My best friend Rocky

Cap 6

El fin de semana se había acabado y tenía que volver a otro día de escuela.

–Hola linda. –Me dice James mientras acomodo mis cosas en mi casillero.

–Hola. –Le dejé un corto beso en los labios.

–¿Todo bien?

–Si.

–Lo digo porque no hablamos.

–Estuve ocupada.

–Con Rocky de seguro. –Rodó los ojos.

–A él no lo metas en esto, pero para que negarlo estaba en su casa, sus padres me invitaron a comer.

–Claro para él siempre tienes tiempo.

–James no quiero discutir en lunes por la mañana.

–Keyla esto tenemos que hablarlo. Siempre estás con Rocky no me das el lugar que merezco.

–¿Estás celoso de Rocky?

–¿Acaso no se nota?

–Pues perdoname, él es como mi hermano y no es que no te de tu lugar.

–¿Que hiciste con él?

–Ya te lo dije, sus padres me invitaron a comer, luego jugamos videojuegos como siempre.

–Ese es el problema, él es el problema. –Si tan solo supiera que ayer por la noche ni siquiera vi a Rocky.

–El problema no es él, eres tú, no debes sentir celos de él.

–Keyla solo me confundes.

–Es mejor que aclares tus ideas y que tomes una decisión de lo que quieres. –Cerre mi casillero y huí de él.

Las clases pasaron demasiado rápido, lo que le agradezco al cielo porque esta escuela es una tortura. Por lo menos ya faltaba poco para las vacaciones de verano.

No ví a Rocky en todo el día de seguro se quedó en su casa con una terrible resaca y tenía que ordenar todo.

Toco la puerta y me encuentro con otro castaño que no es mi mejor amigo.

–Hola preciosa. –Se recargo del marco de la puerta.

–Hola Ross, ¿está Rocky? –Dije indiferente a su coqueteo.

–No pero pasa. No ha de tardar fue a comprar para comer con todos.

–¿Y tú qué haces solo en casa?

–Recordando cosas del pasado. –Dijo mientras señalaba la mesa llena de fotografías de nuestra infancia.

Entramos a la casa y me senté en el sofá.

–¿Quieres jugar de nuevo?

–Sin apostar.

–¿Asi que chiste tendría?

–No lo sé, Rocky y yo casi nunca apostamos y es divertido.

–Para mí no es así.

–¿Que tienes en mente?

–Otro beso, porque tengo que admitir Franks que besas muy bien.

–Digamos que ya te lo pague por adelantado ayer.

–Ese no cuenta fue como el interés porque te tardaste un día luego de la apuesta.

–No es correcto Ross.

–Vamos Keyla, sé que tú quieres. –Se sentó a lado mio y rodeo mi cuello con su brazo. No dije nada solo asentí.

Encendió la pantalla y conecto los controles.
De verdad hoy no era mi día Ross me gano y ahora tenía que pagarle.

–Bien ahora paga, si no quieres que te cobre intereses después.

–Ok. –Me acerqué a él y juntamos nuestros labios en un beso que después de unos segundos se intensificó. Nos separamos por falta de aire.

–Perfecto Keyla.

–Me tengo ir Ross, lo siento.

–Esta bien, le diré a Rocky que veniste a buscarlo.

–Adiós. –Salí de la casa Lynch y cruce la calle en dirección a mi casa.