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El plan iba así. Betty y Reggie iban a entrar al lugar, para ver a Archie en la pelea y le darían la señal. Kevin, llevaría las bebidas, con bombas de humo dentro de ellas para distraer a los directores y guardia. Veronica desconectaría los cables del auto del director. Josie, llevaría las bebidas como mesera hacia Betty y Reggie y yo esperaría a Archie detrás de la salida del desagüe en donde el saldría para que Veronica se lo llevara hacia Betty y Reggie y finalmente nos encontraríamos en el búnker.

—Kev, ¿por qué no esta abierta la reja aún?—Pregunté llegando al lugar y viendo que el aún luchaba contra la reja.

—La reja está con candado.—Dijo me acerqué a él y saqué un pinche de mi cabello, algo que aprendí de la chica de coleta rubia.—Pero mira, Joaquín está aquí, debo ir tras el.

—Yo abriré esto, pero no puedes ir con Joaquín, ¿qué pasará con Archie?—Pregunté confundida.

—Volveré, lo prometo.—Y salió corriendo de ahí y suspiré frustrada al ver que la reja no abría.

—¡Mierda!—Maldecí, la reja estaba apunto de abrirse.

—El vocabulario, Allison.—Escuché al pelirrojo a penas en la tubería, molestándome como lo hace siempre.

—¡Archie!—Exclamé y la reja por fin se abrió dándole paso a un maloliente, con tierra y sangre Archie.

Con quejidos y dolor, salió del estrecho lugar con mi ayuda, en donde cayó al piso como si fuera un saco de papas.

—Ricitos.—Nombró el apodo que me tenia cuando pequeños y lo abracé como pude riéndome.

—Pelirrojo.—Apodé de vuelta con una sonrisa melancólica, y podía jurar que con ojos llorosos de emoción.

—¿Qué te tomó tanto tiempo?—Habló aún agitado.

—Podría preguntarte lo mismo a ti.—Murmuré revisando su cuerpo.

—¿Esta ropa es para mi?—Preguntó levantando un poco su cabeza y tomando la chaqueta que estaba debajo de ella, pero el dolor hizo que volviera a acostarse en ella.

—Dios, estás sangrando.—Exclamé sin poder responder a su pregunta anterior.—Presiona aquí.—Indiqué haciendo que presionara en la herida mientras yo como podía sacaba su chaqueta de su cabeza.

—¡Archiekins!—Gritó Veronica llegando hacia nosotros tirandose hacia Archie para abrazarlo.

—¡Estoy aquí, estoy aquí! Llegué.—Gritó Kevin llegando hacia nosotros también.

—Veronica, Archie tiene una puñalada. Llévatelo con cuidado, por favor. Ya sabes donde están Reggie y Betty.—Ordené rápidamente y ella asintió, llevándoselo del hombro mientras Kevin se colocaba la chaqueta de las Serpents que había traído conmigo aparte de la mía.
—¿Estás listo, Keller?—Pregunté con una sonrisa desafiante mientras me sentaba en la moto colocándome mis lentes y un casco, pasándole el suyo.

—¡Oh diablos, si!—Gritó haciéndome reír y sentándose detrás mío. Hice rugir la moto y partió el recorrido.

A una velocidad no tan rápida, pasé por al lado del director y de los guardias, los cuales estaban estancados por el auto sin funcionar gracias a Veronica. Escuché como gritaba para que vinieran por nosotros y segundos después escuché motos viniendo atrás.
Se metieron con la persona equivocada, estúpidos.
Aumenté la velocidad al punto de sentir el miedo mezclado con adrenalina de Kev, por mi parte, había pura adrenalina. No pensaba en juegos, en lo que estaba haciendo o en lo que podía pasar. Solo en la velocidad de la moto y en concentrarme en no provocar un accidente.
Tal y como predijimos, estaba el director y los guardias al otro lado del bosque, haciendo que frenara, no tan bruscamente, dándole tiempo a Kev para bajar.

Riverdale, The Dangerous Town | TTOS3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora