CAPITULO 17- Como lo hiciste una vez en un sueño

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"Yamanakako, Yamanashi, proximidades del monte Fuji, Japón". Decía en letras rojas alrededor del círculo dibujado sobre el folleto que le dió su mejor amigo. Estudió el papel poco convencido de ser parte de aquel viaje. Quedó de pie frente a su cama sin mover ni un pelo por lo que, con total libertad, Gakupo divagaba en su armario para ayudarle a armar su maleta.

- ¿Por qué? - Persiste el necio alfa de baja auto estima. -

- Necesitas unas vacaciones. ¿Cuándo fue tu último viaje?

- Fui a-...

- Que no se tratara de negocios.

- A ningún... Lado.

- ¡Será divertido! Hoteles, viajes por el lago, aguas termales.

- Sí, como si no hubiese estado en un hotel en toda mi vida, construyendo centros vacacionales la otra mitad e inaugurando parques recreativos en otra. ¡Estar encerrado en la mugre de mi casa son vacaciones para mí!

- Gracias por presumir, ahora cállate y quédate aquí. Tengo que buscar tus utensilios de higiene personal en el baño.

- Ya no pienso tanto en Len. - Esas palabras detuvieron el invasivo andar de su colega. -

- No pregunté sobre eso...

- Como sea, no lo hago. Este viaje es tonto, no necesito un spa mental o una-mierda...

- De cualquier forma, considero que será muy bueno para ti hacer este viaje. Créeme.

- Gakupo, sé que eres mi mejor amigo.

- Gracias. - Sonrió conmovido. -

- Pero no tienes que preocuparte por este asunto, estoy bien. Está bien.

- No solo se trata de ti Kaito. Eres un adulto y tienes tus propias elecciones, pero déjanos ayudarte en esto.

- ¿Nos?

- Todos nosotros, tus amigos.

- Oh, vamos...

- Sabemos que necesitas despejarte de todo tu trabajo, aunque digas lo orgulloso que te sientes ¡Tanta labor debe tenerte estresado!

- Yo... ¿Qué?

- Inauguraste tu primer hotel recién ¡Dios! - Decía emocionado. – Pronto podrías tener una cadena, cielos ¿Cuánto tiempo libre te quedará luego de que eso suceda? Déjanos atesorar algo de tiempo juntos antes de que te comprometas con tu oficio.

- Gakupo, yo-...

- Así que no aceptaré otra negativa tuya, vas a salir a darte un descanso, vas a ponerte guapo y tomaras una adulta vacación junto a los idiotas de tus amigos recién reconciliados. - Le sostenía de ambos hombros para encararlo, sus estaturas tenian una diferencia de 3 cm. - Mañana saldremos a las 10 am. Quiero verte ahí.

- Se negó a responder a todo el discurso, si no tenía otra salida lo prudente sería descansar para resistir el viaje, suspiró derrotado. - Nos vemos mañana, Gakupo.

- Eso es, buen primer paso - Revolvió sus cabellos con burla, el peli azul lo apartó desganado y señaló la salida. – Asegúrate de llevar tu cepillo de dientes... Adiós.

- Good bye papa. - Se despidió en un pésimo intento de sonar animado, necesitada dormir con urgencia. -

Estupendo, su rostro demacrado y el humor bofo era evidente en su andar, lo que parecía estar disfrazado era el motivo de su estado arrastrado por el suelo. No podía mentirse a sí mismo, estaba pensando en la juvenil cabellera rubia, los dolidos ojos aquamarino que poseía y su delicada figura porcelana. Eran vagas las nociones sexuales en su mente, había algo, pero predominaba la ansiedad de simplemente estar a su lado.

✨Once upon a dream, my dear✨|KaiLen| •Omegaverse•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora