Ep.8: 睡觉

3K 462 331
                                    

Un crujido resonó por toda la habitación, logrando que los que allí se encontraban miraran al causante de reojo con cierto recelo.

San dejó su patata frita a un lado, tosiendo en bajo para aliviar el ambiente que, de un momento a otro (y gracias a la mirada de JongHo.) Se había vuelto tenso.

— ¿El pollo?— Preguntó el menor al ver a MinGi entrar por la puerta de la sala. Este frunció el ceño.

—Es un Ángel, JongHo, no un pollo ni una gallina.

—Un pollito.— Saltó San, sonriendo levemente y mirando al estrecho pasillo que conducía hacia la habitación de MinGi, de la cual el pelirrojo se había adueñado. Esta se encontraba con la puerta abierta y se podía entrever las pálidas piernas del celestial sobre la cama, descansando, hacía unos minutos que había terminado de dormirse.— ¿Qué? No sabemos su nombre.

—¿Piensas apodarlo "pollito" hasta que tengamos alguna idea?

—Sí ¿Por qué no? Es tierno.

—¿Donde has visto tú alguna vez un pollito pelirrojo?

—Es un pollito irlandés.— Contestó el rubio frunciendo el ceño.

—No habéis venido aquí para discutir sobre su nombre.— Interrumpió MinGi, con su voz notoria predominando sobre las demás.

San asintió con la cabeza, JongHo se cruzó de brazos apoyándose contra la pared del salón, al lado del rubio, quien se encontraba sentado sobre el pequeño sofá que decoraba el apartamento.

—Tienes razón.— Cedió JongHo por primera vez.— ¿Qué podemos hacer?

—¿Qué piensas tú?— Habló San, quien obviamente se encontraba sin ideas. El castaño relamió sus labios, pensativo.

—No se va a quedar aquí.

—¿Por qué? ¿Celoso de no recibir atención, bebé manzana?— Se burló San, estirando sus mejillas con voz maternal y burlona. JongHo, al ser el menor y más caprichoso, era el que más recibía atención por parte de los dos.

MinGi suspiró, tratando de encontrar la respuesta a por qué no se había hecho amigo de HwanWoong cuando tuvo la oportunidad.

—¡No! ¡Claro que no es eso!— Se defendió el menor, avergonzado. Pasó una de sus manos por su nuca.— Solo... este no es el lugar donde pertenece, vamos ¡Míralo! No tiene lugar aquí.

San asintió con la cabeza, concordando.

—¿Y qué propones?

—Yo qué sé ¿Tengo cara de haber tomado decisiones como estas en alguna otra ocasión?— Preguntó, con un toque de ironía en su voz.— Quizás... podríamos llamar a la policía y que se ocupen ellos...

—Definitivamente no.— Interrumpió MinGi, mirando a JongHo con más seriedad de la común.— Esto no se trata de un robo o algo parecido, algo que se pueda denunciar a la policía o avisar ¿Y si simplemente creen que se trata de una broma pesada? ¿Y si se lo llevan y no lo devuelven a su hogar, JongHo? ¿Y si lo comunican por las noticias y los que le habían hecho eso tratan de buscarlo? No, no y no.

MinGi parecía preocupado y por eso, el castaño rió.

—Vamos, no me digas que le has cogido cariño.

—No seas ridículo, apenas llegó hace una semana.— Contraatacó frunciendo el ceño.— Me costó encariñarme de vosotros y aún me replanteo si de verdad me agrada estar a vuestro lado.

San puso los ojos en blanco, aún con su permanente sonrisa decorando sus labios.

—Punto uno; Nos adoras, (al menos a mí) no te hagas el duro.— Dijo, para luego tratar de ponerse un poco más serio.— Punto dos; creo que, respecto al Ángel, tengo algo en mente... quizás se trate de una tontería.

𝐒𝐄𝐃 || MinJoong [CORRIGIENDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora