Capitulo 23

4.8K 665 373
                                    

Kyojuro se recostó en el regazo de Kyome y mientras ésta ultima acariciaba la revoltosa melena del pelibicolor charlaban de muchas cosas como era de costumbre.

- ¿Irá a entrenar? 

- No... Me gustaría quedarme todo el día aquí.

Kyome le sonrió ante la confesión. - ¿Eso quiere? 

- ¿Puedo? - preguntó dudoso. 

La joven ahora dirigió las caricias al mentón acercándose disimuladamente a los labios. - Por supuesto que sí, Kyojuro. 

- Podría escucharla todo el día decir mi nombre y no me cansaría. 

Estaba atardeciendo, Senjuro se encontraba barriendo la entrada de la finca cuando un alegre Kyojuro volvía a casa

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Estaba atardeciendo, Senjuro se encontraba barriendo la entrada de la finca cuando un alegre Kyojuro volvía a casa. 

- ¡Hermanito! - gritó soltando la escoba para ir corriendo hacia él.

- ¡Senjuro! - gritó el mayor con evidente alegría. Éste abrió los brazos para poder elevar al menor en un abrazo. 

- ¿Como estas? - preguntó feliz. Su hermanito había vuelto a ser la persona sonriente que siempre era y no ese pilar serio que se quedaba encerrado en su habitacion pensando.

- ¡Senjuro! ¡Estoy muy contento! ¡Podría... Podría hacer cualquier cosa en este preciso momento! 

- ¿Por que tan contento? 

- ¡Acabo de pasar la mejor noche y día de mi vida!

- No me digas... ¡¿Estuviste con Kyome-san?!

- Así es y solo es gracias a ti. - lanzó al pequeño por el aire. Pura señal de euforia en su ser. 

- ¡Hermanito! - grito el menor en el aire. 

Él mayor lo recibió con los brazos extendidos. - Perdóname Senjuro, pero mi felicidad puede conmigo. - su sonrisa era imborrable. 

Entraron a la finca y se sentaron a tomar té, mientras bebían el liquido caliente Kyojuro le contó la adorable historia. 

Senjuro se quedo en silencio viendo a su hermano con el corazón en la mano de tanta emoción. 

- Estas enamorado. - lo interrumpió. - Estas completamente enamorado, hasta la ultima punta rojiza de tu cabello, lo estas. 

Kyojuro miró serenamente a su hermano menor y dijo. - Así es. La amo... La amo y lo mas probable es que la ame hasta mi ultima respiración. Aunque no deba hacerlo, lo hago. 

- Me hace feliz verte así. - dijo el pequeño Rengoku.

Kyojuro le contó tanta cosas como por ejemplo... lo rico que cocina Kyome-san y que tiene la intensión de invitarla en un festival japones que hay en un pueblo cerca de ahí.

 lo rico que cocina Kyome-san y que tiene la intensión de invitarla en un festival japones que hay en un pueblo cerca de ahí

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

- Volviste. - pronunció Shinjuro al entrar en la habitación donde sus dos hijos compartían una agradable taza de té.

- Claro que volví, padre. Aquí vivo.

- ¿Donde fuiste ayer? - preguntó el Rengoku.

- ¿Donde crees tu? - respondió con una pregunta sin titubear. 

- Que osado estas, Kyojuro. 

- No es ser osado. Preguntas porque quieres escuchar lo que sabes. 

- Entonces estoy en lo correcto. 

- Te diré si estas en lo correcto una vez que me respondas. ¿En donde crees que he estado? 

- Estuviste con la hija de Oyakata-sama ¿no es así? 

- Sí, así es. Estuve con ella. - respondió sin mucho interés en la reacción de su padre 

- ¿Que se supone que estas haciendo? - preguntó Shinjuro. 

- ¿Con respecto a que? 

- Con respecto a ella. 

- Te dije que no me alejaría de ella. - dijo decidido.

- Y yo te dije que tenías que alejar tus sentimientos. 

- Enserio, olvida eso, no lo haré. Ella... - Kyojuro se pausó.

- ¿Ella que? 

- Ella... 

-  ¡Habla! - ordenó el mayor.

- Yo creo que ella tambien siente cosas por mi, no tengo claro que sea pero soy especial para ella. 

Shinjuro lo miró con asombro y despues comenzó a reír. - ¿Enserio? ¿especial? 

- Sí... 

- ¿Te lo dijo acaso? Dudo mucho que ella te lo haya dicho.

- Pues te equivocas... - la risa de Shinjuro se detuvo. - Porque sí me lo dijo. 

- Abandona ese recuerdo. 

- Jamas. 

- Estuviste en la noche con ella. Deja de faltarle el respeto a la familia Ubuya... 

- ¡Basta ya! - alzó la voz. - ¿Que crees que hago con ella? - preguntó alterado. - Ni un solo cabello le he tocado. Toda ella es pura para mi. 

Shinjuro vió a Senjuro apretando con miedo y rabia la taza de té. - Vete de aquí Senjuro, esta conversacion no te incumbe.

- Dejalo aquí. - se puso en frente del pequeño para impedirle el paso. - Kyome y él son muy unidos. 

- ¿Kyome? ¿en que momento dejaste de nombrarla sin el sufijo? 

- Ella me lo permitió. 

- ¿Te olvidaste de que ella sera...

- ¿De que ella sera la sucesora de Oyakata-sama? Claro que no, me lo recuerdas a diario. Jamas, jamas podría olvidarme de eso. 

- No entiendes. - negaba con la cabeza el Rengoku padre.

- Eres tu el que no entiende, ¿que tiene de malo que me haya enamorado?

- El problema no es que te hayas enamorado, si no de quien te enamoraste. 

- ¿Por que?... 

- Porque jamas un pilar se enamoró de su líder y tu no serás la excepción. 

- Muy tarde padre, ya lo estoy y no hay marcha atrás. 

──❀•❀── 

¡Hola!

Gracias por darle tanto amor al fanfic😍

Disfrútenlo, las leo en los comentarios 🔥💕

THE FLAME OF MY LOVE | Kyojuro RengokuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora