Chapter Thirty-Two

6.4K 327 17
                                    

Rosalía
Tres meses después.

Habían pasado apenas tres meses desde que Jason me había dado la mejor noticia de mi vida "CONSEGUÍ ALEJAR DE TI A ESE BASTARDO, ERES LIBRE ROSE", esas habían sido sus palabras exactas, tan solo esas palabras habían conseguido liberarme del infierno que vivía día a día y por fin podía sentirme tranquila después de tanto tiempo.

Estamos aquí - dijo Jason llegando a mí con mi pequeña Lucy en brazos y sonreí al ver que traía un bote de helado de chocolate en su mano libre

Que hermoso - dije yendo a él para tomar a mi pequeña en brazos y nos dirigimos hacia nuestro lugar en el pasto. Nos encontrábamos de picnic en un lindo bosque y realmente se podía respirar tranquilidad - Jason no te encariñes tanto, nosotras nos iremos pronto y creo que lo mejor es dejarte hacer tu vida - dije mientras ponía a Lucy en un porta bebés y rodó los ojos antes de hablar

Insisto en que estoy en contra de que se marchen y aunque ustedes se vayan deberías de saber que yo las seguiré visitando - dijo serio

¿Por qué tanta insistencia? - pregunté curiosa y bufo

Solo creo que sí tú te vas, no podré protegerte; William en cualquier momento se dará cuenta, eso no lo podemos evitar Rose - dijo serio y bufé

Basta, dijimos que hoy sería un día especial - dije molesta

Siempre evitas el tema ¿Por qué no eres capaz de aceptarlo? Estás desprotegida si te vas - dijo duro y lo mire con los ojos entrecerrados

Jason, ya basta - dije entrecortada mientras el negaba - esa es mi decisión y prometiste respetarla - dije dura y me miró duro antes de lanzarse a mis labios ¿Acaso me estaba besando? ¿Jason me estaba besando?

Cállate - susurro entrecortado cuando se separó de mi por falta de aire y baje la mirada llena de vergüenza - no te dije que cruce los dedos cuando lo prometí - dijo juguetón - te quiero Rose, en verdad lo hago y su tú te vas yo.... - no termino de hablar ya que mi sollozo lo interrumpió - demonios lo siento - dijo arrepentido y negué

¿Por qué no lo entiendes? - grite en un susurro y me miró confundido - entiende que no puedo hacerte esto, si yo estoy contigo tu corres peligro, William te matará en cualquier momento que se entere de este hijo suyo que llevo ahora en el vientre - dije desesperada entre sollozos

Yo te voy a proteger - dijo y negué

Él es peligroso Jason, no sabes de qué es capaz - dije entrecortada y me envolvió en sus fuertes brazos - me aferró a no perderte Jason, no estoy dispuesta a lidiar con algo así - dije con miedo y acarició mi espalda suavemente

Estaré bien, lo prometo - susurro - estaré bien Rose, no tengas miedo - murmuró y levanté la mirada para poder mirarlo

Gracias por ser tú, gracias por aparecer en mi vida - dije acariciando su mejilla y me acerque lentamente antes de besar sus labios nuevamente - gracias Jason...

Narrador omnisciente.

Quiero que me digas todos y cada uno de los movimientos de esa perra escandalosa - dijo William mientras miraba a la señora Carla amenazadoramente y está cerro los ojos antes de hablar

Señor - comenzó a hablar y este la hizo callar

Dime por qué diablos asiste a esas citas con el médico, dilo - bufo con los dientes apretados

Pero señor yo.... No sé - dijo entrecortada

Recuerda que si no dices la verdad, tu hermosa y bella familia sufrirá las consecuencias - dijo y está comenzó a temblar de nervios, sabía que lo que haría no estaba nada bien, sabía que era un error, pero su familia era primero....

La señorita Rose, ella está esperando - dijo entrecortada y este la miró con los ojos más abiertos de lo normal

¿Qué has dicho? - preguntó anonadado y está lo miro con miedo antes de hablar de nuevo

Ella está esperando, está embarazada señor O'Connell - dijo miedosa y este sonrió macabramente antes de reír a carcajadas

Vete - dijo entrecortado y siguió riendo a carcajadas, cualquiera que no lo conociera pensaría que era un psicópata, un completo psicópata.

Vas a venir a mi más pronto de lo que imaginas Rosalía, serás mía de nuevo maldita perra - dijo entre dientes y apretó los puños antes de soltar un grito ahogado, estaba molestó, su sangre ardía y está vez no estaba dispuesto a parar, no le importaría si quiera ese estúpido contrato....

Monstruoso MatrimonioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora