Las risas, la química, la diversión de ambos eran evidentes cualquier persona que pasará a su lado pensaría que eran novios incluso el mismo dueño del Arcade lo pensaba.
Una tras otra maquinita iban u la tras otro juego, no sé concentraba ni en ganar ni en los boletos se concentraba en ellos en divertirse y hacer reír al otro, llegaron al típico juego de baile en parejas.- Debemos bailar - Dijo April mientras jalaba del brazo a Luis.
- Enserio soy pésimo para eso daré vergüenza si intento bailar enfrente de esta gente -
- Vamos no es para tanto lo harás bien además yo no sé bailar y aún así lo haré -
- Tú mejor cállate porque bailas increíble -
- Ándale baila conmigo - Le insistía la chica.
- Está vez no enserio me da pena -
- Enisirio mi da pena- Lo arremedo la chica.
- Muy graciosa bebé - Mientras le agarraba uno de sus cachetes.
- No soy una bebé, pero no quieres hacerlo por una razón muy tonta -
- No es que no quiera pero además la máquina esa de baile no sirve - Señaló en letrero que decía "Fuera de servicio"
- Ah ¿hemos tenido está discusión por nada?- Dijo frustrada.
- Fue divertido verte haciendo tu berrinche - Dijo riendo.
- Ahs considerate especial no cualquier persona puede ver uno de mis berrinches - Mientras se cruzaba de brazos y le daba la espalda.
- Deberás que me siento alagado - Mientras reía y abrazaba a la chica.
- Si me tratas así jamás me podré enojar contigo - Dijo mientras correspondía su abrazo
- Digamos que esa es la idea-.
- Pues lo has conseguido - Después ambos se miraron y rieron, April tomo de la mano a Luis. - Vamos a ver qué podemos ganar con los boletos, me ha dado hambre y creo que ya pasamos mucho tiempo aquí -
Luis solo la seguía haciendo más fuerte su llegaron al mostrador ambos.- Pero que linda pareja de jóvenes - Dijo el señor que atendía a los que querían comprar tarjetas para jugar o querían cambiar sus boletos cuando querían ganarse algún premio, Luis y April despues de tres horas en ese lugar decidieron acercarse al mostrador para que contara sus boletos ya que a ella le había dado hambre y Luis solo hacia lo que la chica le indicará, cuando el señor los sorprendió con su comentario April solo miro a otro lado sin negar la afirmación que había hecho el dueño Luis sonrió.
- Ah le agradezco el comentario pero no somos novios solo venimos a jugar un rato - Dijo Luis.
- Oh veo pero si que forman una gran pareja no dudaría alguien más en pensar que son algo además en tus ojos puedo ver qué la quieres demasiado - Dijo el señor mientras veía a ambos jóvenes que se habían puesto nerviosos ante el comentario de él.
- Pero bueno no creo que se acercarán aquí solo para escuchar los desvaríos de este viejo ¿En qué puedo ayudarlos?-
- No creo que sea tan viejo señor - Repuso April.
- No lo parezco linda pero ya tengo mis años - Dijo riendo, April río con él.
- Bueno señor - Interrumpió Luis. - Nosotros queremos que cuente los boletos que hemos ganado - Mientras sacaba sus boletos de su bolsa.
- Claro joven contaré sus boletos por lo mientras puede ver por que lo cambiara para su linda novia, digo para su linda acompañante -
- Solo cuentelos- Dijo Luis algo molesto.El señor se dispuso a contar el gran fajo de boletos que había puesto el chico delante de él.
- Bien he terminado tienes 456 boletos - Mientras los ordenaba, volteó a ver a April.
- ¿Quieres que cuente los tuyos también linda? -
- Si no fuera mucha molestia - Mientras le extendía los boletos al anciano.
Después de contarlos, los ordeno y se los entrego a la chica. - Bien linda tienes 498 boletos -
- Gracias - Dijo con una sonrisa April, mientras se alejaban un poco.- Parece que te gane -
- ¿A quien le ganaste enana?-
- A ti y no me digas enana -
- ¿Que me ganaste? - Tono sarcástico - Quisieras nadie puede superarme-
- Uy que crees que yo sí te superé, tengo 498 boletos y tú 456 es clara tu derrota-
- Deje que ganarás es más que obvio -
- Si si señor orgullo sigue repitiendo eso hasta que te lo creas -
- Ah basta- Dijo Luis en un tono de desesperación y tomo a April por la cintura para alzarla como si fuera un bulto.
- Luis bajame- Decía la chica entre risas.
- ¿Qué quieres dar vueltas?-
- No bajame-
- Vueltas serán entonces - El chico comenzó a girar mientras la tomaba de las piernas para que no se fuera a caer, ambos reían, April daba uno que otro golpe sin fuerza en la espalda del chico, despues de unos momentos Luis bajo con delicadeza a April.- Ahs no vuelvas a hacer eso - Mientras le soltaba un golpe en el brazo.
- Es divertido hacerte enojar-
- Solo porque eres más alto si no yo te haría esas cosas -
- ¿Qué cosas me vas a hacer?- Le dijo en un tono pícaro la cara de la chica se torno roja.
- Ah eres un cerdo- Mientras desviaba la mirada
- ¿Yo? No dije nada-
- Te conozco-
- Ya Niñita mejor piensa que es lo que quieres-
- ya sé- Dicho esto ambos se acercaron nuevamente al mostrador.- Pensaron que es lo que vana querer muchachos- Dijo el anciano.
- Claro- Pronunció April - ¿Cuántos boletos necesito para que este- Señalando a Luis - Sea mío-
Luis abrió los ojos sorprendido el anciano río - Creo que él ya es tuyo-
- No es mío por eso quiero saber cuántos boletos necesito para que sea mío-
- ¡Hey! No soy un objeto- Dijo Luis.
- Bueno no se cuantos boletos se necesite para eso pero si quieres puedes cambiar los boletos por estas pulseras ambas son iguales pero de color distinto así que cuando alguien los vea verá que están unidos por algo especial-
- Me las da por favor-
El anciano le dio las pulseras a la chica ella tomo el brazo de Luis y en la muñeca amarró el pedazo de cuerda que había comprado.
- Está pulsera es para recordar lo especial que es el uno para el otro y cada que unimos vea pensara en el otro-
Luis miro su muñeca con una sonrisa.
- Y cada que la vea le recordara lo feliz que es cuando está con el-
El amarró la otra pulsera en la muñeca de April ambos sonrieron y salieron del Arcade.
ESTÁS LEYENDO
Me enamoré de mi mejor amigo✓
RomantizmNo les pasa que se enamoran de alguien que jamás les corresponderá, de alguien de quién jamás se debieron enamorar. De todas las personas en el mundo ¿Por qué me tuve que enamorar de ti? Una tras otra vez la misma pregunta resuena en la mente de Apr...