Bartholy Forest

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Cuando salgo del shock y comienzo a reaccionar, pido un taxi desde mi celular y en cuanto llega la cargo en mis brazos para salir de aquí.
No sé que está pasando, no tengo nada claro y mil pensamientos giran en mi cabeza, incluso uno que me dice que,  quizá el hecho de que yo y ella nos hayamos acostado le ha hecho esto.

Mi parte más racional me repite que si así fuera, a Fionna le habría pasado lo mismo o a alguna otra ex novia y hasta donde sé y veo, la cosa no va así. Debo dejar de culparme y encontrar una solución antes que respuestas a lo que está sucediendo.

Por ahora, necesito encontrar la forma de bajar esa fiebre, y sseque ningún medicamento puede ayudarle. Recuerdo bien que cuando a mi me pasa esto, no hay nada como estar un buen rato en el lago para bajar la temperatura,  así que le doy al taxista la dirección de mi casa.

-¿Está bien la señorita?, joven -el taxista me ve preocupado, supongo que piensa que soy algún tipo de secuestrador-.

-Está bien amigo, solo tiene fiebre.

-¿No sería mejor que los lleve al hospital?, sé cuál es el más cercano.

-Cuando ella me llamó diciendo que se sentía mal no traje tanto dinero como para la cuenta de un hospital, pero no te preocupes -miento para tranquilizarle- un amigo nos recoge en casa, va en camino hacia allá también, Solo tomo el dinero y nos vamos al hospital, gracias -parece relajarse.-

-Ok amigo, de cualquier forma si gustas puedo esperar a que tomes el dinero e irnos al hospital.

-Gracias, no es necesario. Como dije, mi amigo nos recoge y es un gran conductor.

El resto del camino no volvemos  a intercambiar palabra alguna y al llegar a casa se aleja por suerte sin hacer más preguntas, dio la casualidad de que un vecino iba llegando en su coche y me saludó alegremente, por lo que el taxista debe haber creido que se trataba del amigo que nos recogía. 

Llevo a Alice al interior de mi casa, es una suerte que sea tan ligera, pues puedo abrir la puerta y hacer un par de maniobras sin problema.

Al entrar tocó nuevamente su frente y saber que la fiebre no ha dejado de aumentar. Así que sin más, me quito los zapatos y me echo a correr hacia el patio, y una vez ahí,  no dejo de correr. 

Como en la casa de Alice, mi patio conecta con un bosque, pero en mi caso, es el bosque más grande e importante de la ciudad. Tiene mayor biodiversidad y los vecinos que tenemos acceso a él somos parte de una sociedad protectora y tenemos compromisos legales hacia el.

Además, se nos permite acceso solo a una parte (evidentemente yo no respeto esos límites, pero nadie lo sabe). Ya que hay otras partes de acceso público, y dos propiedades privadas. Un pequeño Bioparque al que accedes pagando la entrada y cumpliendo algunas normas, y el lugar al que me dirijo ahora... Los Bartholy poseen varias hectáreas como bosque privado de la familia.

Como son vampiros manipuladores y los muy desgraciados tienen bastante influencia en todas partes, en este caso con los miembros del gobierno del país y la ciudad, y además tienen bastante dinero, lograron privatizar la parte en la que se encuentra casi la totalidad del lago.

De vez en cuando me doy chapuzones ahí,  pero el bastardo de Drogo me descubrió la última vez y las cosas no fueron agradables para nadie, o bueno... Me sirvió para confirmar mis sospechas sobre la naturaleza de esa familia, por el otro lado, ellos descubrieron la mía. Y desde entonces se ha unido al apodo de "folla perros" y a implementado nuevos como "pulgoso" o "perro sarnoso".

ProfesoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora