the only; ♡ (vrene)

CAP 1. "mi primer amigo"

Era el primer día de clases para la pequeña Bae Joo Hyun, quién iba a su primer día de clases en la secundaria, ella era tímida, buena estudiante pero muy cerrada cuando el ambiente era muy desconocido para ella.

- Te dejaremos aquí.

- Pero....mamá.

- Irene, tienes que entrar sola ya no es la primaria, verás que te harás muchos amigos.

- ¿Y si no les agrado?.

- Solo se tú misma, verás que si.

- Esta bien, adiós papá, adiós mamá, los amo.

La pequeña Irene, quién sostenía los colgantes de su mochila por los nervios y la hacia parecer aun más tierna y pequeña, se armo de valor y entro al nuevo mundo que la esperaba.

Ese lugar era increiblemente grande, según para ella, quien observaba todo aquel lugar como un niño pequeño, cuando se dio cuenta, tomo él papel de su inscripción el cual indicaba toda la información a los nuevos alumnos. Ella siguió cada proceso hasta por fin encontrar su locker en el cual guardaría los libros más pesado y utilizaría los necesarios para cada clase.

Irene, el cuál era su apodo por su padres, comenzaba adaptarse a ese mundo, ella noto que nada sería igual, que ya no había niños pequeños revoloteando, que ya no había maestros cuidandolos y que los jóvenes de allí estaban a otro nivel.

- ¿Eres nueva?. -

- ¿¡Eh!?.

Irene vivió su primer susto en la secundaria un grupo de jóvenes, se podría decir que ya de clase avanzada, quiénes parecían ser catalogados por los molestos, tomaron a su primer preza, a la pequeña e inocente Irene.

- ¿Te asuste? Eso que tú eres más fea.

- Yo...yo...

- ¿Acaso no sabes hablar? Bien, mejor dame el dinero que tengas.

- ¿Yo? No, porque.

- ¿Acaso te negaste?.

- Es mi dinero consiganse el suyo.

- Quiero el tuyo, dámelo.

Ese grupo conformado por cuatros niños y dos niñas rodearon a su víctima y comenzaron a forzar a Irene para que le diera aquel dinero que sus padres le habían dado para su almuerzo.

- No, es mío, dejenme en paz o le dire...

- ¿A quién? ¿a tu mami? ¿a la seño?.

- Pequeñita esto es la secundaria, debes adaptarte o nada.

- Dejenme.

Irene empujo al que parecía ser el lider de aquella banda de niños rebeldes que se metían con los más indefensos.

- Pagarás por eso.

Aquel chico golpeo con su puño el casillero de Irene haciendo que ella se diera un gran susto y deje caer sus libros al suelo hasta que derrepente una voz masculina y potente hiciera que todos voltearan a verlo.

- Dejenla en paz.

- Oh que tierno llegó el novio.

- Callense, mi hermano es el presidente del consejo escolar no creo que le guste lo que acabo de ver y que sean expulsados ¿verdad?.

Los seis estudiantes que molestaban a Irene se retiraron sin decir ni una sola palabra, aunque sus miradas decían más que mil palabras.

- ¿Estás bien?.