OTK

Méceme

La luz de la mañana entra tímida por la ventana de mi habitación, el sol despierta conmigo. Aún en la cama, tumbada de lado con la cabeza sobre la almohada, guiño un ojo, luego el otro... alterno ambos en un juego que distrae mi mente viendo cómo ese rayo de luz danza de izquierda a derecha. Una acción simple, tranquila, como debería ser todo.

Tengo la mente despejada, libre de miedos y dudas. Todo ha parecido un mal sueño... pero ya he despertado.

——————-
Vuelvo a estar completa.
——————-

13 llamadas perdidas... eran de Mat y Robert, no sabía a quién acudir... me daba pánico la reacción de cualquiera de los dos... pero, tenía tanto frío... estaba tan desorientada y asustada que necesitaba a uno de ellos conmigo en ese mismo momento.

Llamé a Robert.

"-¿Rob...?-" no pude ni terminar su nombre, me eché a llorar sin poder seguir hablando. "-¡¡¡Ana!!! ¿Estás bien? ¿Qué te ha pasado? ¿Dónde estás? Tranquila... respira... dime dónde estás y te recojo enseguida.-"

Entre palabras rotas y el corazón encogido logré decirle mi paradero, no era consciente del miedo que tenía hasta que escuché la voz de Robert a través del teléfono. Ahí me desmoroné y solo pude llorar. Seguí sus indicaciones y permanecí sentada, temblando, esperando que llegase y me llevase a casa.

No habían pasado ni 5 minutos desde que le mandé mi ubicación pero Robert ya estaba junto a mí.  Oí gritar mi nombre, venía con Elena. Alguien más corría junto a ellos, cuando se acercaron lo suficiente vi que era Mat. Al verles no pensé en nada, solo sentí un profundo alivio y me fundí con Robert en un largo abrazo.

"-Ana estás temblando... ¿te han hecho algo?-" me separó un poco de él para inspeccionar mi estado de pies a cabeza, enseguida me volvió a abrazar fuerte, sus cálidos brazos entorno a mí, haciéndome sentir a salvo. "-Estoy bien... tengo mucho frío... me han robado el bolso... solo quiero ir a casa...-" Mat se quitó una cazadora fina que llevaba puesta y me la puso sobre los hombros, también me abrazó, en ese momento me deshice en lágrimas, recordé cuando yo era suya y él era mío... acercó sus labios a mi oído y susurró "nadie más que tú Ana, solo tú."

No entendía muy bien qué significaba eso, pensé que era la típica frase que se dice sin sentido, fruto de un momento de estrés y nervios.

Elena se acercó a mí, frotando mi espalda dijo que deberíamos ir a poner una denuncia por robo... la necesitaría si se habían llevado mi documentación... Nos dirigimos a la oficina de policía más cercana y pusimos la denuncia. No nos llevó mucho tiempo, cómo no vi nada sólo pude decir que me robaron y poco más. El policía que me tomó declaración insistía mucho en que fuese al médico, me negué amablemente hasta tres veces afirmando que me encontraba bien, pero, por cuarta vez insistió, en esa ocasión señalando con la mirada mi falda, rota, como si me la hubieran intentado arrancar literalmente. Ninguno nos habíamos percatado de eso hasta que el agente nos lo hizo ver con ese gesto. Yo empecé a llorar recordando a Odín y como intenté frenarle, debió romperse ahí pero no podía decir nada. Yo le metí en casa, ninguno de los que me estaban acompañando sabían de él. Negué con la cabeza y llorando dije que estaba bien y que solo quería terminar aquello, que estaba agotada, Mat me acariciaba todo el rato la espalda, reconfortándome.

Llegamos a casa, entramos los cuatro, Elena y Robert pasaron a la cocina a preparar algo caliente, mientras Mat se sentó a mi lado en el sofá, me abrazó muy fuerte "lo siento... lo siento... " se disculpaba mientras me mecía entre sus brazos, "méceme, no pares nunca" pensé con tristeza, pero me separé un poco de él para decirle "tú no has hecho nada... todo es culpa mía..." y me senté un poco más alejada, para que viese que no esperaba nada de él. Pero sí, debía esperar algo, Mat se acercó, me cogió las manos y me miró con esos ojos llenos de ternura infinita para decirme "Ana, me equivoqué... no hice nada más que confundirme, pero no llegué a formalizar nada, tenemos que hablar, tengo que decirte toda la verdad... esta noche no, ya has pasado por mucho... solo quiero que estés tranquila, todo está bien, he vuelto a por ti, y no pararé hasta que vuelvas a quererme". Me dijo eso como si en algún momento hubiese dejado de hacerlo...