, los mensajeros llegaron muy fuertes.... Cuento con tu ayuda"?
Asentí y el sonrió, le mando a hablar a sus muchachos y me regresaron el teléfono.
Lo encendí y vi como cientos de mensajes y llamadas perdidas aparecían. Busque el contacto de Antonio y le marque. Después de un timbre contesto.
Antonio:"Dónde chingados estás, tenemos 50 comboys en ruta hacia aya y-".
Yo:"Escucha, estoy bien. Es un mal entendido, todo está bien. No me han hecho daño. Ahora pásame a Don Mayo".
La linea quedó en silencio y después escuché la voz de Don Mayo.
Mayo:"Ahijada del alma, en qué lío te fuiste a meter. Nos tienes con el Jesús en la boca".
Yo:"Disculpen, pero fue un mal entendido. No atentan contra mi vida, solo necesito su ayuda".
Mayo:"Dime para que soy bueno".
Yo:"Don Mayo, usted también es padre y sabe de tragedias. Necesito que nos dé permiso de regresar, solo yo y el señor..".
?:"Miguel Treviño".
Yo:"El señor Miguel Treviño tiene a su hijo perdido, iban en una avioneta y se perdieron, y pueda que estén en nuestras tierras. No busca problemas, solo quiere encontrar a su hijo. Fue reciente como hace 3 meses".
Mayo:"Pues no hemos bajado a nadie, quizás se estrelló o algo"?
Miguel:"Pueda que si, pero escuchéme porfavor. No sé quién tenga a mi hijo, pero es mi único varón. Entienda que solo quiero ir a buscar. Solo iré yo sí me lo permite".
La línea quedó en silencio por varios minutos mientras debatian y después se escuchó la voz de papá.
Papá:"Mi avioneta llega en una
hora, solo estarán tu y el. Pinche susto que nos sacaste Mia, terca igual que tú padre".
La línea se cortó y solté el aire que tenía guardado.
Miguel:"Ahora quieres acompañarnos a comer".
Para ser sincera el hambre se me había quitado pero le acepte una copa de vino.
Pasamos hasta su patio, dónde tenía una gran alberca y unos gran perros. Honestamente aún tenía miedo, pero de la regañada que me iba a dar mi papá llegando. Y de que tendría que delatar como me escape de la casa.