Capítulo IV: Unidad Evangelion 02

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Llegado el viernes, luego de haber analizado todas las variables, los riesgos y sabiendo que, al momento en que los Evas sean requeridos para defender a la humanidad, sus hijos serán los pilotos designados, las dos mujeres deciden que Kyoko continúe siendo el piloto de prueba de la Unidad 02. Durante un nuevo intento de activación de dicha unidad para comprobar qué tan seguro es el procedimiento.

–¿Estás lista para esto? –consultó Yui con algo de preocupación en su voz.

–Creo que sí, será mejor que no lo retrasemos más. –respondió Kyoko visiblemente nerviosa.

–Iniciaremos en 20 segundos. –anunció la trigueña moviendo sus ojos desde los monitores de signos vitales de Kyoko a los datos de la prueba.

Se escuchó como la computadora terminaba la cuenta regresiva antes de que las conexiones neurales comenzaran a enlazarse.

–Llegando al Punto Crítico, iniciando el aumento de voltaje.

–Adelante, cruza los dedos por mí. –bromeó la rubia tratando de romper la tensión en el aire.

–Me gustaría, pero debo tener los dedos libres ante cualquier problema para detener la prueba. –devolvió Yui.

Las conexiones nerviosas llegaron al circuito D24 y tanto el Punto Crítico, como el D25 se encendieron y apagaron unas cuantas veces, antes de lograr estabilizarse y continuar con el resto.

–¡¡Lo logramos!! ¡Pasamos el Punto Crítico! –celebró la trigueña con mucha alegría y júbilo en su voz y su rostro– ¿Cómo te sientes Kyoko?

–Sumamente extraña, no puedo describirlo con exactitud. –avisó Kyoko e hizo una pequeña pausa, tratando de encontrar las palabras para no asustar a su colega– La descripción más aproximada que puedo llegar a darte, es como si estuviera en un sueño, donde puedo verme a mí misma.

–Tus signos vitales parecen estar en orden, han decaído un poco, pero nada de qué preocuparse, como bien has dicho, parecen indicar que estás dormida.

–Bueno parece que lo hemos logrado. –apuntó la rubia con algo de alegría, pero un poco exhausta.

–¿Te sientes bien como para intentar controlar los movimientos del Eva? –indagó Yui– Solo para chequear, que las conexiones funcionan correctamente.

–Creo que sí. –aceptó Kyoko– ¿Qué tal si probamos ver si puedo controlar las manos?

Dicho esto, Kyoko procedió a abrir y cerrar los puños del Eva una y otra vez, alternando entre izquierda y derecha. A continuación, Yui desconectó el resto de los movimientos para que Kyoko intentara caminar y levantar los brazos, comprobando de esa manera, si los receptores neurales eran capaces de leer sus pensamientos y transmitirlos al Eva. Era muy pronto para liberar las ataduras del Gigante Biomecánico. La prueba fue exitosa, pero decidieron esperar, hasta tener unas cuantas pruebas más de activación, antes de pasar a una pequeña prueba de campo.

–Muy bien Kyoko, creo que es hora de que salgas, iniciaremos la desactivación de la unidad. –indicó Yui largando un profundo suspiro– Ah... casi lo olvido, tu tasa de sincronización llego al 90%.

–¡90% eso es fantástico! –vitoreó la rubia alegremente y sorprendida– Bueno iniciemos la desactivación, ya quiero salir y darme un buen baño.

–Iniciando, cerrando conexiones neurales por completo, disminuyendo voltaje.

Entonces las alarmas sonaron.

–¿Qué está sucediendo? –cuestionó Kyoko visiblemente preocupada.

–No lo sé, está rechazando la desconexión neuronal. El voltaje ya está en niveles normales y bajando, pronto se cortará por completo. –contestó la ojiverde tensándose ante los gráficos en los monitores.

The Last Rebuild - Primer Arco: Infancia DuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora