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Era la calma antes de la tormenta. El verano antes del penúltimo año de secundaria.
¿Y cómo lo pasas? En un trabajo brutal de verano que te hace dar ganas de volver a la escuela. O, puede ser, en una práctica que no te pagan mucho, aunque esta bien, lo haces por una buena causa. También puede ser que pasaste el verano con los mejores amigos que tendrás en tu vida. O quizá, pasaste los tres meses de tu verano en un juzgado, apoyando a tú hermano, Archie Andrews, enjuiciado por un crimen que no cometió.
Aquí nos encontrábamos todos una vez más en el juzgado, sentada entremedio de Veronica y Jughead en la primera fila mientras que en la de más adelante se encontraba mi mamá, Archie y la alcaldesa McCoy.

—Damas y caballeros del jurado, las pruebas y las declaraciones presentadas en este tribunal cuentan una historia oscura.—Habló la abogada en nombre del fallecido Cassidy Bullock mientras se acercaba a Arch.—Que el Sr. Andrews ha mostrando comportamientos violentos. Que inició dos grupos de justicieros enmascarados. Que atacó a un chico inocente, indefenso, con dos piernas rotas. Que se adentró al lado sur y amenazó con dispararle a un joven en la cara. Que estando de fiesta con sus amigos en Shadow Lake, Sr. Andrews corrió al bosque y le disparó a la víctima, Cassidy Bullock en la cabeza, a quemarropa.—Finalizó de numerar las acciones de las que estaba inculpado mi hermano caminando hacia las personas del juzgado.—Ahora, Sr. Andrews dice que fue el portero del padre de su novia quien lo mató. Un tiro que Sr. Andrews y sus amigos dicen haber oído, pero no visto. ¿Quién sabe la verdad sobre lo qué pasó esa terrible noche en el bosque cerca de Shadow Lake? Yo les dire quien. ¡Ese hombre!—Apuntó a Archie quien se mantuvo con una expresión seria.—Archie Andrews puede ser del equipo de la escuela, puede que sea un músico sensible, un hijo y hermano increíble. Pero también es un asesino despiadado.

Tragué saliva fuerte por mi garganta, intentando mantener mi compostura, Jug a mi lado, tenía los codos apoyados en cada baranda de la silla mientras sus manos estaban entrelazadas apoyadas contra su boca. Este verano había sido difícil para toda la pandilla, intentábamos ayudar todo lo que podíamos a Archie pero el, obviamente, no se sentía bien.
Después de unos segundos en silencio, mi madre, en nombre de la abogada de Archie, se paró de su silla para defender a su hijo y cliente.

—Damas y caballeros, sabemos con certeza que Archie Andrews piensa en los demás antes que en sí mismo.—Comenzó.—Sabemos que ayudó a resolver el asesinato de Jason Blossom. Sabemos que ofreció refugio a amigos y enemigos cuando no tenían donde quedarse. Sabemos que atravesó de un puño un río de hielo para salvar la vida de su compañera, Cheryl Blossom.—Enumeró. Yo sonreí levemente, recordando por todo lo que habíamos pasado. Mamá caminaba hasta llegar a las personas que decidían el caso.—Les recuerdo que no hubo testigos del asesinato. No hubo arma homicida. No había motivo. Al final del día, la fiscalía no tiene más que declaraciones confusas de gente poco fiable. Ahora mi deber de madre, es proteger a mi hijo. Pero como abogada, mi deber es ajustarme a los hechos, a las pruebas. Aquí no hay nada que demuestre que Archie Andrews es algo menos que un chico inocente. Gracias.—Terminó.

Tenía ganas de pararme y aplaudirle, pero sabía que no se podía. Y la verdad, es que durante este verano, había perdido muchas partes de mi personalidad que no sabía que las podía perder. Mi alegría, impulsividad e impaciencia se han ido. Y no es culpa de Archie, por supuesto, es culpa de mi mente, quien me tortura cada noche al pensar que mi hermano podría ir a la cárcel.
Aunque también, varias partes de mi personalidad que no sabía que existían, salieron a la luz. Siempre me había gustado leer, pero nunca me había planteado el escribir. Este verano fue necesario para ayudar a mi mamá con los discursos en el juzgado, también tuvimos la ayuda de Betty. Aprendí a disfrutar más los pequeños momentos que teníamos de felicidad, los atesoraba en el fondo de mi corazón.

—Damas y caballeros, el cargo es asesinato en primer grado. Pueden retirarse para comenzar su deliberación.—El juez levantó el martillo y lo golpeó contra una parte de la mesa, haciendo que nos paráramos inmediatamente y saliéramos de la sala.

Riverdale, The Dangerous Town | TTOS3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora