SUEÑO. [Pablo Alborán]

24. El Momento

(Cambio de narrador. Una semana más tarde...)

Bueno, estoy por mandar los papeles a la mierda. Entre el niño, que quiere pastel de carne, y yo, con mi trabajo y el bebé. Mira, me río por no llorar, ¿sabes?

Oigo el pomo de la puerta. ¿Quién será, que Coco está chillando como cabra en celo? *No hace falta que lo diga, jeje*

- Eyyy-. Lo oigo reírse. -No chilles, Coco, cálmate-. Dice un poco más serio y ella le obedece.

- ¡Papáaaaaaaa!-. Fede corre a abrazarle. Pablo lo alza en el aire y lo llena de besos. Ya están las maripositas en mi estómago.

- ¿Me dejaréis saludar a mamá? También la extrañé-. Les dice. Nuestro hijo está abrazándolo, y Coco corre por sus alrededores emocionada. Finalmente, Fede se va a su cuarto a hacer los deberes dejándonos solos. -Hey...-. Dice entrando a la cocina y yo dejo mi boli, y me tiro a sus brazos.

- Podrías avisar y no sé cuántas veces te lo he dicho ya-. Le digo cuando me he enredado a él con mis piernas.

- Quería daros una sorpresita-. Dice irónico.

- Eso díselo a la princesita del papi-. Me refiero a la perrita, quien nos mira atentamente reclamando a Pablito. Me besa subiendo mi temperatura. -Te amo-. Le digo sobre sus labios y acariciando su nuca.

- Y yo, mi vida-. Me responde.

Lo que pasa durante mis horas de trabajo, ¿te lo puedes imaginar?