Fear • SoonHoon

I'm poison

Las noches en Marseille eran tranquilas y más cuando no era temporada de vacaciones, la ciudad solo se quedaba con las personas que ahí vivían, era una gran paz la que se vivía en ese lugar.

Jihoon se encontraba en una de las zonas que más le gustaba de Marseille, el muelle, donde podía sentarse a la orilla de este y sentir la brisa del mar.

Era su lugar para cuando quería recordar todo aquello que poco a poco estaba olvidando.

—No lo harás.—su voz apenas se escuchaba debido al viento.

—Destruiste mi vida.—Jihoon intento alejarse de él.—lo perdí todo por tu culpa.

—Yo te salve.

—No me salvaste.

Cada día él luchaba por olvidar esos últimos momentos que pasó antes de que su vida cambiara por completo, el recordar ese momento, esa mirada que nunca antes había visto aún le daba miedo.

—Lee.—El escuchó a lo lejos.—Sabía que estarías aquí.

Jihoon miro al chico que estaba a su lado, lo conoció cuando recién llego a la ciudad, una de las pocas personas que fue bueno con él cuando más lo necesitaba.

Seokmin, así se llamaba aquel chico que siempre sonreía y que cuidaba de Jihoon a pesar de no conocerlo mucho le dio su apoyo incondicional y lo cuidaba.

—¿No tienes frío?—Seokmin se cubrió con su chaqueta.—¿Por que siempre vienes aquí?

—Intentó olvidar todo lo malo qué pasó antes.–Seokmin lo miro curioso.—Este lugar es parecido a donde todo termino.

—¿Me contarás?

—Algún día SeokMin ahorita vayamos a casa.

Ambos caminaron hacía su casa, Seokmin siempre tenía algo que decir, era diferente a Jihoon, aquel chico era puro y transparente mientras el mayor era lo contrario él aún guardaba secretos que lo atormentaban cada día.

—¿A quién le toca hacer la cena?–Jihoon sonrió tiernamente ante la pregunta del otro chico.—Solo por esta vez la haré yo pero mañana te toca.

A Jihoon le encantaba aquel chico, pero no de una forma romántica sino que lo miraba como un hermano, un apoyo muy fuerte.

—¿Podemos ver tele mientras cenamos?–Jihoon sonrió y asintió.—¡Será una gran cena!

—Seok no grites, hay personas que ya duermen.—Dijo Jihoon con una sonrisa.

—Perdón.

Jihoon no tenía una amistad tan sincera y sana desde Mingyu, y era algo que él realmente apreciaba mucho, le recordaba un poco a su vida de antes.