Capítulo 44.

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Capítulo final.

Después de aquella canción Callie y yo hablamos más y más. Raramente esa canción nos acercó y arregló la comunicación perdida que teníamos, esa canción ayudó a una línea frágil a no romperse, a hacerse más sólida.

Después de unos meses, Callie decidió desobedecer a sus padres y regresar a Sídney; estoy demasiado feliz, porque hoy regresa, hoy la volveré a ver.

Faltaban algunas horas para que su vuelo aterrizara, y me encontraba o más bien, los chicos se encontraban conmigo en mi casa. Junto con Isabella, Iralbi y Dominic. Extrañamente no era tanto besuqueo, pero las parejitas seguían derramando su miel. 

Amaba estar con ellos eran mis mejores amigos y amigas, y estaban ahí siempre, nunca habían dudado de mí; eran las mejores personas que se podía conocer y las mejores personas que puede haber. Y pensar que todo comenzó con simplemente Calum de mejor amigo, luego, Dominic, Luke, Iralbi, Ashton, Isabella y Callie.

No cabe duda que la vida me estaba siendo feliz enriqueciéndome de amigos y aunque quise aislarme cuando sólo conocía a Calum ellos me ayudaron a no hacerlo, me hicieron entender que simplemente aislarse no está bien, que todos necesitamos de amistad en nuestra vida.

Ashton.

-Ya-hablé entre jadeos. La risa no me dejaba hablar claramente-Cariño, para-pedí una vez más.

Isabella dejó de hacerme cosquillas y observó el panorama, habíamos llegado a nuestro destino.

-¿Llegamos?-preguntó aún observando por la ventana del auto, asentí y abrí la puerta. Salí, rodeé el auto y le abrí la puerta caballerosamente. Ella bajó del auto sonriente, me dijo un "gracias" a lo que yo le respondí con un "no agradezcas, cariño" mientras tomaba su mano y las entrelanzabámos. Caminamos hasta la tienda de pizza la cual no quedaba tan lejos; habíamos venido nosotros porque ninguno quería ir y en vez de pedir pizza por telefóno decidieron que era mejor comprarla.

Pasamos por un callejón de mala muerte y un chico algo sospechoso se puso de pie justo enfrente de nosotros.

-Dénme todo lo que tenga-pidió en un tono agresivo mientras mostraba un arma de fuego.

-¿Esto es una broma?-pregunté algo extrañado, el chico no tenía pinta de algo así. Parecía alguien realmente normal.

-No estoy bromeando, dame todo lo que traigan-volvió a hablar con aquél tono tan agresivo. Negué con la cabeza, sujeté la mano de Isabella lo suficiente fuerte como para no lastimarla e intenté rodear al chico quien no dejó que lograse hacer lo que deseaba; y ya molesto jaloneó a Isabella logrando arrebatármela. Lo empujé a él.

-¡Déjala!-volví a tomar la mano de Isabella.

-¡Dáme lo que te pido!-exclamó dejando mostrar el gran disgusto que tenía. Las sirenas de la policía se escucharon algo cerca, el chico volteó a ambos lados dándose cuenta de que tenía que huir y si no lo hacía, lo arrestarían. Nada satisfecho de mi conversación para nada amena con él jaloneó a Isabella una vez más y le disparó en el brazo; la ira corrió por todo mi cuerpo, traté de  alcanzarlo pero al ver lo imposible que era decidí quedarme con Isabella ahí, la recosté cuidadosamente en un lugar cerca de ahí moentras algunos espectadores se detenían y trataban de ayudarme.

La tristeza era ahora la que me invadía por completo.

-Vas a estar bien, princesa, lo prometo-le dije mientras acariciaba su mejilla suavemente; obtuve un asentimiento de su parte como respuesta. Saqué mi celular para llamar a un hospital.

Trataba de mantenerla despierta puesto que veía como sus ojos se cerraban y abrían, trataba de impedir que se desmayase. O peor aún, que se desangrase.

-Te amo, Ashton- fué lo único que su débil voz pudo pronunciar debido a la gran pérdida de su sangre, después cerró los ojos.

-Yo también te amo, Isabella-contesté aunque sabía que no podía oírme, las lágrimas corrieron por mi cara ¿Isabella estaba viva? ¿Muerta? No lo sabía exactamente. ¿Por qué se tardaba en venir la maldita ambulancia?

Minutos después, la ambulancia al fin llegó, de ahí bajaron paramédicos con una camilla. Cargaron a Isabella y la colocaron en la camilla mientras revisaban su herida; subí a la ambulancia junto con ellos. Comenzaron a hacerme preguntas acerca de cómo había tenido aquél accidente, le expliqué todo lo que había pasado en el camino hasta el hospital; una vez que las preguntas finalizaron llamé a los chicos.

-Hey, hola-hablé casi audible debido al llanto no podía hablar normalmente.

-¿Qué pasa? ¿Estás bien?-las preguntas de los chicos-y las chicas-preocupados cayeron sobre mí.

-No-suspiré pesadamente. Realmente no tenía ni idea de cómo decirles de lo sucedido-le dispararon a Isabella-solté las palabras aún sintiendo ese inmenso dolor en mi pecho y las imágenes pasaban por mi mente como si de una película se tratase.

-¿Qué?-esa fue la voz de Dominic y la de Iralbi-Vamos para allá-ahora habló Luke. Después la llamada dió tono muerto.

Michael.

Esto debía ser una broma, o un sueño o qué sé yo. Pero no podía pasarle esto a Isabella, no.

Conduje lo más rápidamente posible hasta el hospital en el que se encontraban Ashton e Isabella.

Al llegar observamos a Ashton en la sala de espera, se notaba que había llorado e incluso estaba llorando cuando llegamos.

-Hey, Ashton, calma-Dominic lo abrazó fuerte, después todos nos unimos formando un abrazo grupal.

-No, Domi, Isabella está ahí por mi culpa-se limpió las lágrimas-¡Yo debo estar ahí, no ella!-exclamó, claramente sus ojos hanzel estaban hinchados  y rojos por el llanto que apuesto había durado horas.

-No digas eso, nadie debe de estar ahí-le dijo Iralbi en un tono demasiado serio.

-Familiares de Isabella Winston-apareció el doctor detrás de nosotros, todos nos giramos quedando en frente de él y prestándole atención.

-Yo soy su novio-habló Ashton.

-¿Qué le sucede?-preguntamos al unísono todos preocupados.

-Ya hemos extraido la bala de su brazo, el problema ha sido que perdió mucha sangre y necesitamos personas que donen sangre-explicó el doctor con el típico tono que tienen los doctores que te hace sentir que todo está mal cuando está bien.

Todos donamos sangre para Isabella y una vez que nos sacaron sangre nos sentamos en las sillas de la sala de espera; el televisor estaba en el canal de un noticiero muy reconocido en el país.

-"En últimas noticias, el avión con destino a Sídney se estrelló en el suelo justo en el mar, venía de Los Ángeles. Millones de adultos de la tercera edad y niños se encontraban en el avión junto con adultos jóvenes."- Ahí fue cuando mi mundo cayó.

- Callie - fue lo único que pudo salir de mi boca sin previo aviso.

You're The Only Reason |Michael Clifford|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora