Los Merodeadores y Tu

Capítulo IX

*Ya en vacaciones*

Narra James

Bajé a desayunar, mi hermana ya estaba allí al igual que mis padres, recordé que era el día en el que llegaba Sirius y sonreí.

-Buenos días, llegó el más hermoso de la casa- dije.

-Eso quisieras- me respondió mi hermana con una sonrisa arrogante.

-¡Ay! Hoy es el día que llega Sirius, ya lo extrañaba- sonreía Tn.

"Seguro se está enamorando de él"

-Y... ¿ ú quién eres?-

-Tu conciencia idiota-

-Bueno cálmate, te llamaré Jack-

-Ok me gusta, pero volviendo al tema Sirius y tu hermana...-

-Cállate ella no está enamorada del él y nunca lo estará-

-Si... cree lo que quieras-

-JAMES, JAMES, JAMESSSS....- me gritaba mi hermana.

-¿Qué quieres Tn?

-Nada, tenías cara de idiota, como cuando miras a la pelirroja- dijo y comenzó a reír.

-Si, si-

*Toc, toc* se escuchó que golpeaban la puerta.

-SIRIUS- dijimos Tn y yo al mismo tiempo. Salimos corriendo a abrir y ahí estaba mi otro hermano; nos lanzamos sobre él y lo abrazamos.

-Cuanto te extrañé Sirius- dijo mi hermana mientras lo abrazaba.

-Yo también, hermano- dije.

-Por fin, no saben lo que esperé este día, espero que la pacemos genial- dijo feliz.

-Bueno ven, que te presentamos a nuestros padres- le dije.

-Mamá, papá el es nuestros amigo Sirius-

-Un gusto señor y señora Potter, soy Sirius Black-

-Ohh niño, llámanos Euphemia y Fleamont, un gusto al fin conocerte, nuestros hijos estuvieron hablando mucho de ti- dijo mamá.

-Debes ser buen chico- dijo mi padre y los tres nos miramos con una sonrisa en nuestras caras.

-Si, claro- respondimos al unísono.

-Bueno, vamos a dejar tus cosas a mi habitación-dije.

-Ok- dijo Sirius.

Narra Tn

Fuimos a la habitación de James, dejamos las cosas y me tiré en la cama de mi hermano.

-Chicos, ¿nos metemos en la piscina?- les pregunté, ya que me estaba muriendo de calor.

-Si, vamos que hace calor-

*Horas más tarde*

Narra Tn

Ya habíamos salido y estábamos en mi cuarto.

-¿Hacemos algo?- pregunté.

-Tengo hambre- dijeron al unísono mi mejor amigo y hermano.

-Que raro, aman comer- dije sarcásticamente.

-No sé de qué te quejas, si tú eres igual- me dijo Sirius.

-¡Cállate Black!-dije.

-Igual es cierto, pero no importa vamos, que voy a morir de hambre- dijo mi mellizo.