Monstruoso Matrimonio

Chapter Three

Nunca había deseado tanto quedarme más días en un hospital, hoy me daban de alta y lo último que quería era llegar a casa, sabía que William me mataría una vez que estuviera allí.

Por fin nos largaremos de este infierno, ya estoy harto - gruño el rey de Roma entrando a la habitación y lo mire con miedo a lo cual soltó una carcajada - guarda ese miedo para más tarde, te hará mucha falta - dijo burlón y trague grueso

William no le hagas daño a la niña por favor - murmure con miedo y me miró unos segundos en silencio antes de hablar

No me interesa lo que quieras - dijo brusco y me avento un par de prendas en la cara - apresúrate que tengo prisa - dijo llendo hacia el pequeño sofá que se encontraba en la habitación e inconscientemente mis manos comenzaron a temblar.
Tal vez era exagerado, pero en realidad le temía mucho, William era capaz de hacer cualquier cosa con tal de lastimar a una persona.

William - murmure tímidamente y me miró levantando una de sus cejas - ¿Cómo le pondremos a nuestra hija? - pregunté ilusionada y se acercó a mí lentamente

No me interesa esa bastarda - dijo con coraje y baje la mirada avergonzada - siempre estás haciendo todo lo contrario de lo que te digo - bufo y jalo mi brazo hacia la puerta, pero me resistí

El doctor tiene que venir a....- fui interrumpida por la puerta siendo abierta lentamente

Señora O'Connell su alta esta lista, en unos minutos traerán a su hija y serán libres de ir a su casa - dijo sonriente y asentí

Muchas gracias doctor - dije nerviosa y podría jurar que noto mi nerviosismo y desesperación ya que me miró dubitativo

¿Se encuentra bien señora O'Connell? - pregunto y asentí rápidamente

Todo bien, tranquilo - dijo Wiliam apretando aún más mi brazo y apreté los labios evitando soltar un gemido - Ahora ¿Puede salir? Mi esposa debe vestirse - dijo brusco y este sólo asintió antes de salir de la habitación

Creo que será mejor apurarme - dije y tomo mi mandíbula fuertemente entre sus manos haciéndome gemir 

¿Qué intentabas ah? - gruño y gemí soltando un par de lágrimas por el dolor que su mano ejercía

Na- nada - conteste nerviosa y me soltó bruscamente

Perra idiota - bufo mirándome con repudio y tomé aire antes de apresurarme, honestamente no sabía que esperar de el, pero podia jurar que no podía esperar nada bueno.
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William por favor no la lastimes - susurre temerosa cuando estacionó el auto frente a nuestra casa y rodó los ojos - William por favor, por favor - suplique tomando su brazo y sonrió tan macabramente que un escalofrío recorrió todo mi cuerpo hasta la punta de mis pies

Tranquila, tengo algo preparado para ustedes - dijo burlón y salió rápidamente del auto lo cual me puso totalmente en alerta

Detente - dije jalando su mano cuando intento abrir la puerta trasera y mi corazón comenzó a latir tan apresurado que creí que se saldría de mi pecho al ver su mirada asesina

Más te vale que me sueltes - dijo tranquilo y negué - idiota - gruño zafandose de mí agarre y abrí rápidamente para sacar a mi pequeña en su huevito para bebés bruscamente

William, por favor no la lastimes - grite en un susurro mientras seguía sus apresurados pasos y grite desesperada al ver que se dirigía al sótano - ¡NO! - grite y sentí el pánico invadir mi cuerpo - ¡NO LO HAGAS! - grite entre sollozos y aventó el huevito con la bebé dentro del sótano - por favor Will - suplique tratando de tomar sus manos mientras hechaba llave

Ahora te toca - dijo tomando mi cuerpo entre sus brazos y solloce fuertemente, pero no hable, no dije nada, sabía que ni pedir auxilio serviría, nadie me ayudaría, estaba perdida.