-¿Cómo que te duelen las caderas?- preguntó el paraguayo mientras se enderezaba en la cama y miraba extrañado a su pareja- Fui lo más suave que pude.
-No sé :^-dijo el Boliviano encogiédose de hombros para después volver a acurrucarse entre las almohadas y sábanas.¿¡Quieren que haya lemon!?
Pues perdón, no se escribir eso, me preocupo por ustedes y no quiero que al leerlo les de cáncer ocular T-T