✨Once upon a dream, my dear✨|KaiLen| •Omegaverse•

CAPITULO 10- El amor en tus ojos pude ver

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- ¡Kam! -Gritaba una voz jocosa a lo lejos, como siempre, el pasaba ese llamado de largo, dejando sus bellos ojos posados en el libro que estaba leyendo, ¡Kam! ¡Kam! Distinguía que alguien gritaba, pero no le daba interés. - ¡KAAAAAAAAAAM! -No hasta que la voz se acercó de manera apresurada a él y le chocó de golpe en la espalda. -

- ¡Agh! ¡Miriam!

- ¿Qué haces leyendo? ¡Eres egresado! ¡Descansa un poco y deja esa basura! -Tomó el libro sin esperar su respuesta y lo lanzó sobre sus cabezas. –

- Pero eso era...

- ¿Qué? ¿Caro? ¡Da igual! Alumno cerebrito, quizá no fuiste la estrella, pero hey, volverás a tu nación, serás lo mejor por allá.

- ¿Cómo es posible que seas de nuestro grupo? -Se incluyó a la conversación una albina de mechones rosados. -

- Maika, amore'Maika, por favor, explícale que mi nombre es Kaito.

- ¿Me crees idiota? Lo sé, te conozco desde que te perdiste en tu instalación, pero me gusta tu otro nombre.

- No es otro nombre, es el nombre que Yuuma les hizo creer... Agh, da igual, dentro de poco ya no te soportaré más.

- Al menos finge que vas a extrañarnos.

– El alfa detuvo su andar para besar la frente de la beta. – Eres lo único que voy a extrañar de este sitio.

- ¡DESGRACIADO! -Apareció otro de sus colegas, un rubio que dejaba crecer su cabello a niveles astrales, como cualquier otro nativo. – Dijiste que me amabas ¿Vas a dejarnos así a mí y a junior? -Sobo su vientre con cariño, no había nada ahí, pero ahora que se había graduado, quizá. -

- Yoh, deja de aspirar tiza o ni tú ni tus juniors conocerán el mañana.

- Solo tienes celos porque el rector Tonio si me hace caso. -Sacó la lengua para la chica. - ¿Entonces? ¿Cuándo nos vamos mi amor? ¡Ansío conocer a tus padres!

- Nos iremos cuando sepas algo de Kanji.

- I know a lot of japanese: Toshiba, sushi, omega, arufaru, yaoi, chinese balls-... -Entre sus carcajadas por las carotas de sus compañeros hubo quejas, ambas chicas lo agarraron a manotazos. – Jajaja ¿Si me dejarás grabarte?

- No.

- ¡Por favor! ¡Déjame algo de ti!

- ¿Puedes dejar que recoja mis cosas en paz?

- Oh ¿Van a la residencia? ¡Creí que irían a tomar una última...!

- No voy a decirlo.

- Pero si ya lo pronuncias mejor que antes, jejeje.

- Déjalo en paz Yohio, por eso nadie te quiere.

- ¡En el fondo me aman! ¡Yo lo se! ¡Me van a extrañar cuando solo haya carotas en sus trabajos!

- Si eso pasa, te llamaré para que trabajes conmigo.

- ¿Enserio Maika?

- No. -Todos rieron por como jugó cruelmente con las emociones del avivado omega. -

Kaito tuvo que acceder a tomar una "Biearu" luego de terminar unos pequeños tramites, pasaron su última parranda en un lugar local no tan lejos del campus. Dado a que habitaban distintos pisos se despidieron de una vez en el elevador, entre lágrimas embriagadas y sonrojos cohibidos. La albina de raíz española era acompañada por el nipón, de todos, eran los más íntimos debido a su situación extranjera.