Cuatro Regalos (Ace Attorney)

Nochebuena

Maya se levantó temprano aquel veinticuatro de diciembre. La mansión Fey ya está decorada, la cena está en sus últimos detalles, y todo parece ir bien. Pearl también ya está levantada, con un abrigo grueso con la agradable cara de Santa Claus estampada.

–Maya la Mística, hoy es el día ¿verdad?–Pregunta la joven médium.

–Si, así que será mejor que nos preparemos–Ambas chicas alzan sus puños, convenciendose así mismas que será la mejor noche de sus vidas.

Mientras nuestra par de médium terminan de preparar todo. En casa de los Wright las cosas ya están ruidosas, tanto Phoenix como Trucy están terminando de envolver sus regalos.

–¿No me vas a decir quien te tocó, papá?–Pregunta la maga, quien trae puesto un simpático gorro de Santa Claus en la cabeza, mientras que Phoenix lleva un suéter de lana adornado con copos de nieve.

–No se supone que tengamos que decirlo–Responde Phoenix, terminando de envolver una caja algo grande.

–Menudo regalo ¿qué es?

–Nada espectacular, tan sólo el regalo del intercambio.

–Es muy grande, entre más grande son los regalos, mejor.

–Esa es filosofía de niña pequeña, Trucy–Se escuchan golpes en la puerta, al abrirla se encuentran con Apollo y Larry–Ah, buenos días.

Tanto Justice como Butz, llevan un regalo cada quien. No hace falta preguntar del porque. Apollo viste casual con un abrigo con capucha. Según Trucy "los cuernos de Polly parecen los de un reno", por lo que técnicamente va vestido para la ocasión.

La camiseta de manga larga de Larry tiene un "Feliz Halloween" en el centro.

–Se supone que estamos a diciembre, Larrry–Protesta Phoenix.

–Ya, pero no pude comprar una camisa adecuada, me quedé sin pasta.

–¿Y eso?

Larry levanta su regalo, también es algo grande.

–Por esto Nick, gasté todo en el regalo.

–¡Wow! Qué caballeroso por su parte, tío Larry–Comenta Trucy con una sonrisa–Se ve que le dedicó mucho esfuerzo.

–«No recuerdo cuando fue la última vez que Larry se concentró en algo»–Piensa Phoenix, después se dirige a Apollo–¿Y a ti como te fue?

–No fue difícil, la persona que me tocó es algo... predecible.

Esto a Trucy le recuerda la promesa que hizo con Klavier. Esta noche, después de abrir los regalos, se le confesará a Pearl, y Klavier hará lo mismo con Apollo. ¿Qué tan mala o buena idea será eso?

La puerta vuelve a sonar. Phoenix abre la puerta, está vez son Athena y Simon. La abogada se ve adorable con ese abrigo rojo, mientras que Simon sólo lleva una bufanda blanca con un adorno de nochebuena. Posiblemente Athena lo obligó a ponérselo.

–¡Ya estamos todos!–Exclama la abogada.

"¡Quiero abrir regalos!" Exclama Widget.

–Eso es hasta la noche–Responde Apollo–Tendrás que ser paciente.

–Joooo, pero yo los quiero ahora.

–Esa es filosofía de niña pequeña–Comenta Blackquill con una sonrisa burlona.

–Espera–Dice Trucy, algo pensativa–¿Cómo vamos a llegar a la mansión Fey si nadie de aquí tiene auto?

–No se preocupen, Simon tiene auto–Responde Cykes con la misma sonrisa alegre de siempre.

–Pero no vamos a caber todos–Comenta Apollo.

–Tienes bicicleta Apollo, mejor ve pedaleando–Contesta Blackquill.

Apollo tan se queda callado. Pensando en que no se esperaba otra respuesta menos mamona de parte de Simon.

–El tío Miles tiene auto ¿no?–Dice Trucy–¿Porqué no le preguntas, papá?

Porque Edgeworth es muy celoso en cuanto a su auto deportivo de refieren. Con Klavier no hay problema, tiene su moto (otro celoso de su transporte), pero Phoenix recuerda que Edgeworth iba a llevar a Franziska, Gumshoe y Maggey. A lo mejor lo puede ayudar.

–Esta bien, voy a llamarle–Contesta Wright mientras saca su celular–«Espera, si Miles se va a tomar la molestia de llevar a Franziska y al inspector ¿significa que va a ir?».

Decidió llamarle, y milagrosamente le respondió a la primera. Para ese entonces, afuera del departamento de Edgeworth, varias personas se encuentran reunidas.

–¡Muévete inspector Cutre, no tenemos todo el día!–Un latigazo aterriza en cara de Dick.

–¡Auch! ¡Lo siento señora!–Gumshoe acomoda todo los regalos en la cajuela y lo cierra.

–Franziska, creo que exageraste con los detalles–Comenta Edgeworth mientras atiende a su teléfono–¿Qué pasa Wrigth?

–¿Crees que nos puedas ayudar en el transporte? No entramos todos en el auto de Blackquill.

–¿Están contigo?

–Si.

Edgeworth mira su auto, Gumshoe y Maggey están sentados atrás, y Franziska espera impacientemente en el asiento del copiloto.

–Creo que tenemos espacio para dos persona más–Responde Edgeworth, entonces al otro lado de la línea se escucha la voz de una chica "¡Yo quiero ir en el deportivo del tío Miles!" seguida de otra voz femenina "¡Nunca he estado sentada en un auto tan caro!"–Pues ya está decidido, ya vamos para allá.

La llamada termina, y Phoenix les cuenta los demás el plan.

–¿Porqué siempre Edgey se queda con todas las chicas?–Pregunta Larry–Tiene a Franzy, a Maggey, ahora a Trucy y Athena.

Tanto la maga como la abogada están emocionadas, hablando de lo genial e impresionante que es Edgeworth. Blackquill piensa que a lo mejor debe comprar un auto más lujoso.

Y así, todo está decidido. Tan sólo queda ir a la mansión Fey. Pero estamos hablando de Phoenix Wrigth y su pandilla, e incluso un viaje en auto puede terminar en desastre...

Continuará...

Quería terminar esto antes de Febrero X"D ni modo. De todas formas no falta mucho para que lleguemos al final.

Nos vemos en el siguiente capítulo! ❤️