A Pearl Fey nunca la bajan del estatus de inocente e infantil pese a sus quince años de edad. Su pedestal es prácticamente una isla, lejos de todo e inalcanzable. Si pudiera ser comparada con un cuento infantil, sería el principito. Sólo que no es una isla, o un planeta, sino una aldea. La aldea Kurai'n.
–Trucy es el aviador-Murmura Pearl, mientras hojea su ejemplar del principito. Tan sólo está dejando vagar sus pensamientos, dentro de un rato vendrá el señor Nick, quién quedó de ayudar a Pearl con la decoración para navidad.
Ya falta poco, y ella sigue sin un regalo. Lo detesta. Ella adora a Trucy, es la persona más divertida y simpática que podrá conocer. Sólo pensar en ella hace que su corazón vaya muy rápido, muy distinto a cuando está con otras personas como Maya la Mística o el Señor Nick.
¿Y si...ella es su amiga especial? ¿Acaso es posible? Pero ambas son señoritas...y Morgan Fey decía que una señorita sólo se está con un caballero.
–Si yo soy el principito, Trucy es el aviador...¿Quién es mi madre?–Esa son preguntas de niño pequeño, Pearl, debes pensar en otra cosa, como por ejemplo ¿Cuál será el regalo perfecto para Trucy?
La joven médium le da vueltas al asunto. Maya la Mística dijo que cualquier cosa estaba bien, quizás unas flores «¿Y si Trucy es alérgico a las flores?», a lo mejor un perfume «¿Y si no usa perfume?», a lo mejor un libro «¿A Trucy le gusta leer?».
–Trucy no puede ser mi amiga especial si no sé casi nada sobre ella.
"Así es, pequeña Pearl" diría su madre su estuviera presente "Olvídate de esa chica, y concéntrate sólo en lo importante".
–Yo soy el principito, Trucy el aviador, y mi madre son las personas que no lo han leído y por eso no entienden de que hablo–Fue la conclusión que llegó nuestra joven médium. Entonces escucha pasos, a lo mejor era su madre (que idea tan loca) pero no, era el señor Nick, con un par de bolsas de papel.
–Siento llegar tan tarde, es un caos en los supermercados–Deja las bolsas sobre una mesa, son puros adornos navideños.
–Señor Nick ¿Ha leído el principito?–Pregunta mientras saca un par de serpentinas de la bolsa.
–Eh...creo que una vez, en la primaria...–Se rasca la nuca y sonríe de forma nerviosa–Nunca fuí de leer, tan sólo testimonios y actas judiciales.
–Oh...eso significa que ha Trucy tampoco le gusta leer, al ser su hija...
–Jaja, Trucy tiene un sinfín de pasatiempos, el otro día descubrí que le gusta tejer ¿Porqué lo preguntas?
–Por nada–Toma unas cuantas esferas de navidad y las coloca en el pino, que se encuentra en una esquina de la sala–Señor Nick, estoy nerviosa...
–¿Porqué?
–Nunca he estado en un intercambio de regalos, tampoco he estado en una fiesta de Navidad, y es la primera vez que decoro un árbol...–Mira sus manos, sostiene una esfera roja–¿Y si todo se estropea?
–Si algo sale mal, lo ignoramos–Phoenix tiene una sonrisa cálida, casi paternal–No te preocupes, estaremos todos juntos.
–No quiero que se ignore, quiero que se resuelva.
Phoenix se acerca a Pearl, ya no necesita arrodillarse para estar a su altura pero lo hace igualmente.
–Esta bien, si algo sale mal lo resolveremos todos juntos, como familia.
Pearl levanta la mirada, quizás los demás tengan razón, nunca dejará de ser una ignorante en varios aspectos obvios de la vida. No, ella no es el principito, porque el principito dejó su hogar, y Pearl no quiere dejar su hogar. A pesar de que a veces su atmósfera la ahoga, se lo pasa bien.
Y ahora celebrarán Navidad aquí, porque son una familia.
–Si, está bien–Responde Pearl con una radiante sonrisa, ya sabe que regalarle a Trucy, algo que sea sólo de ellas dos.
Tanto Pearly como Phoenix retoman la decoración. El abogado no había caído en cuenta de lo mucho que ha madurado Pearl, y que algún día será una mujer mayor, que querrá tener sus propias ideas y cumplir sus propios sueños. Pearl ya tiene quince años (igual que su hija, Trucy) y algún día ambas se irán de su lado.
En realidad, ellas son el principito, y Phoenix el planeta que no quiere que lo olviden.
–«No pensaré en eso hasta el día en que pase»–Se dice así mismo Nick. Al ver cómo el sitio se tiñe con los colores de la Navidad, piensa en el intercambio, y por ende, en Miles. ¿Vendrá o se encerrará otra vez?
Las preguntas de Wright serían respondidas mañana, donde Franziska invitaría a Edgeworth a desayunar, y de paso, a charlar sobre ciertas cosas. Rencillas familiares.
Continuará...
Si no han leído el Principito, lo recomiendo mucho XD es muy enternecedor.
Nos vemos en el siguiente capítulo! ❤️
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Cuatro Regalos (Ace Attorney)
Fanfiction"Por favor, ámame está Navidad y el resto de nuestras vidas". Un intercambio de regalos no parece ser la gran cosa. Pero Maya Fey no es tonta, y está dispuesta a unir ciertos corazones. Por eso mismo, está Navidad, varios límites serán cruzados. Emp...