Yo no importo?

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Habían pasado semanas desde que la Francia había dejado "The Voice" y desde su partida los ensayos ya no eran lo mismo. Había escuchado una que otra cosa de lo que había pasado en el hall, y aún que me daba lata que hablaran mal de la Francia, ese pleito había servido para alejar la atención de nuestra "relación secreta", además (según la Francia) el Tomás había contribuído a desmentir todas las mentiras que la Gabriela había logrado esparcir, al parecer no fue tan grande el grupo de personas que lo había alcanzado a conocer.

Por otro lado, la Francia había comenzado a grabar su primer disco con los chiquillos y eso la tenía mucho más ocupada que antes cuando tenía su trabajo, la banda y the Voice juntos, pero atareada y todo, se le veía más tranquila, y a sus amigos igual, y ya estaba bueno. Después de todo lo que les había pasado en este año de locos. Por lo mismo, nuestros encuentros habían disminuido notoriamente, así que desde ahora verla me ponía doblemente feliz. 

Siempre me pasaba que al manejar me ponía automáticamente "en la profunda", a recordar cosas, y reflexionar otras. El Gonza me había propuesto irnos a Conce por la navidad y eso también me emocionaba. 

Mientras recorría las calles del barrio alto de Santiago, los arboles comenzaban a adornarse con luces amarillas y renos. Parecía como sacado de una película gringa.

Al llegar a la casa de la Milla me detuve y bajé del auto, luego camine hasta la entrada y toqué el timbre. La Juli me recibió emocionada y me dió un abrazo apretado que yo le devolví en un cuarto de segundo. La había invitado a decorar mi departamento por la navidad, y ella obviamente accedió. Además la Francia estaría con nosotros también, así que estábamos los dos emocionados. Me gustaba que la Juli se llevara bien con ella.

Una vez en el auto de vuelta al depto la Juli a mi lado miraba una hilera de luces que compre que tenían estrellas. Los Beatles sonaban como siempre y yo seguía recordando cosas aleatorias.

-La Francia va a venir, cierto?- dijo la Juli mirándome, luego miró las luces -Crees que le gusten estas luces? Son bonitas...-

-Sí, yo creo que sí- le respondí sonriendo.

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-Oye lauchita, ya dejé el árbol montado en el living- le dije mientras caminábamos por el pasillo al departamento. Ella me miró hacia arriba con esos ojitos azules brillantes -Lo hice porque igual era pesado para que lo hiciéramos juntos- me excusé.

-No importa, papá- me respondió. Abrimos la puerta y lo primero que ambos notamos fue el bolso de la Francia encima de la mesa pequeña de la entrada.

-Ya llegó la Francia!- dijo la Juli con una sonrisa, dejamos las cajas con adornos encima de la mesa y yo mandé a la Juli a dejar su mochila a la pieza de invitados (más bien la pieza de la Juli) mientras yo iba a buscar a la Francia afuera. Pero no estaba en el balcón. Entré y me dirigí a mi pieza y ahí la encontré dormida sobre mi cama. Se notaba que estaba muy cansada porque se había quedado dormida sobre el cubrecama con las zapatillas puestas y tenía el pelo desordenado. Yo me senté con cuidado en el borde de la cama y puse mi mano sobre su brazo.

-La vas a despertar?- Susurró la Juli detrás de mi. Yo la miré indeciso.

-Y si la dejamos dormir un rato?- le susurré de vuelta.

-Pero no adornará con nosotros el árbol?-

-Sí, Pero dejémosla dormir ahora un rato, mientras ponemos las luces en la casa, y dejamos el árbol para el final. Así cuando despierte, vea la casa linda, ya?- me levanté y fui a la puerta donde estaba la Juli.

-... Ya- dijo algo decepcionada.  La verdad la entendía, yo igual me sentí así. 

Con la Juli tomamos las hileras de luces más largas y amarillas y las ubicamos sobre las paredes, rodeamos las estanterías del living y también pusimos unas luces de cascada de color rosado (elección de la Juli) en el balcón, junto con dos figuras de renos de 40 cm de alto que también brillaban. Debo admitir que se veía muy bonito. Yo era flojo para decorar en festividades, pero con la Juli, era como volver a ser un cabro chico.

Santiago de Chile [Álvaro López]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora