Capítulo 7.

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Este capítulo va dedicado a una chica que quiero morder, golpear y todo<3 es para @EatingMusic, Domi, si lees esto, (que se que lo vas a leer) te amo<3

-¿Cuándo le vas a hablar?-me preguntó Calum sentándose en la acera a mi lado. 

Suspiré pesadamente. 

-No lo sé - contesté después de unos minutos.

Habían pasado 6 meses de que Callie era mi vecina, 6 meses desde que la vi por primera vez y no le hablaba.

Soy demasiado tímido para hablarle a ella, más de lo normal.

Además, había algo que me daba miedo y era que comence a sentir cierta atracción hacia ella. Me gusta ella.

Y como ya le dije a Iralbi, Michael no se enamora. No desde aquella vez.

Estaba comprando flores, rosas, para ser específico, sus favoritas. Caminé hacia casa de mi novia, Danielle, ella era esa chica especial que me comprendía.

Era la chica que amaba

Al llegar a su casa, tuve una sensación ¿extraña? sí, así podría decirse que me sentía. Sacudí mi cabeza para pensar en otra cosa e ignorar esa sensación. Observé la puerta principal.

Estaba abierta.  Me encogí en hombros y entré buscando a mi en ese entonces novia.

Al no verla al rededor, dejé las rosas en la pequeña mesita de la sala de estar y la

Fuí a la cocina, no la encontré.

Toqué la puerta del baño, tampoco estaba ahí.

Así que decidí subir las escaleras e ir a su habitación, en ese lugar era seguro que la encontraría. 

Y, justo de pie enfrente de su habitación vi la escena hasta ahora más dolorosa que haya podido ver en mi vida.

Era ella, era Danielle riendo mientras se besuqueaba con quien se hacía llamar su "amigo de la infancia"

-¿Danielle?-mi voz sonó ronca. Traté de sonar 'normal' como si estuviera 'bien'.

Ella al oír el nombre de mi voz sólo se separó de aquél chico.

-¿Mike? ¿Qué haces aquí?-me miró sorprendida.

-Había venido a darte una sorpresa-contesté fríamente.

-Yo…yo…puedo explicarte-contestó ella.

-¿Qué me vas a explicar? ¿qué me estabas engañando?-

-N…no - tartamudeó.

-Eso parecía-mi voz se quebró, mis ojos se cristalizaron y mi vista se estaba tornando borrosa por las lágrimas que se estaba a punto de derramar.

-Mike…

-¡No me llames así! ¡No me llames de ninguna forma!

-Pero.... yo... - Su voz temblaba, o al menos así lo sentí.

-Tú no me amas.

-Claro que sí.

-Si me amaras no te habrías besado con él. - mi voz fue temblorosa, tenía tantos sentimientos en mí, ¿cómo podía ser que la confianza de años, el amor de años, cayera en segundos?

-Él me besó, créeme, yo no quería.

-Se notaba que tú no hiciste nada para alejarlo ¿o soy ciego?

-Michael…

-Adiós Danielle.

-¿Por qué te despides?

-Se acabó, ¿Crees que seguiría contigo después de esto? 

Sin decir más, salí de ahí, corrí lo más rápido que pude, tiré las rosas en un bote de basura que me topé en el camino.

Al llegar a casa mi madre me miró preocupada, ¿quién no lo haría? quiero decir, ver a un hijo con los ojos tan cristalizados que parece que romperá en llanto en cualquier momento, preocupa a cualquier padre.

-Hijo ¿pasa algo?

-No quiero hablar ahora, mamá

Subí a mi habitación corriendo, y me tiré en la cama llorando como nunca antes había llorado, con la música a todo volumen y una sola canción en repetición nuestra canción.

No me dí cuenta que estaba llorando como aquella vez. Estaba llorando por la misma razón. Cantando la misma canción. 

Me seguía doliendo.

No me había dado cuenta de que Calum me estaba abrazando y yo lloraba como si no hubiera un mañana sobre su hombro.

-Está bien, todo estará bien-trató de tranquilizarme.

-Después de lo que pasó con Danielle no sé si pueda tener otra relación. Aún no supero del todo que me haya engañado, no quiero tener otra novia, no quiero parecer un celoso esquizofrénico  con ella -sollocé- no estoy listo, aún no.

-Pronto lo estarás, sólo necesitas tiempo.

-En 2 meses es un año de que terminamos, ¿no crees que cualquier persona hubiera hecho su vida ya?

-Tú no eres cualquier persona, eres Michael Clifford, eres un chico diferente, si no lo superas del todo es porque aún te duele, aún sigues roto, y, créeme habrá alguien que repare ese corazón roto.

-¿De qué hablas?-sorbí mi nariz y lo miré con los ojos ya demasiado rojos por el llanto.

-A veces cuando dos corazones rotos se encuentran y se entienden  se prestan partes y forman uno solo-

-Pero Callie no tiene el corazón roto, no está rota.

-Admites que te gusta.

-Me gusta mucho.

You're The Only Reason |Michael Clifford|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora