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Jeongguk se sentía una mierda nuevamente.

Observaba el sereno rostro de Jimin, era un ángel durmiendo. Se acercó a él un poco y removió el largo cabello de la nuca dejando expuesto su cuello, Hoseok tenía razón, la mordida ya no estaba, ese era el porqué del que no lo podía sentir.

Destapó suavemente a Jimin y alzó la bata del hospital para ver su abdomen, y lo que vió le hizo trizas el corazón. Ahí había una cicatriz de cesárea.

Las lágrimas comenzaron a caer por sus mejillas. Ahora mismo sus nenas estuvieran a punto de nacer, o quizás ahora mismo las tuviera en sus brazos.
Pero nuevamente el maldito destino no lo quizo así, y se odiaba por no haber echo algo por cambiarlo.

—Jeongguk...

Murmuró.

El Alfa levantó la mirada para ver al Omega observándolo atentamente.

—Minnie...

Se levantó del suelo y se acercó a su rostro.

—¿Como te sientes? ¿Estás bien?

—Estoy bien.

—Te extrañé mucho.

Jimin no podía estar enojado con su Alfa, sabía que un Alfa en celo era totalmente incontrolable. Ellos necesitaban del sexo en sus períodos de calor. Era casi obvio que Ji-Eun se había dejado tomar por su esposo.

—Yo igual...

Jimin alzó sus brazos y Jeongguk se metió entre ellos apoyando su rostro en el cuello de su Omega, había extrañado su aroma.

—Todo esto es mi culpa, si no te hubiera dejado solo en casa nada de esto estuviera pasando.

—No, no es culpa de nadie.

—Pero no sabes lo que en verdad pasó, no lo recuerdas.

—Tienes razón, no recuerdo cómo acabé aquí pero prefiero no quiero saberlo por ahora, necesito recuperarme antes de todo. Solo sé que Minhyuk es hijo tuyo y de IU.

Jeongguk se tensó ante la mención de la Omega de la manada Lee, no quería recordarlo.

—Yo no quise hacer eso nunca yo-

—Lo sé, solo Cálmate.

—No puedo... Arruine todo.

Las lágrimas volvieron a caer como cascadas por sus mejillas. Jimin lo miraba atentamente.

—¿Jimin? ¿Como te sientes?

El médico entró a la habitación con un pequeño bebé con casi nada de pelitos negros, dormido entre sus brazos antes de que Jimin pudiera decir algo.

—Estoy mejor.

—Dormiste mucho, dos semanas. ¿Sabes? Éste chico lloró todos los días cada vez que te venía a ver.

Jimin sonrió cuando vió a su Alfa sonrojarse y mirar con el ceño fruncido al doctor.

—Doctor, esas cosas se evitan.

Dijo Jeongguk limpiando su rostro de las lágrimas.

—Es tu esposo, no un desconocido.

Le acercó el niño a Jimin y éste lo tomó en brazos.

—El bebé se ha portado muy bien, ha comido todo lo que le hemos suministrado. Es prematuro pero está todo muy bien.

Jimin lo miró, era un hermoso niño que lo miraba con ojitos brillantes ahora.

—Mh...

—Cuando tengas un nombre pensado para tu hijo, dile a Jeongguk que me vaya a buscar.

—Gracias.

—No hay de qué.

El doctor salió dejándolos nuevamente solos.

Jeongguk no se atrevía a mirarlo, sentía vergüenza que su esposo tuviera a un hijo que no era del Omega pero si de él, y eso le frustraba demasiado. Se suponía que ahora tendría a sus niñas en brazos, no al hijo de Ji-Eun.

—Tómalo.

Dijo Jimin estirando al bebé en sus brazos con una mueca de dolor.

—¿Y-Yo? N-No Jimin...

—Hazlo, es tuyo.

Mirando a los ojos de su Omega, notando que no se veía enojado y solo lo miraba con ternura, tomó al niño en brazos.

—Es hermoso.

—Lo sé.

Lo que al Omega no le cuadraba era que Ji-Eun tuvo siete meses de embarazo, no seis o cinco como debía de tener si tuvo sexo con Jeongguk, se supone que eran los meses en los que estuvo lejos de su manada.

Además de que la Omega se notaba que quería hacerle mal a Jimin, él suponía que ella había sido la culpable del aborto de sus niñas. El sólo recuerdo de ver la sangre bajo sus pies hizo revolver su estómago.

—Que sucede.

—Nada solo... Pensando.

Si Jeongguk notó su su incómodad, entonces no dijo nada.

Él no le deseaba el mal a nadie, pero ojalá esos lobos repudiados hayan matado a IU. En todo ese tiempo no había sido capaz de tenerle paciencia, además que ella siempre se hacía la víctima cuando estaba frente a Joongi, y eso sobrepasaba realmente sus límites.

Jimin no era una persona con mucha paciencia que digamos si se trata de alguien que no conoce o le cae mal.

—Daría todo por ver a mis hijas...

Escuchó susurrar a Jeongguk.

Una opresión en su pecho se hizo presente y sus ojos se colmaron de lágrimas.

—Ellas, deben de estar bien Jeongguk. Quizás ahora mismo son unos angelitos y nos miran desde el cielo.

Estiró su mano y tomó la de su Alfa.

—Quizás... Casarme contigo no fue el peor error del mundo. Quizás... Fue lo mejor que me pudo pasar, te tengo conmigo y se que serás capaz de defendernos con toda tu vida.

—Lo haría sin dudar Jimin.

Quizás... El destino no era un maldito.

🍃🦋

Ay nmms a mi también me alegra que se hayan encontrado 😔👊🏻❤️

Hoy recomiendo una canción de BTS siksi xd

Hip Hop love 🤧❤️

GOMABDA!!!~❤️

MALDITO DESTINO - 錯誤 - KOOKMIN  (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora