STRAWBERRY DADDY

DÍA UNO. UNO; UN MOMENTO ASEXUALMENTE INCOMODO

Angel al ser consciente de la cercanía de Charlie con la colita de Alastor, sin pensarlo dos veces se abalanza sobre ella evitando así cualquier contacto con el ciervo, quién al sentir la leve ráfaga de aire a sus espaldas, decide voltear a ver, mirándolos con su acostumbrada y confiada sonrisa, Angel suspira con alivio al ver que no tocaron ni empujaron al mitad ciervo ya que eso representaría un verdadero peligro para él y Charlie.

-Deben tener más cuidado cuando juegan, podrían lastimarse o podrían golpear a alguien-

Decía el pelirrojo con mucha tranquilidad, sin siquiera percatarse de los que estuvo a punto de pasar con Charlie, la cual se puso en pie, Alastor noto que su muñeca estaba inusualmente hinchada.

- ¡Oh querida!, creo que te lastimaste-

Dice tomándola suavemente del brazo para inspeccionar, Charlie ante el contacto no pudo evitar sentir un escalofrío recorrerle la espalda.

-No lo había notado-

Menciona de manera atontada, ahora era más consiente del encanto del "daddy" al recordar las palabras de Angel, sacudió su cabeza, que estupidez estaba a punto de crear en su cabeza.

-Si gustas vamos a mi recamara, tengo algunas cosas que podrían ayudar cariño-

mencionaba sin ninguna intención en trasfondo, aun no se daba cuenta de que lo dicho podría tomarse para mal, hasta que vio la cara de degenerado de Angel.

-O también puedes ir con Angel él sabe dónde está mi botiquín, además que es el responsable de tu herida-

Dijo soltando rápidamente el brazo de la rubia y volviendo a su trabajo, ahora le tocaría a Angel ocuparse de ella, y no sería mal visto por la preferencia del mismo y él se evitaba el contacto extraño con la joven.

//habitación de Alastor//

- ¿Que está no era tu habitación? –

Preguntaba la rubia haciendo que Angel recordara el por qué el pelirrojo llego a esta habitación, por lo que mientras le ayudaba a vendar y a tratar la torcedura, le contaba la mayoría de altercados que ha llegado a tener con el mitad ciervo, al parecer era muy objetivo con su espacio personal, la rubia estaba cansada de escuchar a Angel Dust los mismos habían tomado asiento en el feo colchón que Alastor le otorgó a Angel, cuando ya eran pasadas las 7pm, Angel recordó que ya los demonios que arrastró Al para que le ayudasen habrían terminado su trabajo y posiblemente estuviesen en el bar donde su imposible crush estaría trabajando en la barra.

-Cariño, ya vuelvo no respires-

Dijo Angel cerrando por completo el armario y dejando a Charlie allí atrapada.

Pasada una media hora Charlie comenzó con los intentos de salir de allí pero luego desistió ya no le quedaban muchas energías y tenía mucho sueño, se sentía aburrida por la larga plática de Angel, estaba tan resignada que cuando escuchó la puerta abrirse pensó en Angel, pero escucho una voz demasiado distinta a la de Angel.

-Al parecer ya anda bebiendo-

Mencionaba el pelirrojo comenzando a desabrocharse la camisa, ya había terminado su trabajo y se sentía indudablemente sucio, por lo que liberó sus cortos cabellos y ahora se dirigía al closet a buscar su pijama para poder descansar, volteando alterando la poca comodidad de Charlie, el al sentir una presencia al costado izquierdo, se retira suavemente del closet con su pijama en mano y dándole la espalda a Charlie, ya que se sentía incómodo.

//En el bar//

-Creo que olvide algo-

Dice Angel mirando su copa

-Yo estaba con Charlie y luego vine aquí, pero no hace rato que no la veo-

Husk escuchó el cuestionamiento de Angel por lo que decidió entrometerse

- Y ¿Dónde estaban tú y la rubia? –

Angel se alegró de escuchar que Husk le dirigía la palabra.

-En mi habitación-

Husk se le sirve más bebidas a los demonios que compartían en el bar.

-¿Que no compartes la habitación con Al? –

Pregunta el demonio gatuno haciendo lentamente trabajar al alcoholizado cerebro de Angel.

-Sí, yo duermo en el ARMARIO, por Lucifer, olvidé que dejé a Charlie en el closet-

dice haciendo que el alcohol se le bajara de golpe.

-Vaya, creo que, de casualidad Al subió a tomar un baño no dejaba de decir que se sentía asquerosamente sucio y si es así probablemente Charlie esté muerta para estas horas-

Decía Husk jugando con la mente de Angel y divirtiéndose en el acto.

-No digas eso ni de chiste, pero tal vez no la haya visto, por cualquier cosa no subiré aun, no vaya a ser que me maten a mí-

Dijo Angel mientras en la habitación, Alastor trataba de guardar la compostura.

-Cariño, no quiero sonar grosero, pero ¿Qué haces en la habitación de un caballero? -

Preguntaba Alastor tratando de no enfadarse y de no voltear, menos mal no se le ocurrió desvestirse por completo.

-Papi digo Al, no es lo que parece, estaba hablando con Angel y me encerró en el armario, hace bastante rato que se fue y no volvió y no podía salir, no esperaba que llegarás aun-

Alastor se percató de lo que dijo al inicio ¿"papi"? ¿Qué quería decir con esa palabra?, o tal vez había escuchado mal. - ¿Cómo me dijiste cariño? –

Su voz serena a veces le parecía algo coqueta o ya estaba demasiado agobiada por la vista anterior de la camisa del pelirrojo entreabierta y su cabello desordenado, además de esos brillantes ojos rojos que la miraban directamente.

-Al eso fue lo que dije-

Sonreía nerviosa para su suerte Al no le volteo a ver, solo se encogió de hombros y aun dándole la espalda se dirige al baño.

-Lindura si gustas puedes salir, la puerta está abierta-

Dijo sin más entrando en el baño, el cual no fue muy relajante ya que aún desconfiaba del nivel de curiosidad de la rubia, mientras la misma decidió salir del closet y sentarse al borde de la cama en la que dormía Al, luego de unos segundos dejo caer su cuerpo sobre la cama, la cual a su percepción olía a fresas, luego de unos minutos termino por quedarse dormida en la misma, el pelirrojo al salir del baño con una bata cubriendo su pijama se da cuenta de que la "intrusa" se quedó dormida y al sentir tanta pero tanta pereza, decidió sentarse en un sillón y tomar su descanso allí.

Bien está algo tonto este cap pero Aquí esta

Espero que disfruten