Primer amor

18- Ciudad

Maratón de cuarentena 1/3

La ciudad era mucho mas ruidosa que cualquier  otro lugar en el que haya estado, era común venir un par de veces al mes pero por breve momento, nunca para pasar mas de dos días en el mismo lugar.

Este lugar estaba lleno carros muchos mas de los que pudiera contar en el pueblo  y grandes edificios  que nunca vi en el pueblo.

Por eso nunca me moleste en salir de mi pequeño lugar donde había crecido, el sonido de los pájaros cuando solía ir a montar por las montañas o nadar un poco en la laguna cerca de la casa, no se podía comparar con nada mas, era simplemente perfecto todo lo que quería en mi vida para siempre.

Todo era  muy hermoso para ir de visita y poder comprar hasta gastar una fortuna, pero vivir acá era otra realidad que nadie te contaba la realidad del día a día, esto era una locura y no había pasado siquiera  una semana.

Odio aquí.

No todo era ir de centro comercial y cine, no. Aquí se trabajaba largas horas  en oficinas  para ganar dinero y tratar de estudiar, para sobrevivir como una persona normal, cosa por la que yo nunca había pasado y no tenia ninguna necesidad.

Siempre tuve una vida privilegiada mis padres tenían algo de dinero y sus negocios iban bien. 

Pero  después de todo, no iba a vivir para siempre con ellos y aunque todavía era joven era momento de independizarme. Siempre pensé que saldría de casa para casarme y vivir en alguna casa cerca de mi familia con mi esposo e hijos, abrir una tienda de ropa en el centro del pueblo y ser muy feliz.

La institución  no era muy grande, su aspecto era  de una casa antigua  de dos pisos remodelada para convertirla en una academia, pero esta era una de las mejores y los precios no eran tan elevados.

Muchas  chicas  se encontraban  a nuestro  alrededor  con varios folletos en la mano al igual que yo. Mire la cantidad de cosas que ofrecían, leer cada folleto me llenaba de mucha mas emoción y me hacia sentir que no fue una mala decisión la que tome apresuradamente.

- Y este fue todo el recorrido para ustedes, espero les haya gustado y los esperamos la próxima  semana en la sala de inscripción. Nos vemos, hasta luego - Dijo la encargada del comité, comenzamos a aplaudir despidiendo a la mujer.

Me sentía un poco cansada, era algo mucho mas emocional que físico- Gracias por acompañarme - recosté mi cabeza sobre  su hombro. Asintió sin decir nada mientras me acariciaba los hombros.

Habíamos recorrido toda la academia mirando sus alrededores, los ambientes que tenían  las instalaciones y  me gustaba bastante, me encontraba  emocionada  de estudiar aquí. Ya quería llegar al apartamento y llamar a mi familia para contarle todo.

Se que no era una carrera real,mucha gente se había burlado de eso y hecho comentarios no tan positivos, era mas un oficio de vida pero a esto era lo que quería dedicarme el resto de mi vida no me veía haciendo otra cosa que no fuera esto.

Y también criar a mi futuro  hijo.

Sentía una presión  en el pecho  con las palabras  contenidas. No iba hacer sufrir mas a este chico, es una gran persona y no merecía que lo usara como un cojín de soporte para mi cambios emocionales esperando cambiar lo que sentía  algún  día y tenerlo aquí en la espera de algo que tal vez nunca pasaría.

Esperamos que todo el mundo desalojara el lugar para disponernos a salir nosotros. Tomo mi mano para entrelazarla con la de el- ¿podemos ir a un café? Necesito hablar  algo importante contigo.
-¿Que pasa? ¿Es algo grave? - Llevo sus manos a mi rostro para levantarlo  y así mirarme directamente  a los ojos. Sentí como mi vista se nublaba y poco a poco se iba humedeciendo mis pestañas.

Asentí. 

Porque  si era algo grave para mi, pero nada que no se pudiera  solucionar solo  no quería  perderlo y sabia que si no le decía a tiempo se sentiría  atado a mí. Eso me convertiría  en una mala persona.

Y esa no era mi verdadero ser.

Salimos de las instalaciones de la academia, no muy  lejos de ahí quedaba  el centro comercial así que nos dirigimos hasta allá caminando, sin nada que decir solo tomados de la mano mirando todo a nuestro alrededor.

Mi estómago  gruño cuando vi a una persona  comiendo unos hotcake. Stuartd se rió mirándome, y no puede evitar sonreír también él era ese tipo de persona  que hacia que  te sintieras bien solo con su presencia.

Entramos a un pequeño  local de comida  rápida y en la lista tenían los tan esperados panqueques con miel y queso. La boca  se me hacia agua esperando  que llegaran hasta nuestra mesa.

- Amo verte así de feliz -Claro que estaba feliz por todas las cosas que estaban pasando pero también tenia una triste  por dentro, solo quería  correr al lugar  mas lejano y gritar, gritar fuerte para desahogarme.
-Stud, yo... -par de lagrimas rodaron  por mis mejilla.
- Oye  Bonita ¿porque  lloras? -estiro el brazo para limpiar  mi rostro.
- te falle, lo siento -su expresión  cambio a confusión- se que no eramos  nada pero estamos intentándolos. Pero yo... sabes que amo a Thiago y siempre fue así. Tu eres un gran chico y te quiero mucho, demasiado diría yo...pero no puedo sentir mucho mas por ti. Cometí un error - el alejo sus manos de la mía y eso me lastimo, pero no podía  esperar que sonriera y me abrazara- me acosté  con  thiago y ahora estoy esperando un hijo suyo- estaba mudo se tiro hacia atrás en el respaldo  y acaricio su cabello y lo entendía. No me miro por unos minutos y todo el ambiente se sentía tenso, podía saber lo que estaba pensando.

Una mesera llego con nuestro  pedido pero al parecer  el hambre  había  desaparecido  en ambos.

- Por eso estoy aquí. El no quiere  saber nada de mi,por eso mi decisión  de venir aquí  lo antes posible.
- el bebé ¿El lo nego? - el tono en que lo dijo  me hizo estremecer  estaba enojado.
- él no lo sabe. Nadie  lo sabe, solo Jussara  y en este momento  tú. Hable con él y antes de que pudiera decirle me dijo que ni se me ocurriera  inventar  un embarazo  para engatusarlo.
- Que idiota, cuando lo  vea lo moleré a golpes.
- Ni te molestes, viene aquí  para cambiar mi destino. Y por eso quiero que terminemos  esto que teníamos
-No lo acepto -Eso que dijo me dejo sin palabras, no esperaba esa reacción de él, tire mi cabello de tras de la oreja sin dejar de mirarlo.
- no podemos seguir juntos, estoy embarazada- dije indignada.
Relajo los hombros antes de hablar- ¿y?¿ Es un virus o algo?
-no, pero no es tuyo
- Y que no sea mi bebe,no quiere decir  que no pueda quererlo. Te quiero y tu a mi, y aunque no sea mi novia o mi esposa eres mas que eso,  eres mi mejor amiga y siempre estaré para  ti.
- Gracias -Eso que dijo me puso aun mas sentimental. 
- No tienes que darlas
- Tenia miedo de que te enojaras  y me dejaras sola- limpie mi rostro  con  el  pañuelo.- no quiero estar sola.
- Y no vas estar  sola nunca. Ahora come  que tienes que comer por dos.

La comida estuvo  estupenda, y después  de desahogarme  con stuartd  pude volver  abrir nuevamente mi feroz apetito.

Todo esto me tenia mal, solo esperaba  que mi familia no reaccionara  mal y me apoyaran, no quería decepcionarlos.

- Y este es mi apartamento - gire sobre  mis pies haciendo  que el vestido  se moviera  en onda. No era  muy grande pero estaba céntrico y era cómodo para mi, sonríe  mostrándola  emocionada  mi lugar.

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HEY CHICAS VOLVÍ

LA COSA ESTA FEA EN EL MUNDO, Y TODOS  ESTAMOS  EN CUARENTENA  ASÍ QUE ESTARÉ  ESCRIBIENDO💜

Ya que no  tengo  clases.

No salgan, lávense las manos y usen tapabocas si tienen que salir..

Espero les gusta  el capítulo  y dejen su comentario 😚