Capítulo 4

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𝐂𝐚𝐩𝐢́𝐭𝐮𝐥𝐨 4

𝙲𝚄𝙰𝙽𝙳𝙾 𝚃𝙴 𝙴𝙽𝙰𝙼𝙾𝚁𝙰𝚂

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Habiamos tenido un gran festin de comida, pollo, verduras, carne, postre, era como comer con los reyes de Inglaterra. Terminando de comer decidí salir al jardín, había demasiado terreno por recorrer, así que tendría demasiado tiempo para recorrerlo por completo. Estaba rodeado de grandes árboles, llenos de hojas y que decir de él pasto, era muy verde y olía como recién cortado. Además las esquinas de la casa tenían flores preciosas, de colores rojos y blancos.
Segui con mi recorrido, quería observar mejor el frente de la casa, al girar en la pequeña curva, vi a un chico que parecía estar ebrio o lo suponía por la manera en que se movía, de un lado a otro, me acerqué a él para tratar de detenerlo, de verdad se tambaleaba mucho.

- Hola- intente llamar su atención- ¿Te puedo ayudar? ¿Estas bien?

- Yo...est...estoy...muy bien- además de la ebriedad que se notaba en su voz, apestaba a alcohol

- ¿Acaso te bañaste en tequila? Realmente estás muy mal, puedes caerte y hacerte daño- comente intentando sostenerlo con mi mano

El chico me miro.- Ella me...hizo....daño, mi novia me dejo- soltó casi llorando, sus ojos solo estaban algo cristalizados

- Lo sien...- hable a medias ya que él siguio hablando

Miro al frente y apunto a la nada.- Me dijo, "Diego, ya no quiero nada contigo, terminamos"- ahora entendía, el apuntaba simulando que él era su novia, imitaba la escena

- De verdad lo sin...- esta vez yo me detuve sola- Espera, ¿Diego? ¿Diego Palm?

Asintió.- Ese soy yo- sonrió un poco

-Bien, me alegro de haberte encontrado. Se que no recordarás esto, pero yo soy tu prima Emily y ahora te llevaré dentro de la casa- informe mientras ambos caminábamos

Él sólo se quedó callado, mientras que yo entre con él a la Mansión Palm, no había nadie abajo, así que opte por subirlo hasta erguido habitación en el segundo piso. Diego me guiaba, sabía que el camino era corto, pero todo su peso cada vez se posaba en mi y el camino se hacia más largo. Para mi suerte me topé a Peter en el pasillo y me ayudó a llevar a Diego a su habitación.

Dejamos a su hermano sobre su cama.- ¿Porque esta así?- pregunto mirandome

- Bueno, por lo que me contó, su novia lo termino- respondi pensativa

- Ya veo- Peter asintió- Pero no es para tanto

- Te explicaré el porque si es para tanto, pero mejor salgamos para que tu hermano descanse- me adelanté y salí primero, seguida de Peter

Bajamos hasta el jardín, ya que quería ponerme comoda y estar afuera para lo que le explicaría a Peter, ademas de que el calor del sol estaba en su punto y era muy agradable.

Peter tomó asiento y yo también.- Entonces, ¿Porque importa tanto?

- Cuando una persona se enamora de verdad y después le rompen el corazón, caes en un vacío que no puedes explicar- explique de la manera más sencilla posible- En pocas palabras esa persona era quien te complementaba, por eso te duele que te deje...¿Cuántos años tenían saliendo Diego y su novia ?

- Creo que 2 años

- Bueno así sean días, meses o años el tiempo que tengas con esa persona, si te enamoras te va a doler cuando ya no esté, por eso es válido y es muy para tanto que Diego este así- justifique, aunque no sabia si era lo correcto

- ¿Entonces esta muy mal?- Peter cambio su semblante a uno de preocupación

- No tranquilo, el podrá salir de esto, pero dale tu apoyo, eso lo ayudar más- dije con rapidez, no quería dar un mensaje erroneo

- ¿Puedo ir con el ?- Peter se levantó de la banca

Asentí.- Claro y llevale un café para que se sienta mejor

El sólo asintió y se fue, yo me quedé ahí mirando a los árboles, pensaba en que si seguía con mi plan, si les quitaba todo lo que mi padre me dejó, ellos se quedarían en la calle, todo por culpa de la avaricia de su madre.

No puedo hacerles eso, no a ellos. Son mis familia, son mis hermanos, no parecen ser como su madre.

Entre a la casa poco después, ya había oscurecido y decidí ir a dormir, pero antes pase al cuarto de Tom para hablarle de lo que había estado pensado.
Al llegar a su habitación, me percate de que su puerta estaba abierta, me asome un poco y Tom estaba sentado en el sillón individual, mirando algo de televisión.

Él noto mi presencia.- Alyssa, ¿Que pasa?- pregunto en un susurro

- No puedo hacerlo- negué

- ¿De qué hablas?- me miro, aún sin entender

- No quiero lastimar a los chicos, me guste o no, son mis hermano y no por culpa de su madre los dejaré en la calle- explique mirando hacia el piso- ayo no soy así, Tom

- Eso no pasará te lo prometo, tu puedes seguir con el plan y cuando tengas tu dinero puedes ayudarlos, no tienes que dejarlos solos- afirmó en un tono de alivio

- ¿Y no crees que vayan a odiarme por lo que le haré a su madre?- cuestione obvia. Si alguien le hiciera lo mismo a mi madre, yo me molestaría

- Creo que podrán entender el porque de las cosas- Tom asintió levemente-Pero ya no pienses en eso y mejor ve a dormir

- Bien, descansa- sonreí de lado y seguí mi camino por el pasillo en dirección a mi habitación

Tan solo esperaba que todo saliera bien, que nada interfiera en mi búsqueda por el testamento original y que Peter y Diego no me odiaran.

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Fecha de publicación del capítulo:
21 de Enero de 2020

Fecha de edición del capítulo:
16 de Diciembre de 2021

𝐿𝑎 𝐻𝑒𝑟𝑒𝑑𝑒𝑟𝑎 ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora