Los años siguen

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Despertó abriendo sus parpados lentamente, acarició al costado de su lado él olor de Sasuke se sentia con profundidad.

Apretó las sabanas dejando su cuerpo recostado dónde su esposo dormia, pero con la ausencia de él. Respiró el aroma imaginando el rostro serio pero hermoso del hombre que tenia su corazón.

- ¿que haces? - escuchó una voz, de inmediato se sento mirando a su esposo con una toalla envuelta en sus caderas y otra por su cuello.

- eh..nada solo despertaba - bajo la mirada por la desnudez del torso aún con gotas de agua del azabache - ¿quieres que te prepare el desayuno?.

- no gracias, ya me ire - su voz era dura y fria pero aún asi amaba escucharlo - podrias salir de la habitación, necesito cambiarme.

- si, claro disculpame - se levantó con prisa, saliendo de ahi y tal vez para otros era extraño pero ese no era un matrimonio como los demás.

- Sakura veo que ya despertate - en medio de las escaleras su cuñado le sonreia como cada mañana más bien era él único amable de la familia.

- buenos dias Itachi - devolviendole el gesto sonrió - ¿es tarde no?.

- tranquila, son apenas las siete de la mañana pero me extraña que recien hayas despertado, tú eres de esas mujeres madrugadoras.

- bueno eh tenido un poco de insomnio en la noche - miró el gesto preocupado de Itachi - pero no es nada de que preocuparse.

- eso espero, pero bien ire con Sasuke - subio las escaleras mientras ella las bajaba.

De pronto miró a Mikoto de pie con los brazos cruzados y un gesto de fastidio.

- nunca pierdes el tiempo, no te basta con Sasuke sino que vas por su hermano - fruncio los labios con recelo.

- señora..se equivoca yo..- antes que pudiera continuar la sujeto del brazo con fuerza.

- te muestras ante Itachi con esas prendas y no solo eso, le sonries como una zorra, ya veo por que Sasuke...

Mikoto cayo soltando a Sakura para sonreir ampliamente, demostrando ese rostro firme de seguridad y frialdad.

- no dire más solo pierdo el tiempo contigo - dio media vuelta dejando a Sakura confundida y humillada.

Miró a Fugaku bajar las escaleras junto a Sasuke e Itachi, solo se hizo a un lado pero Fugaku se detuvo enfrente de ella.

- Sakura quiero que sehas tu quien prepare la cena de esta noche, habra invitados asi que esfuerzate.

- cariño no es necesario que se lo dejes a ella, sabes que siempre de eso me ocupó yo - intervino Mikoto.

- lo se, pero Sakura ya tiene tres años siendo la esposa de Sasuke debe cumplir su rol como tal.

- no sé preocupe no lo defraudare - miró por detrás de Fugaku - prometo no defraudar a ninguno de ustedes.

Itachi solo le sonrió con motivación en cambio Sasuke solo volteo dejando ver su indiferencia.

Miró como ellos tres se fueron hasta que Mikoto se acercó y no de buena forma como siempre.

- ¿no los defraudaras? eso esta por ver, solo te advierto que si algo deja en ridiculo a mi familia ya sabes a que te atienes - Mikoto se retiro dejando a Sakura sola.

Tres años, si habian sido ya tres años desde que ella y Sasuke se casaron, no fue lo que imaginaba pero lo amaba y para entónces era sufiente aún que viviera con la indiferencia de él.

En esos largos años habia aprendido de la familia Uchiha.

Fugaku Uchiha era un hombre entregado al trabajo y su familia, podía sentir su aura estricta pero justa, pero no todo de él era bueno, su actitud con Sasuke dejaba mucho que desear incluso a veces sintio que le tenia rencor a su hijo menor o al menos eso miraba Sakura de todas formas siempre fue duro pero jamás la trato con odio.

En cuanto Mikoto una mujer hermosa y llena de poder con una lengua tan venenosa como las víboras, su papel era fundamental en su familia y al igual que Fugaku esta trataba con frialdad a Sasuke, jamás entendio el por que pero ese odio contra ella solo significa el miedo de su presencia en la familia Uchiha y que Sakura formara de esta.

Por todo lo contrario Itachi era un hombre gentil y dulce, atractivo para cualquiera pero su corazón era con una bondad generosa, su cuñado siempre fue él único en ofrecerle un hogar antes de esa enorme mansión incluso era él único tan cercano a Sasuke, se podia notar su hermandad.

Y por último estaba Sasuke, su esposo jamás le demostro amor o palabras lindas y dulces, era un hombre de pocas palabras pero jamás la hizo sentir humillada o fuera de lugar, esa calidez que producia su presencia a su lado era única, no sabia como explicar ese amor y porque, tan solo lo amaba.

- señorita yo creo que la fiesta estara mejor que muchas - le dio motivación Chiyo a Sakura.

- ¿tú lo crees? - sonrió con dudas aún - es la primera vez que hago esto.

- no se preocupe, mire que estos platillos les encantara a los invitados además creo que ya es hora que se aliste, no puede ir con ese mantel.

- tienes razón, debo preparame - se quito el mandil de cocina - lo demás te lo dejo a ti.

- claro, no se preocupe.

Al salir de la cocina se encontro con Mikoto que la miró de abajo hacia arriba, dejando ver su mirada cruda.

- te metiste a la cocina con las empleadas, si que tú no tienes modales mucho menos orgullo de Uchiha.

Sakura solo camino dejando a un lado las palabras crueles de Mikoto. Cuando se preparo, sonrió con tristeza su vida no era lo que queria.

Los invitados fueron llegando de apoco hasta que todo el salón se lleno. Sakura solo permanecia encojida de hombros saludando a todos.

- frentona..- escuchó gritar a Ino. Sakura la recibio con los brazos abiertos, extrañaba a su amiga.

- oye no me llames asi, todos nos miran - rio con alegría.

- ¿y desde cuando importa eso? - la abrazo de nuevo hasta soltarla - ya era hora de vernos aún que sea en una fiesta de negocios.

Fugaku miró la preparación de la fiesta, Sakura tenia talento para esto y los invitados lo alagaban por una buena preparación.

- sin duda hiciste un buen trabajo - hablo por detrás Naruto de inmediato Sakura lo saludo con alegria.

- gracias Naruto, ya habia pasado tiempo de verte.

- bueno aqui me tienes, siempre en contacto.

Me alejareDonde viven las historias. Descúbrelo ahora