Capítulo 10

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Leon y yo fuimos corriendo en dirección a la plataforma.

- El sistema de sumersión del nivel uno se activará pronto - Habló la computadora a través de los parlantes. - Diez, nueve...

Mientras corría, veía que Ángela estaba retrocediendo lentamente al borde del abismo, tomando distancia de aquel monstruo. La criatura se acercaba cada vez más a ella.

Luego dirigí mi mirada al frente, Leon estaba más adelante que yo, era muy rápido.

- Cinco, cuatro, tres, dos, uno. - Contó y sentí temblores por el suelo.

El nivel uno cayó al vacío.

Llegué con Leon y logramos subir a la plataforma. Mi corazón palpitaba muy rápido.

El agente y yo miramos en dirección a Ángela.

El monstruo se detuvo al observar algo en la superficie. Yo me quedé perpleja mirando atentamente. La criatura lo agarró, al parecer era una fotografía. La mujer tocó sus bolsillos y no dejó de apuntarlo con su arma.

De pronto el monstruo comenzó a chillar y Ángela bajó su arma acercándose a él.

- ¡Curtis! - Exclamó preocupada.

- ¿Qué mierda? - Pregunté confundida. - ¿Acaso es su..?

- Sí. - Contestó Kennedy mirando la escena. - Pero ya no es el mismo.

- No quiero hacerte... daño. - Dijo Curtis dentro de esa aberración.

- ¡Podemos salvarlo! - Exclamé esperanzada mirando a Leon.

- Recuerda, no tenemos la cura, además, si la tuviéramos ya es muy tarde, su mutación está muy avanzada, el virus se apoderó completamente de su cuerpo, pronto lo hará con su mente. - Explicó seriamente el rubio.

Volvimos a mirarlos y vimos que Ángela se quedó parada firmemente frente a lo que antes llamaba hermano mayor.

- Peligro, el sistema de sumersión del nivel cero se activará pronto. - Oímos nuevamente. - Diez, nueve, ocho...

- Mierda. - Murmuró el norteamericano.

Corrió hacia el otro lado de la plataforma y esta comenzó a tambalearse y girar.

- Leon, espera. - Dije pero ya no me escuchó.

Me mareé un poco y casi caí de la plataforma, afortunadamente logré sujetarme de ella a tiempo. Me aferré a la misma y miré al rubio llegando a la otra esquina.

- Cinco, cuatro, tres, dos, uno. - Terminó el conteo.

Yo tragué saliva y por un momento detuve mi respiración.

El infectado rugió como un voraz animal y justo antes de que atacara a la agente, Leon logró sujetarla y el nivel cero se hizo abajo.

Cuando parecía que aquel monstruo había caído en lo profundo, un tentáculo apareció y agarró el pie de Ángela, estirándola junto a Leon.

Esto ocasionó que la plataforma se girara, soltando algunos cables.

- ¡Ahh! - Grité.

Mi cuerpo casi cayó al vacío, pero logré aferrarme con mis brazos.

Con esfuerzo miré en dirección a Leon, el rubio sujetó con todas sus fuerzas a la mujer y se aferró con una de sus piernas a la plataforma, pero el monstruo seguía vivo, sosteniéndose de Ángela. 

- ¡Rayos! - Murmuré.

- ¡Laura! - Exclamó Kennedy y dirigió su mirada hacia mi.

- Creo que...vamos a morir aquí. - Comenté y reí levemente.

La ironía y el sarcasmo se apoderaron de mi y la situación me hizo entrar en pánico.

- Sueltame Leon o caerás tu también. - Sugirió Ángela. - No puedes morir, tienes que destruir esos virus.

La plataforma cada vez más iba cayendo. No soportará más. Moriremos.

- ¡Por favor, Leon! ¡No me salves! - Insistió.

- Si no intentas salvar una vida, ¡nunca salvarás la de nadie! - Exclamó Kennedy. - ¿No es así, Curtis?

El rubio con esfuerzo quitó su pistola y apuntó al monstruo. Lo disparó directo a la cabeza. El tentáculo liberó la pierna de la agente y la criatura cayó al abismo.

Desde lo profundo salieron las llamas, incinerando todos los niveles y a Curtis allí abajo, hasta que el vacío fue sellado.

Vi como Leon sujetó de ambas manos a la agente y se miraron a los ojos por un buen tiempo.

¿Y estos dos qué?

- Ejem, ejem... - Los interrumpí tosiendo. - ¿Cómo se supone que vamos a...?

Pronto sentimos la plataforma caerse. Los tres gritamos.

Mis manos se resbalaron y caí justo debajo de la plataforma, mientras que los dos agentes cayeron un poco lejos de mí.

- Ah, mierda, mi espalda. - Murmuré adolorida.

Miré a mi costado, Ángela estaba encima de Leon. Solo hice una mueca.

Dirigí mi mirada hacia arriba. La plataforma iba a caerse encima mío.

- ¡Laura! - Escuché la voz de Kennedy.

Echó a un lado a la mujer y corrió hacia mi para ayudarme.

Se deslizó por el suelo, me tomó de la cadera y giramos dos veces para esquivar la plataforma.

El norteamericano quedó encima mío. Su rodilla estaba en mi entre pierna y su mano aún seguía en mi cadera.

Nos miramos a los ojos por un momento y me sonrojé.

Recordé aquella vez, en España, que el me salvó de ser aplastada por una enorme roca...

" Me fijé que el norteamericano estaba encima mío y estábamos en el suelo.

- Me asfixias hombre. Esto es raro, levántate. - Lo empujé bruscamente tirándolo al suelo. - Al fin aire puro. - Suspiré.

- Lo-lo siento. - Dijo Leon boca arriba mirando al cielo tendido sobre el terreno.

- No te preocupes, odio los abrazos pero de todos modos gracias. - Comenté mientras me ponía de pie y me sacudía..."

A diferencia de aquella vez, en esta oportunidad decidí extender mis brazos y lo abracé, pegándolo más a mi.

- Gracias. - Dije débilmente suspirando.

Rompimos el enlace y Leon me ayudó a ponerme de pie.

- ¿Te encuentras bien? - Me preguntó.

- Sí, solo que casi morimos. - Contesté sarcástica.

Leon solo negó con una media sonrisa.

- ¿Están bien? - Se acercó Ángela.

- De maravilla. - Levanté mi dedo pulgar.

De pronto sonó el teléfono del rubio y se alejó para contestar. La mujer y yo quedamos sola.

- Lamento por lo ocurrido. - Decidí romper el silencio.

Ella solo agachó la mirada.

- Su esposa y su hija murieron en la tragedia de Raccoon City. - Musitó. - Curtis solo quiso hacer lo correcto.

Yo me quedé pensando y algo triste por la agente.

- Tú puedes hacer que la muerte de tu hermano no haya sido en vano. Puedes pelear por la verdad. - Comenté.

Ella levantó su mirada y decidida asintió con la cabeza firme.

- Tengo información valiosa. - Nos interrumpió Leon. - Pero antes, salgamos de aquí.

Las dos asentimos.

Resident Evil Una Nueva PesadillaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora