Oscuridad

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Llegue a mi departamento cuando las luces de la ciudad reemplazaron a las del sol. Estaba todo oscuro, y lo único que pude escuchar fue el sonido de las llaves golpeando la mesa que yo mismo arrojé. Tenía la sensacion de flotar sobre una nube producto de  haber tenído un buen día, pero a la vez me ponía triste pensar en la Julieta, y el pensar que ya no podría volver a verla hasta el próximo domingo.

Caminé hasta el mueble negro de madera que refugiaba mis discos, pero no me animé a escuchar ninguno. Prendí la luz de una pequeña lampara y encendí la radio, comencé a buscar sintonías hasta encontrar algo que me agradara. Dí con una estación radial en donde había un diálogo entre un periodista y un crítico musical acerca del nuevo álbum que lanzarían los Rolling Stones este año. Apagué la luz y me tiré al sillón, me puse a escuchar pero en ocaciones mi atención se desviaba a la ventana y las cortinas de tela blanca y fina que se movian con sutileza a causa del viento que venía de afuera. La luz que se filtraba de la ventana era azul y tenue. El viento se sentía más fuerte si vivías en el piso número 7.  Sin darme cuenta el diálogo cesó y comenzó una canción, "light my fire" de The Doors, seguí el ritmo con mis dedos, al mismo tiempo que canté la canción. Comencé a debatirme otra vez acerca de si aceptar estar en The voice o no, mi hermano tenía razón en gran parte de la situación, la ultima conversación que tuvimos me dejó más que claro todos los puntos que él consideraba, sin embargo aún no me lograba convencer del todo.

Mi celular vibró en mi bolsillo y me sacó de mis pensamientos, lo tomé y desbloqueé la pantalla, la luz me molestó en los ojos. "Alvaro en qué estay?" Era un mensaje del Gonza. "Nada, me iba a hacer algo de comer ahora, por qué?" Yo ya sabía más o menos para donde iba la micro, o el Gonza quería venir a tocar conmigo, o quería salir. "puedo ir a tu casa?" La primera. "ven nomas" El Gonza vivía dos pisos más arriba que yo, y si no estaba el metido en mi casa tocando bajo, estaba yo metido en la suya jugando xbox. Me levanté del sillón y prendí la luz de la sala.

-Alvaro estoy cagao de hambre- dijo mi hermano entrando al departamento.
-Tss ni un hola?- le dije levantando una ceja.
-Hola Alvaro, ya hiciste algo? No he ido al super y tengo puros fideos en la casa-
-Me gustaría creer que vienes porque me quieres ver, más que porque quieres comida...- me hice el afectado caminando hacia la cocina -y no, aún no cocino nada, pero no esperes más que fideos tampoco, tu sabes que no se me da mucho cocinar- le advertí.

Terminamos comiendonos un barros luco cada uno en un negocio a dos cuadras de la casa. De mis fideos prefiero no hablar.
-Que vas a hacer mañana?- Le pregunté a mi hermano solo por curiosidad.
-Nada, supongo que descansar, como mañana es feriado...- me dijo comiendose el último pedazo de pan que le quedaba.
-Es feriado?!- me exalte, mi hermano asintió -Osea que la Juli se pudo haber quedado conmigo hoy. Por la cresta weon...-lo último salió como un insulto más hacia mi mismo, desaproveche una de esas oportunidades que buscaba para estar mas cerca de mi hija.
-Pero tranquilo weon- me dijo el Gonza riendo- demás que llamas a la Millaray y te la viene a dejar, o tu la vas a buscar, no sé. No creo que la Juli no quiera venir a verte... O a verme, porque me tinca que de ti ya se aburrió- me miró con cara de maldad, sabía que en debates de a quién quería más la Juli yo me picaba con facilidad.
-La voy a llamar- le dije mientras nos levantabamos para irnos al edificio. El Gonza se rajó esta vez con la comida. Íbamos caminando por la calle mientras yo escuchaba el tono de marcar, a la tercera la Milla contestó.
-Aló?- escuche la voz de la Millaray algo sorprendida, y es natural, yo casi siempre le hablaba por whatsapp. Solíamos llamarnos cuando estabamos juntos, ya no.
-Hola Milla, como estás?-
-Bien, bien, un poco ocupada nomas, y tú? Estás bien? Porque es raro que llames...-
-Sí, estoy super. Te llamaba porque recién caché que mañana es feriado, y le quería pedir a la Juli que se viniera a dormir, yo la puedo ir a buscar si quieres- cualquier cosa con tal de estar con ella.
-Alvaro parece que se te olvidó, mañana con la Juli vamos a Valparaíso, no te acuerdas? Te lo dije el día de la reunión, tiene paseo de curso- el paseo a Valpo, sabía que era un lunes pero no recordaba cual. Maldición.
-Claro, claro. Se me había olvidado, y a qué hora se van?- pregunté con un poco de esperanza.
-A las 8 de la mañana tenemos que estar en el colegio. Mira Alvaro, yo se que eres un papá la raja con la Juli y que quieres estar con ella, si no tuviera este paseo, no te hubiera pedido que la vinieras a dejar hoy, yo sé que ella igual quiere estar contigo-
-Sí, lo sé también. Pucha, bueno... Será po, ojalá lo pasen super bien mañana. Mandame alguna foto por whatsapp-
-Obvio que sí-
-Buenas noches, saluda a la lauchita de mi parte-
-Bueno, Chao Alvaro- cortó. Y tuve ganas de volver a tirarme a mi sillón.

Santiago de Chile [Álvaro López]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora