06.

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Mi mente continuamente está pensando en aquel chiquillo de sonrisa encantadora que me recibe con los brazos abiertos, confiando en que Seokjin Hyung nunca podría dañarlo.

¿Como le explicó que siempre lo hago?

Amo su sonrisa, sus lunares, la cicatriz que tiene en la mejilla me parece de lo más adorable, tambien ver sus ojos convertirse en línea cuando sonríe, observar sus sonrojos, y la manera tan rara que tiene para comer y combinar las cosas.

Pero también amo escucharlo gemir, amo verlo arrodillado frente a mi mientras su lengua recorre todo mi miembro, amo saber que siempre estará aquí para mi.

¿No?

Quizá ante el mundo yo solo sea un maldito que se aprovecha de él, pero no me interesa, estoy consciente de que estas sensaciones no debería experimentarlas, por su edad, pero poco me importa, por que se muy bien que soy el primero y también espero que el único en escucharlo pedir por más, y aferrarse con las piernas a mi.

Desde la primera vez que lo hice con él no he podido dejarlo descansar, es como mi droga personal, pero nadie sabe qué soy adicto a ella. Lo hemos hecho aún cuando ambas madres están en la planta baja, lo hemos hecho en la cocina de mi casa, aún cuando en cualquier momento alguien pudiera entrar.

Creo que de las decisiones más estupidas y arriesgadas que he tomado en mi vida. La numero uno eres tú.
Pero... nada ni nadie cambiará que yo siempre, siempre siga usando y apoderándome de tu cuerpo.

(...)

Ambos caímos en la cama exhaustos después de una buena ronda de «juego», esta vez estábamos en mi habitación, el pequeño pecho de Gguk subía y bajaba regulando su respiración.

-¿Seguiremos jugando a esto?- pregunto Gguk, ambos teníamos la mirada en el techo de la habitación, como si eso fuera lo más interesante y ninguno de los dos estuviera sudado y sin ropa.
Su pregunta me dejo un poco atónito, pero sin voltear a verlo le conteste igual con preguntas.

-¿Que quieres decir?¿Acaso ya no te gusta?- Mentiría si les digo que no tengo miedo de su respuesta, pero si de su boca sale un «Así es Hyung, no quiero jugar más» estoy jodido.

-No, no es eso... solo- Hizo una pausa y se tapó con la sábana azul de mi cama.- Es solo que cuando terminamos de jugar me da sueño y haces que me tome esas pastillas que difícilmente me pasan.- Mierda, era eso, debía darle esas pastillas eran para el dolor si no se las daba nuestras madres preguntarían el por qué Jeongguk se sienta extraño y el por qué camina así.

Es por eso que se las doy, pero justamente dice esto ahorita, ahorita que en la mesita de noche de mi habitación hay un vaso con agua y con las pastillas que le daré cuando salgamos de bañarnos.

-Es por tu bien.- Conteste y me reincorpore en la cama extendiendo mi mano hacia el.- Vamos Jeongguk, vamos a jugar en el baño.- Este me dio tímidamente su mano quitándose las sábanas de encima.

Antes de ingresar al baño le di una rápida mirada a mi habitación, que en el suelo de madera conservaba nuestras ropas arrugadas, que en mi escritorio tenía un montón de pendientes y tareas. Y donde también estaba una foto de Kook y yo en navidad.

Maldito Jeongguk, haces que me sienta un poco mal por lo que te hago «jugar».

ATTE: LaladyJeon 🍒

Little Kook, will you remember me?🍂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora