Aquí estaba metida en un vestido súper incómodo que me según yo era muy chico para mí, era muy corto, no me gustaba para nada.
—Agus te ves preciosa—dijo el Nico que estaba tirado en mi cama, jugando su celular mientras me miraba pelear con el vestido para que cubriera más piel.
—No, no me gusta nada como me veo, es demasiado corto, y me apreta, no debí dejarte comprarme esta cuestión—alegué. Ahora había una fiesta por la clasificación de Chile a cuartos de final y el Nico me había invitado y yo le había dicho que no tenía nada que ponerme por lo que me había traído este vestido de zorra.
—Te ves hermosa—se paró de la cama y se puso detrás de mí, vi su reflejo en el espejo—pero si no te sientes cómoda, ponte lo que quieras, si de igual manera te verás hermosa—le sonreí. ¿Por qué no me podía gustar él? ¿Por qué me tenía que gustar el imbécil del Erick?
—Es mejor porque no me gusta esta cosa, no estoy acostumbrada a usar vestidos—el Nico soltó una risa.
—Ve a cambiarte, yo te espero, si aún falta pal carrete.
Me metí al baño y me saqué el estúpido vestido, me puse unos shorts de mezclilla y una polera sencilla y zapatillas, ahí si era yo, esa otra con el vestido no era yo, era una extraña.
—Bien, ya estoy lista Nico, vamos—dije saliendo del baño. El Nico recorrió mi cuerpo con su mirada y luego dirigió su mirada a mis ojos y me sonrió.
—Vamos Agus.
Fuimos a una disco que estaba cerca del hotel, pedimos unos tragos y luego nos sentamos en la mesa con los cabros, me senté junto al Nico, a mi otro lado estaba el Arturo y su nueva mina. La mina no era tan linda, pero eso sí era re voluptuosa, con ese vestido que estaba usando se le veía el medio poto.
—Así que esta es tu nueva polola—le dije al Arturo—no me la habías presentado.
—Agus, esta es la Sonia—dijo el Arturo—Sonia esta es la Agus, la aguatera de la selección y una vieja amiga.
—Un gusto en conocerte—dijo la Sonia—¿Y cómo se hicieron amigos?
—Bueno nos hicimos amigos cuando el Arturo me esguinzó el tobillo en un partido de fútbol—dije con una sonrisa irónica—gusto en conocerte a ti también Sonia.
Como que no le tenía buena espina a la mina, pero en verdad era simpática, aunque bueno la ex del Vidal era más simpática, pero a mí qué me importaba que hacía el hueón con su vida, allá él, eso sí no me creía nah el cuento de que la Marité lo había engañado, estoy segura que el infiel había sido el Arturo, pero el hueón para no quedar mal decía esa hueá...
Todo el rato que estuve sentada en la mesa conversando con el Arturo, la Sonia y el Nico, sentía la mirada del Erick encima de mí, no habíamos hablado desde antes del partido, desde que él me había amenazado. Era un imbécil, debería contarle todo a su esposa, pero ella lo engañaba también con el Charles, así que el destino se encargaría solo de castigar al Erick. Miré al Charles que estaba sentado al lado del Erick, se veía tan piolita ese hueón y se comía a la esposa de su amigo... aunque bueno no eran tan amigos, había cachado que se habían agarrado a combos en el camarín, quizás por qué, pero ahora parecían mejores amigos por siempre.
Después de un rato apareció, Sofía, la esposa del Erick, la mina se veía regia, hueón, no había forma que yo compitiera con eso si era perfecta hueón. Nada que ver conmigo, quizás debería haberme quedado con el vestido que me había regalado el Nico, así no me sentiría tan fea. Ella al verme me sonrió, pero no me vino a saludar, sino que se fue a la pista a bailar con el Erick. Mis ojos se desviaban a cada rato hacia allá.
ESTÁS LEYENDO
Secreto || Erick Pulgar
FanfictionLo de nosotros es un secreto, que nadie se entere Ante el mundo somos amigos Y lo hacemos escondidos....